Ocean Eyes [ Maylor ]

12 [ T. 3 ]

Brian despertó.

Noto que el rubio estaba descansando.

Su respiracion estaba muy agitada.

Brian estaba por levantarse.

- Bri?...- escuchó esa voz que tenía loco a su corazón.

- Rog? - volteó.

- Que sucede? Estás bien?-

- Si tranquilo ésta bien..-

- Acérquese..-

Brian se acerca a el, la mano del rubio está en su pecho.

- Tu corazón dice otra cosa...dime que es lo que ocurre-

- Se que no me amas. Y no se si es lo correcto estar cerca de ti..-

- No, Brian no digas eso.- lo tomó de su mejilla.

- Fue cierto que tu rompiste mi corazón en mil pedazos al dejarme ahí. Fue la peor cosa que pudiste hacerme. Y no se qué decirtte..-

Roger lo interrumpe por un abrazo.

- Perdóname...por favor- a medida que ambos se abrazaban, sus corazones volvieron a conectarse. Tal y como la primera vez.

Los brazos del rubio seguían en el cuerpo del rizado.

Brian aceptó la disculpa.

No dejaba de mirar de reojo las marcas feas.

- No te iba a dejar morir ahí. Sabes?-

- De verdad? Pero me lo merezco-

- No, soy yo. Yo me lo merezco-

- Brian no, eres un ser humano precioso. Y además lo eres todo. Ya no digas eso.-

- Sólo tengo el corazón por bombear sangre, es todo, ya no le encuentro otro sentido..mira, soy un estorbo para estos muchachos...Y para ti.-

- para mi? Brian...-

- Lo se lo se; ya me voy a levantar-

- Quiero que te quedes. -

Brian cambió la mirada estando de espaldas.

- lo dices en serio?-

- Por favor, quédate en mi vida...Y aquí a lado mío dónde pueda abrazarte...- soltó una sonrisa pícara.

Brian suelta una sonrisa.

Ambos se acurrucan en la misma cama, Roger solia abrazar su torso y su cabeza en el hombro del rizado.

- Brimmi, me extrañas?-

- Mucho...- dijo con una voz más calmada.

- Y, me vas a cuidar mientras estoy herido? -

- Más bien, ahora seré yo quien te protegere...No puedo permitir que vuelvas a salir lastimado-

Roger lo abrazó un poco más fuerte.

- Debería ser al revés -

- eS Por que te amo.-

- Que dijiste? -

- Dije que te amo.-

La palabra Te amo.

No la había escuchado en mucho tiempo.

Y más si se trata de el.

Brian comenzó a leer algo para el. La cabeza del rubio estaba en su pecho ahora, se escuchaba los latidos de su corazón al compás de su voz mientras le leía, eso lo comenzó a calmar mucho.

Brian ahora noto que estaba dormido.

- Te extrañe tanto...- susurró Brian. - Ahora me encargaré de protegerte...de cualquier mal.- besó su cabeza.