Jauregui Sisters (Camren)

Capitulo 32. "Sesión de besos."

Camila POV

- No había visto tan feliz a Lauren desde Alexa. - Me dice Clara mientras caminamos hacia lo que parece ser su recamara, se ha ofrecido a enseñarme la suite en la que se quedan siempre que vienen a Nueva York, cosa que sucede tres días cada dos o tres semanas.

Su casa oficial está en Miami, Mike me lo ha dicho cuando estábamos cenando, Chris vive cerca de ellos en un apartamento y Taylor, como aún le falta para entrar a la NYU, debe vivir en su casa. Sigo a Clara quien abre la puerta de la recamara para que pueda entrar y lo hago.

- Sí, supe que Alexa estropeó todo. - Comento observando al mismo tiempo unas cuantas fotos que tienen sobre un tocador. La recamara es más grande que mi dormitorio en la Universidad y eso me sorprende un poco. Tiene incluso una pequeña sala y las paredes están tapizadas.

- Absolutamente todo, Taylor ya no puede siquiera escuchar su nombre. - Asegura la mamá de la ojiverde. La verdad es que si a mi hermana alguien le hiciera eso, también me irritaría hasta escuchar el tonto nombre.

Y como si su mamá la hubiese invocado, la menor de los Jauregui llega hasta nosotras mostrándonos una enorme sonrisa. La chica es la más sonriente de la familia según lo que he visto hasta el momento.

- ¿Te quedarás a dormir con nosotros? Lauren y Vero lo harán, estoy comenzando a planear una noche de chicas, no puedes negarle algo como eso a tu pequeña cuñada, Camila. - Dice tomando mis manos con las suyas, haciendo un puchero como los que yo suelo hacer y aunque no crea que sea la mejor idea, termino por aceptar.

La veo dar pequeños saltos sobre su lugar antes de salir corriendo de la recamara para ir a terminar de planear la noche de chicas. Clara se ríe ante el comportamiento de su hija y acompaño su risa un momento. Veo una de las fotos que hay en el tocador dónde se puede apreciar a la ojiverde contando con al menos dos años.

No puedo evitar tomarla en mis manos para verla de mejor manera y Clara se acerca sonriendo para ver la foto junto a mí. No puedo creer que Lauren hasta siendo una pequeña niña de dos o tres años ya lucia tan hermosa. Sus ojos tienen un tono más verde y me emociona saber que parecen cambiarle de un momento a otro. Sonrío dejando la foto en su lugar para tomar otra donde están los cuatro hermanos, en esta, Lauren luce como de unos quince años.

Casi me atraganto con mi propia saliva al ver a mi chica usando lo que parece ser un uniforme de algún equipo que desconozco. Chris tiene el cabello largo, Vero lleva un vestido corto y tiene esa típica sonrisa en el rostro mientras que Taylor está prácticamente sobre la ojiverde.

- Esa foto fue de cuando Lauren practicaba softball. - Me explica su madre apuntando el atuendo que lleva su hija, eso le da sentido a que estén aparentemente en un campo abierto con personas detrás de ellos.

- ¿Ya no lo practica? - Pregunto con cierta intriga, Lauren se veía demasiado bien con ese uniforme, me imagino como se vería ahora y creo que verla en vivo seria demasiado insano para mí. La ojiverde no es una de esas chicas de las que puedes escaparte con facilidad, a ella la ves y quieres comertela con la mirada.

Vale, quizá no todos, pero apuesto a que si la veo en ese uniforme, lo haría.

Veo a Clara negar con la cabeza y pongo la fotografía en su lugar, hay unas cuantas más pero no soy capaz de detenerme a mirar todas porque la ojiverde abre la puerta de la habitación para caminar hasta nosotras. Su mamá la mira con cierta curiosidad, es obvio que Lauren ha venido para asegurarse de que nada malo esté pasando.

Por algo malo me refiero a una platica de madre-novia que es claro, quiero evitar al menos por hoy. Agradezco a mi chica con la mirada y ella asiente como si estuviese leyendo mis pensamientos, la veo alzar la mano hasta poder tomar la mía y cuando lo hace, entrelazo nuestros dedos.