Un cambio de vida © [1ra temporada]

CAPÍTULO 27: Cada vez me sorprendo más de mi misma

Narra ______

Mientras hacia la comida, les oí susurrar pero no entendí nada de lo que dijeron.

Puse la tortilla en el medio y repartí platos para los tres.

Se sirvieron y lo mismo hice yo. Cuando la probaron me miraron haciendome sentir intimidada. 

Ambos: ¡Es la mejor tortilla de patatas del mundo! – gritaron a coro -.

Reí y me sonrojé. Rubén se lanzó y me besó delante de Mangel, el cual se quedó con la boca abierta de la sorpresa.

Cuando nos separamos estaba aún más sonrojada y él igual. Por una vez, creo que él estaba más sonrojado que yo.

Se quedó un silencio incomodo que duro unos segundos pero que a mí me pareció una eternidad.

Rubén: Al final esta tarde, ¿qué hacemos, vamos a la discoteca?

Rubén rompió el silencio. Seguía rojo.

Mangel: No sé, lo que vosotros queráis, Rubiuh.

Rubén: ¿A la discoteca entonces?

Mangel: Por mi bien, Rubiuh, ¿y tú, ____?

Yo: Claro, siempre estoy dispuesta.

Mangel: Mira, Rubiuh, aprovecha.

Reímos.

Acabamos de comer y fuimos a dar una vuelta por el parque. Rubén me tenía cogida de la mano. Me encantaba que hiciera eso.

Volvimos a casa. Faltaba una hora para que abriera la discoteca así que aún quedaba tiempo para prepararnos.

Subí a mi casa a cambiarme y otra vez el problema de siempre. ¿Qué me pongo?

Me puse el vestido rojo carmín que me puse cuando quedé con Rubén hace un par de días. Los mismos tacones y el mismo maquillaje.

Nos encontramos en frente de mi portal. Fuimos en el coche de Rubén, como la mayoría de las veces.

Cuando llegamos, le susurre al oído a Rubén.

Yo: Te dije que tenías que volver a conquistarme, príncipe azul.

Él se quedó parado con una sonrisa tonta.

Rubén: Pe-pero, ¿Y cuándo te lleve al Retiro?

Yo: Ahh, mira… no lo recuerdo.

Sonreí maliciosamente. Me gustaba hacerme de rogar. Río.

Rubén: Vale, vale, como quieras.