Ocean Eyes [ Maylor ]

~TWO~

- No mames Brian, que hiciste con esta pobre cosita,?- dijo Freddie al ver al rubio inconsciente.

- Ya cállate Fred, no hice nada, me crees capaz de hacerle daño?- dijo Brian cruzando los brazos.

El rubio estaba inconsciente en una cama en el sótano de Brian.

- Como lo encontraste?- dijo John un poco confundido.

- Fui a pasear y el salió solo..de unos arbustos, tenía quemaduras en la espalda. No me quiso responder, y sólo se desmayó, pero tambaleaba, como si no supiera caminar-

- ALEJAME DE ESO DEAKY!!!- Gritó Freddie escondiéndose en la espalda de John.

- Freddie no seas exagerado, no es una sirena..o triton.- dudo Brian.

- Brian?-

- Si, John?-

- le viste eso?-

Brian se quedó callado.

- PUERKOOOOO!!!- Gritó Freddie.- Entonces si es hombre, pendejo.-

- No te culpo Brian. Parece mujer.- dijo John -Freddie deja de apretarme, me lastimas- se quejó John.

- Perdón..- se apartó un poco.- Sea lo que sea, Brian ten mucho cuidado, y si es una sirena?-

- Lo dudo mucho- dijo El rizado.

- Bueno. Nosotros ya nos vamos- dijo John.

- Adiós chicos- se despidió Brian con una sonrisa.

- Ojalá no mueras- bromeó Freddie.

- Si, yo también te quiero mucho BULSARA-

Freddie y John subieron las escaleras, Brian escuchó que cerraron la puerta.

A Brian le dio hambre y subió por comida.

Al cerrar la puerta, el Rubio despertó.

Ya no estaba desnudo.
Tenía unas prendas viejas puestas.

Vio una puerta negra.
Por curiosidad se levanto.

Era un poco complicado, pues el no acostumbraba a usar sus piernas. Como dije antes, dependía de su majestuosa aleta.

Tambaleaba en el piso de madera.
Estaba por tropezarse cuando se agarró de la perilla de la puerta.
Abrió la puerta y se miró al espejo.

Empezó a tocar su cara.

- Hola?..- saludo Brian cuidadosamente.

El rubio lo miró muy raro.

- Hey tranquilo, no te haré daño...- dijo Brian.- Cual es tu nombre?-

El rubio puso un dedo en su pecho.

- Roger- susurró.

- Roger? Wow, lindo nombre, mi nombre es Brian, Brian May- extendió la mano.

Roger miró raro a Brian. No sabía como extender la mano.

- Qué tienes? No hablas mucho? Oh, no te culpo, yo también suelo ser muy timido, de donde vienes? Donde está tu familia,? Tus padres? Donde están?-

Roger se quedó callado.

Empezó a frotar su mano contra su brazo, explicaba que tenía comezon en el brazo, se estaba quemando.

- Oh ya veo, es algo tarde, no te preocupes, Roger, mañana hablaremos bien, si?-

Roger asintió con la cabeza.

- Nos vemos Roger, descansa- sonrió Brian y cerró la puerta del sótano.

Roger no dejaba de moverse mientras miraba al techo acostado en la cama.

Le empezaba a picar el cuerpo.

Buscó por todas partes una manera de salir.
Se estaba desesperando, pues podría morir quemado o deshidratado.

Vio una pequeña ventana en la pared.

No dudó en patearla y romperla e incluso la pared.

De pronto, Roger empezó a tambalear más de lo normal y se arrastraba por el piso.

Así continuó.

Vio que el mar estaba muy cerca.
Si, la casa de Brian era cercana al océano.

Roger tomó un gran respiro y se dejó caer en el agua.