Why We Can Not Be Together? [ChanSoo]

Capítulo 23

20 de mayo de 2017

KYUNGSOO

Ha sucedido tanto, en tan poco tiempo.

Empecemos desde el principio.

E intentaré ser conciso esta vez.

Me encontraba fatal, en las peores condiciones tanto psicológicas como físicas, quizá no tanto fisiológicamente, pero vamos, no puedo tomarme una aspirina cuando me duele el alma, ¿o sí?

Estaba harto de todo, de ser tratado como una escoria humana, como un cualquiera, como si hubiese cometido la peor de las infamias y por ello fuera merecedor de todas las cosas desagradables que me sucedieron en esa escuela. Y si bien, no había hecho nada para detenerlas, tampoco había hecho algo para ganármelas.

Hasta yo mismo me vi envuelto en esa nube fétida, creyendo que merecía esos tratos, esas miradas, esos comentarios en voz alta y baja, pensando que no debía hacer nada, que debía dejar las cosas así, aún si eso significaba aceptar lo que Sehun decía, dejar que Jongin me tratara de la patada, me acosara, dejar que ambos se quedaran en mi casa mientras mis padres no se encontraban en el país y otras cosas que sinceramente deseo olvidar.

Cuantas veces, esa reputación mía me negó el tener un amigo sincero (o simplemente un amigo), el poder ir a un lugar sin que todos susurraran detrás de mi espalda, que los profesores nunca estuvieran de mi lado cuando tenía la razón, o cuando era la víctima...

Cuantas veces me alejó de él.

Despues de todo, Chanyeol era lo único bueno que tenía.

Él.

Y también me falló.

"Lo odio..."

"Kyungsoo es todo lo que dicen de él".

Mis ojos querían llorar demasiado cada vez que recordaba esas palabras, me hacía bolita en mi cama mientras su voz taladraba cada pequeña cavidad de mi alma y la rompía desde dentro. Porque todos podían pensar lo que quisieran, hacer o decir lo que se les viniera en gana, pero tú no, tú no Chanyeol.

¿Por qué tenías que decir algo como eso? No había nada que no deseara más que Chanyeol confiando en mí, que entendiera que todos esos disparates y cotilleos sobre mí, eran simplemente mentiras.

Ese mismo día hablé con mi madre, le conté que había roto con Chanyeol, pues pensaba que éramos pareja. Le dije que todos piensan de mí lo peor, que mencionan cosas terribles en los pasillos mientras me dirijo a mis clases, que muchos me han mencionado insinuaciones sexuales, comentarios de mal gusto, las notas en mi casillero, acoso, hostigamiento y toda esa mierda.

Me abrazó y lloré como nunca lo había hecho, como un pequeño bebé en brazos de mamá. Le supliqué que no me dejara volver a esa escuela jamás, que prefería morir a poner un pie en aquella institución y hablaba en serio. Hasta pensé en el suicidio, no había nadie por quien quedarse, incluso imaginaba la vida de todos mucho mejor sin mí, mis padres con sus empleos exitosos en América, Sehun y Jongin con carta de buena conducta (no estaba yo, así que su vida se reformaba), Chanyeol enamorándose y siendo plenamente feliz con Baekhyun.

Mi madre aceptó sacarme de la escuela siempre y cuando no me negara a ver un psicólogo que me brindaría ayuda profesional.

Se llama Michelle, me atiende de Lunes a Jueves en su consultorio, dos horas por sesión. Esa mujer es de lo mejor que hay en el mundo. Es divertida, comprensiva y amable. Se casará en julio de este año.

Desde que la veo y asisto a una escuela diferente, muy lejos de aquí, me siento mucho mejor, respiro con normalidad y mis ganas de vivir han incrementado un 80 por ciento.