Recuperando tu ser |Grimmjow y tu|

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Oh por dios, era la primera vez que veía a Grimmjow con su ropa de capitán. Las tres veces que lo vi en estos tiempos fue cuando usó ropa humana (por el gigai) y hace poco que lo trajo Ichibe, pero tenia una ropa parecida a la que usaba cuando era un Espada.

--¿Qué creen que hacen al interrumpir aquí?-- gruñe con enojo mi padre y usando paso veloz aparece frente a ellos.

No logro escuchar bien de lo que hablan, pero cuando terminan se pone a luchar contra Grimmjow. Los demás capitanes hacen lo mismo con los demás Guardias, excepto mi abuelo, Byakuya, Toushiro, Kyoraku y mi querido teniente.

--Ya basta, ¡Dejen de luchar!-- grito tratando de que todos se detengan, pero nadie me hace caso.

--Al diablo-- digo en un suspiro y corro a abrazar a mi abuelo.

Luego de saludar a todos y darle un enorme abrazo a mi teniente observo las pelas que se están llevando a cabo. A lo lejos, escondida en un árbol, logro divisar a Kuru. Con un movimiento de mano le indico que se acerque, por lo cuál, sin dejar de mirar a Byakuya, me hace caso.

--¿Kuru no quieres venir con nosotros? Te divertirás más en la Sociedad de Almas, créeme-- digo burlona señalando disimuladamente a Byakuya.

Sus ojos brillan y con una enorme sonrisa acepta.

--Byakuya, ella es Kuru, te la encargo-- digo para acercarme un poco más a mi abuelo sin darle la oportunidad de negarse.

--¿Cómo llegaron hasta aquí?-- pregunto curiosa, puesto que solo Ichibe puede traer o llevar personas fuera del palacio.

--Nada es imposible para mi niña tonta-- escucho una voz a nuestro costado.

--Mayuri-- saludo con una sonrisa.

--Para nosotros-- le corrige Urahara saliendo detrás suyo, provocando una mueca fastidiosa al capitán.

--Suficiente, volvamos a casa-- ordena mi abuelo haciendo callar la discusión de ambos científicos.

--¿Y ellos?-- pregunta Kuru señalando a los demás.

--No te preocupes, si no escucharon cuando les pedí que dejaran de luchar ahora se quedan aquí hasta que terminen-- digo sin darle mayor importancia.

--Después de todo justo estaba por volver-- le digo a mi abuelo.

--Digamos que tuve una charla con padre-- comento al ver que está confundido.

Asiente y sin más los dos científicos nos devuelven a la sociedad de almas. Tal vez estoy ansiosa, o feliz, pero el saber que voy a volver a estar en el Gotei me hace sentir un vacío en el estómago.

Durante horas mi teniente y los capitanes estuvieron poniéndome al tanto de las cosas. Como por ejemplo, Rukia tomó el lugar de Ukitake cuando éste ya no podía más por su enfermedad. Ichigo es el capitán del escuadrón siete, Grimmjow temporalmente del tres, dejando libre el cinco. Muguruma Kensei, un Vizard y un antiguo Shinigami, volvió al Gotei y es el capitán del noveno escuadrón.

--Vaya, muchas cosas han cambiado-- digo sorprendida.

--Ya ves que si-- escucho detrás de mi.

Miro por sobre mi hombro y veo a los capitanes y sus tenientes que se quedaron luchando junto con mi padre. Los ignoro y sigo hablando con mi abuelo y teniente.

--¿Ahora nos ignoras?-- pregunta mi padre indignado, como si yo hubiera echo algo malo.

--Vamos hermosa, tal vez se nos pasó de la raya la pelea-- admite Grimmjow tomando asiento a mi lado.

--Les pedí que pararán, en ese momento en que ustedes llegaron yo estaba por ir con Ichibe para que me trajera-- digo tomando el té que anteriormente nos trajo un sirviente de Byakuya.

--¿En cerio?-- pregunta feliz dejando un beso en mi mejilla.

--Claro que no, ella volverá conmigo-- dice mi padre como si fuera un niño.

--¡Suficiente de ese comportamiento infantil, Yuuka!-- lo reprende mi abuelo con un tono duro.

Mi padre aprieta sus labios y se queda tenso esperando a que mi abuelo no siga.

--Padre, hablemos-- digo levantándome del cómodo pasto del jardín de la mansión Kuchiki. Empezamos a caminar hasta que llegamos a un pequeño estanque lleno de peces.

--No puedo volver, no soy feliz allí y yo.

--Lo sé, sé que no ere feliz allí conmigo, si es verdad que le prometí al Rey que te quedarías, pero al ver que no querías estar allí, no pensaba cumplir mi promesa, solo quería tenerte  un poco más a mi lado antes de pedirle a Ichibe que te trajera-- dice con un tono triste.

--Padre yo, realmente quiero estar contigo, pero no allí, ese no es mi hogar, ni el tuyo tampoco, ¿Crees que mamá aceptaría ver al amor de su vida en un lugar en el cual no es feliz?-- pregunto tomando sus manos.

--No quiero volver a separarme de ti, vuelve al Gotei padre-- pido apoyando mi mejilla en su mano.

--Hay cariño, nunca creí que me dirías algo como eso, yo realmente creí que me odiabas-- dice dándome un abrazo.

--Jamás podría hacerlo, eres mi padre-- digo escondiendo mi rostro en su pecho.

Me siento realmente bien en sus brazos, incluso se siente mejor al estar en el Gotei. Cambia un poco la sensación.

--Hija eres lo más importante en mi vida, por eso no puedo quedarme, debo volver, pero te prometo que vendré seguido a verte, ya no estaré ausente en tu vida-- murmura dejando un beso en mi frente.

--Te amo papá-- digo abrazándolo fuertemente.

--Y yo a ti.