Una historia más

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TERESA

Mis pensamientos vagaban en el pasado, ese pasado doloroso que por más que intento borrar es imposible de hacerlo...

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- Es una niña señora. - Decía la enfermera. - ¿Quiere cargarla? - Asentí, la mujer me pasó a mi hermosa hija y mis lágrimas empezaron a brotar.

- Mi amor. - Mi marido que se encontraba al extremo de la cama, se acercó y luego se arrodilló, quedando a nuestra altura. - Es hermosa. - Sus ojos estaban a punto de sacar las lágrimas acumuladas.

- Muy... - Miré su húmeda mirada. - Te amo. - Sonrió. - A vos también te amo, mi pequeña Violeta.-

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Unos golpes en la puerta de mi habitación hicieron que los dejara de lado. Al abrir me topé con la morocha desaparecida, sonreí de medio lado y la invité a pasar.

Flor: Disculpe que la interrumpa, es que me contó Virginia que usted también estaba preocupada y queri... - Explicaciones innecesarias, pensé-

Teresa: Flor, no hace falta que me expliques. - Froté sus hombros- Solo te voy a pedir a la próxima que avises, nada más.

Flor: Discúlpe. - Agachó la cabeza y yo inmediatamente la alcé-

Teresa: ¿Que dijimos sobre bajar la cabeza? - Levanté una ceja-

Flor: Tiene razón. No volverá a pasar. - Se disculpó, yo nuevamente volví a sonreir. Mis ojos se posaron de repente en sus descubiertos hombros, la remera que traía me permitía verlos. Mi cara cambió notoriamente, estaba impresionada. Tenía el mismo lunar que mi pequeña, en el mismo lugar. Alcé mi vista y ella mantenía el semblante confuso, algo de esperarse, mi cara fue como si hubiese visto algún fantasma- ¿Sucede algo señora?

Teresa: N...no, no pasa nada. - Esta vez sonreí falsamente, estaba segura que esa significativa marca me iba a dejar pensando- ¿Estás lista para la fiesta? - Cambié de tema-

Flor: Si. - Sonrió- Sigo impresionada, ¡no puedo creer que ganamos! - Exclamó entusiasmada-

Teresa: Ni yo... hubieras visto la cara de Vanesa. - Sonreí maliciosamente- Ay, perdón. Cierto que es tu suegra. - Reí, ella se puso colorada-

Flor: ¿Có... cómo lo sabe? - Cuestionó asustada-

Teresa: Es más que obvio. Además Virginia me dijo que discutió con vos por ella. - Alcé los hombros-

Flor: Tengo que hablar con Vir de esto. -Dijo para ella misma, aunque lo escuché-

Teresa: No la retes, entendela. Estaba preocupada. - Traté de suavizar las cosas-

Flor: Entiendo, pero no es para que ande divulgando lo que hago. - Noté el enojo en sus palabras-

Teresa: Tienes razón. Pero ella creyó que fue por su culpa que habías desaparecido. Aunque pensandolo bien fue un pensamiento tonto. - Reí. Pero ella no me siguió-

Flor: Igual tendré que hablarlo. - Caso perdido, sabía que no iba a convencerla, por ende Vir se enojaría conmigo. Debería aprender a cerrar mi boca-

Teresa: Pero no la retes mucho. - Rió-

Flor: Eso no pasará. - Sonreí- Bueno, la dejo. Me voy a alistar para el evento. - Asentí, luego salió del lugar, dejándome con una sensación extraña en el pecho-

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Holix, ante todo pido perdón por desaparecer tanto tiempo, paso a explicarles el por qué: Comenzaron las clases y no tenía mucho tiempo, además tuve un bloqueo... si les soy sincera no sabía como continuar la historia. Por suerte eso ya pasó y aquí me tienen. No voy a comprometerme a subir capítulos más seguidos porque no sé si pueda hacerlo. Pero no se preocupen, no dejaré colgada la historia.

Espero que les haya gustado estos capítulos.

Tengan linda tarde ; )