Wolves. [TERMINADA]

44. 1

[Advertencias]:

•El capítulo estará dividido en 2 partes debido a que terminó siendo muy extenso para ponerlo solo en uno, así que tomen sus precauciones.

•Ambas partes incluyen contenido sensible y explicito (narraciones de actos violentos, así como menciones de maltrato físico, tortura y muerte).

•Personalmente, escribir esto ha sido una montaña rusa de emociones desde el principio hasta el fin. Así que, si al terminar quieren dejar sus lágrimas y/o amenazas en mi tablero o mensajes, con gusto los recibiré.

Dedicado con todo mi amor a Omega_girl_. Gracias por gastar tus datos en mí, estrellita.

🐺

Si pudiera regresar el tiempo atrás, a cuando era un cachorro no mayor a cinco años de edad, Harry se aseguraría de darle un último beso de despedida a su hermana.

De hacerle saber que, a pesar de aquellas absurdas peleas sin sentido entre ambos y los constantes intentos de Gemma por molestarlo día y noche, el amor puro e incondicional que él sentía por su dulce Gemms jamás desaparecería.

Nunca, ni siquiera después de que ella lo hiciera.

Si pudiera volver al pasado, a aquel momento en que su madre le dijo "te amo" por última vez, con esa hermosa sonrisa pintada en sus labios y esos brillantes ojos colmados de alegría y afecto; Harry respondería con algo mucho más significativo que un simple beso en la mejilla.

Te amo, mamá, contestaría en su lugar. Lo gritaría a los cuatro vientos, en un tono tan fuerte y tan cargado de emoción, que hasta los mismos Dioses serían capaces de escuchar su última y más sincera declaración de amor.

Tal vez, si lo escuchaban, si Harry lograba captar la atención de los Dioses, ellos se arrepentirían de apartarla de su lado.

Si pudiera regresar en el tiempo, a ese día no tan lejano en donde vio por última vez a su padre y a Alexander con vida, él haría cualquier cosa para evitar que se marcharan.

Lucharía, gritaría, haría lo que fuera con tal de impedir que aquel par de criaturas se sumergieran en la abismal oscuridad del bosque. Perdiéndose en un viaje que, sin saberlo, acabaría costándoles mucho más de lo que cualquiera pudiese haber imaginado.

Incluidas sus propias vidas.

Si pudiera encontrarse con su padre una vez más, si pudiera sentir la protección de su aroma empapándole la piel y la calidez de sus brazos envolviéndolo hasta hacerlo sentir seguro; Harry probablemente llegaría a perder la capacidad del habla.

Demasiado abrumado ante la sensación de ese paternal gesto, temeroso de que cualquier movimiento de su parte, por insignificante que fuese, terminara arrebatándole por completo aquello que tanto había añorado durante sus infinitas horas de agonía y dolor dentro de ese cautiverio.

Por favor, quédate. Intentaría decir, rogaría, sin importarle parecer un cachorrito desesperado por cumplir sus propios caprichos. No te vayas, te lastimarán, encontraremos otra forma de resolverlo. Por favor...

No me dejes. Tú no.

Si pudiera traer de vuelta a Edward, si pudiera ser testigo del brillo que los ojos de su padre desprendían cuando sus miradas se encontraban, si pudiera apreciar una última vez de cerca el destello verdoso de esos orbes tan semejantes en tonalidades a los propios; sin duda alguna se encargaría de dejarle en claro lo mucho que realmente lo amaba.

Arrepintiéndose de no haberlo dicho suficientes veces en el pasado, lamentándose el haber sido tan iluso de creer que tendría infinidad de oportunidades para hacerlo. Cegado por esa silenciosa promesa que había crecido entre ambos con el pasar del tiempo; estar siempre juntos.