El Legado de Rapsodia (Temporada 1) [Eldarya]

Capítulo 65: La última pieza. Parte I.

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Capítulo 65: La última pieza.

Parte I.

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"No es posible huir en este mundo del recuerdo y el remordimiento, el espíritu de las malas acciones nos acecha, tanto si nos arrepentimos como si no". Gilbert Parker.

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Mansión del barón Simún de Ismar - Roxma (pasada la media noche):

Él desvió la mirada del espejo, apoyó las manos en la pared y cerró los ojos sintiendo como su piel cedía bajo el frío del agua que caía de la regadera... Sus músculos dolían y podía sentir como se estremecían... Desde Gromalion había comenzado a usar magia una vez más... Hoy había rondado un área peligrosa de ella y aun si Feng Lee había revisado sus Canales Existenciales al llegar al palacio del barón, comprobando que todo marchaba bien a pesar de su casi Despertar como Brujo Negro, no podía evitar pensar que todo esto era como la calma antes de la tormenta, un dolor en su pecho le había comenzado a hacer temer por quienes quería nuevamente...

>>-No vuelvas a hablarme, Caleb... realmente eres un monstruo...<<

Él abrió los ojos de golpe y se llevó una mano al pecho... Aquellas habían sido las últimas palabras que había recibido de Laoidheach... allá... en Robaldia... y ellas eran el dolor más grande que recordaba... un dolor que le era imposible de ignorar... Y mientras salía de loza de la ducha y avanzaba por el cuarto de baño, se apoyó en el tocador y se miró en el espejo...

"Caleb." Ella sonrió. "Muy pronto estaremos juntos."

Él apretó los labios con impotencia, rabia, desesperación, había sido por un segundo, un breve pestañeo, pero, por aquel pequeño lapsus tan corto de tiempo, la Insignia de Ishtar había vuelto a brillar en su pecho... Entonces eso significaba que... así como esa voz había resonado tan fuerte y clara en su mente, ¿muy pronto Aelita vendría a cobrarse de aquello que había dejado pausado desde lo de Glastonbury...? Bari... la Bruja de los Fríos Vientos del Norte... ¿se volvería a presentar ante él... como en Robaldia...? Ahora, en vez de una sensación o destello fugaz en su pecho, Caleb, recordando aquella sangre derramada... el cuerpo herido de Laoid por acto de su mano y la mirada reprobatoria y furiosa de Liam, se encorvó hacia adelante experimentando un dolor desgarrador a flor de piel que rápidamente comenzó a colarse hasta su interior... Esa vez casi había asesinado a Laoidheach y seguramente ella habría muerto por sus heridas si Liam no hubiera aparecido en esa letal meseta tras aquel "Hasta pronto" de Bari... Y aun si Eskol lo había tranquilizado diciéndole que todo saldría bien, la mirada herida y llena de rencor de Laoid tras recobrar la conciencia, sumado a aquellas últimas palabras, lo habían hecho hundirse en el abismo más profundo de lo que había creído, quedándose estático mientras veía como Dialmhar la alejaba y Eskol le dedicaba una mirada llena de lástima antes de salir tras ellos... Él... por culpa de todo esto, de su debilidad, de su oscuridad, de su maldición, lo único que hacía era dañar al resto, así como se convertía inevitablemente en un monstruo... como aquel que la habría herido... como aquel que no había podido salvar a Magnolia... como aquel que había perdido la cordura y salido tras aquellos templarios en busca de venganza... como aquel que, mucho tiempo atrás... no había podido hacer nada por su maestra... ¿Eso significaba entonces que su único fin era convertirse en la marioneta de Ishtar, de Aelita...? Él aguantó un quejido, el dolor era cada vez más intenso... ¡Mierda...! ¿Había llegado la hora...? Caleb se alejó del tocador y caminó hasta el dormitorio... creía tener algo en el maletín que podría congelar el avance del influjo de la Insignia... No podía despertar las alarmas de Bari en ese lugar... no podía arrastrar en todo eso a Feng Lee... aun si estaba Kumiko junto a ellos, no podía arriesgarse a perderlos...