Mas que placer

Capitulo cincientainueve

Mi corazón de acelero al leer el último mensaje, no me sentía preparada como para seguir afrontando el tema, me sentía cansada y mal físicamente, Salí de la habitación en busca de mi mejor amigo ¿Dónde estaba? Me acerque al refrigerador y saque un vaso de agua, me sentía deshidratada. Si él no estaba aquí, tendría que recibirlo yo sola y no quería. No me sentía lo suficientemente fuerte como para discutir nuevamente por lo que había pasado. En ese momento la puerta se abrió y mi corazón se aceleró con potencia provocando un hueco en mi estómago. Era will, venía acompañado de mi hermana y una caja de pizza, ella me vio y corrió de inmediato a abrazarme.

– ¡Lo siento hermanita!– Me apretó con fuerza y yo la recibí– Todo va a estar bien, arreglaremos las cosas.

–James me dijo que venía para acá– Informe nerviosa de inmediato. Los mire a los dos con desesperación.

–Creo que es mejor que hables con el nena– Will se cruzó de brazo colocando la pizza sobre la mesita de la sala, yo lo observe con desaprobación.

– ¿Por qué?– Me queje comenzando a hiperventilar. Me sentía muy nerviosa y ya no sabía lo que estaba diciendo. Me senté sobre el sofá, Peny se acercó y me entrego el vaso de agua para que tomara.

–Emma, ya yo hable con el– Me confeso ella y la mire sorprendida y preocupada por Sebastián– Fue al apartamento en la tarde y me conto todo, estaba llorando cariño–Se sentó a mi lado en el sofá observándome con desánimo.

– ¿Sebastián sabe?– Fue lo único que pregunte.

–No te preocupes por él, no lo sabe, pero puede que comience a sospecharlo.

– ¿Dónde está?

–Salió a cenar con Sam, seguro llegara más tarde al apartamento– Peny se inclinó sobre el sofá para abrir la caja de pizza y sacar un trozo de ella. Ummm se veía apetecible, mi estómago rugió, necesitaba comer. Copie su movimiento y tome un trozo, llevándomelo a la boca y deleitándome de los sabores al consumir de aquel pedazo de pizza.

–Escucha nena– Will se ubicó del otro lado del sofá junto a mí– Solo debes hablar con él y dejarlo que te diga lo que sea que tenga que decirte, él te ama y nosotros estamos seguros de eso.

–Will tiene razón, yo hable con Mauricio del tema y me dice que él no sería capaz de hacer algo así, que Natalie– Peny hizo mala cara– La zorra esa, está loca. El si la cree capaz de hacer eso apropósito.

–Nunca voy a borrar esa imagen de mi mente– Gimotee.

–Lo sabemos cariño, pero debes darle el beneficio de la duda–Will tomo de la caja su segundo trozo de pizza. ¡Que rápido come! Yo apenas voy por la mitad del mío. – Pero pasado pisado querida.

– ¿Qué necesitas para saber que las fotos son antiguas?– Pregunto peny a mi lado.

–Que ella me lo diga– Respondí con desagrado.

–Está bien, vamos a donde esta esa perra y la obligamos a hablar– Will se levantó del sofá de inmediato– Puedo llevar un cuchillo y una bolsa para ahogarla– Peny y yo nos quedamos viendo sorprendidas y sin poder evitarlo nos tiramos sobre el sofá a carcajearnos de la risa.

–Eso quiero nena, que te rías– El río también. – Te queremos feliz siempre y sabemos que James lo hará.

–Ustedes saben que él me dirá lo mismo, que es mentira y que tengo que creerle– Me queje.

–Entonces dile que necesitas que ella te lo diga– Peny se levantó del sofá mientras me hablaba en busca de la nevera.

–Esto me parece tan inmaduro– Reconozco y observo como peny trae un helado de mantecado de la nevera y me entran ganas de comérmelo todo.