Stars [MAYLOR]

T H I R T H Y

I just called to say I love you
I just called to say how much I care
I just called to say I love you
And I mean it from the bottom of my heart
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Brian, bastante decepcionado, volvió a su cuarto, donde ya lo esperaba Roger.

—¿Qué te dijo tu padre? —preguntó el rubio. Brian no sabía que decir.
—Que todo estaba bien. Solo peleas —dijo en voz muy baja.
—Lo mismo me dijeron a mí —Roger negaba con la cabeza— apuesto a que mienten.
—No lo sé. Dejémoslo así —se sentía realmente nervioso. No había experimentado lo que significaba mentirle a Roger, nunca antes.

Roger bajó la cabeza, mirando el suelo.

~

—¿Entonces? ¿Crees que sus padres vayan a... separarse?
—No lo sé. Solo sé que, por lo que creo, Brian se quedaría a mi lado. Eso sería lo único importante para mí —Roger sonrió, sin saber lo que decía.
—Eso es bueno —Su amiga seguía amándolo, pero también estaba muy feliz por el. Le encantaba que Brian y su amigo estén juntos— ¿Lo amas? —Roger se sonrojó a más no poder. Sabía la respuesta a esa pregunta.
—¿Y a tí qué? —Respondió el rubio, ganándose un golpe por parte de su amiga— ¡Auch! ¡Me dolió! —se quejó Roger.
—¡Pasivo! —Lorraine comenzó a reír a carcajadas. Roger, nuevamente, sentía su cara arder y no podría imaginarse más rojo. Probablemente, se había sonrojado hasta las orejas. Todos los niños que antes estaban jugando ahora observaban a los amigos.
—¡Cállate! —susurró dándole un codazo a Lorry.
—Ya, ya... —esta limpió sus lágrimas imaginarias— No respondiste mi pregunta, pasivo.
—No voy a hacerlo si sigues llamándome así —Roger se movió, dejando sin lugar donde apoyarse a Lola.
—Bien... No respondiste mi pregunta, Roger.
—Oh, no. Ahora te jodes —respondió el rubio, mientras comenzaba a guardar sus cosas en la pequeña mochila negra.
—¿Ya nos vamos
—Son las 19:30, Lola —se quejó el mayor.
—Ya, ya... —La mujer rodó los ojos y comenzó a guardar sus cosas también, en su mochila que, a diferencia de la de Roger, era gris y roja. Bastante grande.

Lorraine tenía un estilo muy particular, algo así como el de un skater. Vestía jeans grises y rotos; Una remera de mangas largas entre una mezcla de dulce de leche y rosa oscuro, junto con una manga corta negra arriba; incontables pulseras y anillos, incluyendo su mano derecha pintada de negro y su mano izquierda de blanco. Llevaba también un gorro de lana bordó. Eso le daba el toque.

Quizás no era muy femenino, pero a ella siempre le había gustado esa ropa, y Roger cree que se le ve linda.

Ambos amigos comenzaron a caminar hacia casa de Roger, involuntariamente.

~

Roger salía de darse un cálido baño, en el que había estado pensando en lo que Lorraine había preguntado.

Había sido un día agotador, pero incomparable con el de su novio, que había estado estudiando todo el día.

<Brian, definitivamente y a comparación mía, tiene un futuro> pensó el rubio, y rió. Tendría que ponerse a estudiar.

Una vez que llegó a la habitación, se detuvo en la entrada de la puerta.

Observó a Brian leyendo lo que suponía que serían sus apuntes.

—¿Estudias siempre? —preguntó el rubio.
—Tengo qué. Tu también deberías estudiar —dijo sin dirigirle la mirada.
—Anda... ven conmigo —Roger se sentó en el borde de la cama, sin despegar la vista de Brian.
—No puedo, estoy estudiando Rog —intentó centrarse en lo que leía, cuando sintió unas manos sobre sus hombros.
—Necesito atención.
—Siempre necesitas atención —ambos rieron.
—Vamos, por favor —Brian miró al rubio a los ojos.
—¿Y quién va a mantenerme cuando no tenga trabajo? —el rubio respondió al instante.
—Yo siempre voy a cuidar de ti —a Brian se le encogió el corazón, y decidió darle a su novio un tiempo... que era lo que en verdad quería.

Brian se levantó, posicionando a Roger sobre la cama.

Comenzó a besarlo lentamente, haciendo al rubio disfrutar de cada movimiento.

Sus labios encajaban perfectos, como si hubiesen sido diseñados para estar juntos.

Brian se deshizo rápidamente de lo único que cubría el cuerpo de Roger, una toalla blanca, y la arrojó al suelo.

Roger, por su parte, no tardó en quitarle prenda por prenda a Brian, todo esto entre cientos de besos.

El cuerpo del menor es tan... delicado. Es la debilidad del más grande.
Quería recorrer cada parte del cuerpo de su compañero.

Pero fue Roger quien se adelantó.

—¿Puedo? —el rubio bajó la mirada al gran miembro de Brian. Este, que estaba demasiado complacido para responder, simplemente asintió.

Comenzó por besar su cuello, bajando por sus hombros, su pecho y su abdomen, hasta llegar a donde quería.

Lo primero que hizo fue tomar el miembro entre sus manos, para luego introducir la punta en su boca, haciendo que Brian se estremeciera.

Luego. Siguió metiendo todo el resto, y moviendo sus labios de una manera única. Brian sentía que iba a estallar.

—M-mírame —pidió el mayor, entre jadeos. Roger hizo caso y lo observó directamente a los ojos—Quiero estar dentro —como si de una orden se tratara, Roger retiró lentamente el miembro de su boca y se dirigió a los labios de Brian, besándolos una vez más.

~

Después de un par de besos, Brian pudo, finalmente, acabar dentro del menor, y este en su abdomen, pecho y sábanas. Tendrían que lavar todo antes de irse a dormir.

Brian ya pensaba que Roger no podía ser más perfecto y maravilloso. Cada palabra, cada beso, todo lo hace único. No podía creer haber conseguido a alguien así en ese lapso de tiempo.

Roger, por su parte. No sabía si hablar o no. Quería. Quería decirlo pero tenía muchísimo miedo.

Ambos estaban sumergidos en sus pensamientos, cuando Roger finalmente se decidió.

—Te amo —Claro que no había necesidad de preocuparse tanto, eran simples palabras, lo que le importaba confesar a Roger era lo que realmente sentía, ya que nunca había amado a nadie antes. Claro estaba que ambos se querían, y lo sabían. Pero Roger quería hacérselo saber explícitamente.

Brian podría comenzar a llorar en esos momentos. Realmente se le achicaba el corazón con cada acto de ese estilo proveniente del menor, pues sabía que no era muy sentimental ni romántico.

Brian también lo ama, y ya se lo había dicho. El momento en el que le entregó su anillo fue cuando decidió hacerlo, pero Roger aún no lo sabe.

—Yo también te amo —Respondió Brian, acercándose al blondo y dejando un beso en su perfecta y fina nariz, para luego pegar su frente a la de él.

~

Hola xd

Es muy turbio todo ahre pero ya se van a emparejar las cosas <3

Muchos loves

-Kat