Dieciocho.

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3 palabras.

Le he pedido a dios por mucho tiempo que te aleje de mí, que ya no me busques, que suceda algo que me borre para siempre de tu vida y al parecer eso está sucediendo, no he sabido nada de ti, no me has llamado, no me has enviado ningún mensaje y se supone que esto era lo que yo quería pero no, aquí viene la parte más enferma de todas. Te echo de menos, te necesito otra vez en mi vida aunque sea con tu absurdo amor, aunque sepa que lo que me dices es mentira pero te quiero de vuelta, ¿Dónde estás? Claro, siendo feliz sin mí, mientras que yo dejo el móvil encendido en un lado de la cama para escucharlo por si casualidad llamas, pero no lo haces y yo solo puedo acostarme en la cama y recordar cualquier momento contigo, esa época de mi vida en la que fui muy feliz, así que recuerdo la primera vez que te vi y no puedo evitar sonreír. 

Hey, al parecer te gane la apuesta-grito desde mi salón de clases, tú te das media vuelta y me miras riéndote.-Yo creo que si-dices y no, en ese momento no sentí mariposas en el estómago porque en realidad me parecías arrogante, ridículo, creído, tenías todo lo que odiaba de un chico y te hable por el simple hecho de que días antes apostamos, claro yo te dije que no te atreverías siquiera a saludarme y tu juraste que eras capaz de mucho, y ya, seguiste caminando como si nada por el pasillo y empezaste a platicar con tus amigos, y no, definitivamente no podías gustarme, odiaba demasiado tu actitud como para poder fijarme en ti, pensabas que eras el amo y todos nosotros tus sirvientes, eras demasiado arrogante como para ser siquiera mi amigo. Y no sabes cuánto te odie ese día, no eras como el chico con el que había platicado semanas antes de volver a estudiar, es como si tuvieras doble personalidad y eso realmente jodia todo, no quería hablar nunca más contigo, no quería verte más, no aguantaría estar mucho tiempo a tu lado y no poder gritarte tus verdades. Pero claro, apenas comenzaba a conocerte y la gente que te conocía me aseguraban que eso solo era el principio, que cuando pasara el tiempo iba a conocer tu lado más oscuro, iba a darme cuenta que siempre podías ser peor, pero nadie hablo de que podías decirme 3 palabras y hacerme sonreír un día entero, nadie me dijo que a pesar de tus errores tenías un lado tierno, nadie dijo que podía quererte de esta forma, tan intensa, con el corazón.  

twitter: @holdmebieberr

si me dejan algun voto/comentario se los agradeceria muchisimo, besos. —Mara.

Atrapada en tu infierno.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora