Ellos no saben de nosotros. -(Cancelada) Josh Hutcherson & __________ -Daany

Capítulo 14

Capítulo 14 -Ellos no saben de nosotros-

-¿Cómo que tu novia falsa? -estallé.

-Sí, ___, bueno mañana te explico.

-No entiendo.

-Mañana te explico, ahora me tengo que ir.

-¿En serio? -pregunté dudosa.

-En serio -me dijo. Me dio un beso en la mejilla. -Adiós ___.

Él se fue, le sonreí a Sarah. Ella arrancó el auto y se fueron. Suspiré.


Busqué las llaves en mi bolso. No estaban. Diablos. 
Las busqué en el bolsillo de mi pantalón y nada. ¿Dónde dejé las estúpidas llaves?

-¿Buscabas esto? -dijo esa voz.

-Josh...

-Hola -me dijo. Él tenía mis llaves.

-Josh, dámelas.

-Un por favor si quiera, ¿no?

-Josh, querido, me podrías dar esas llaves, ¿por favor? -fingí una sonrisa.

-No.

-¡Dámelas!

-Atrápame -me dijo y comenzó a correr. Diablos.

Comencé a seguirlo, corrí lo más rápido que pude, pero era inútil. Él es más rápido erqewque yo.

Corrimos por todo el vecindario, hasta llegar al parque. Al maldito parque. Y como supuse que pasaría, Josh corrió hacia esos arbustos, luego subió al árbol, nuestro árbol. Él sabe perfectamente qe no soy muy buena escalando.

-¡Baja de allí Josh!

-Mejor sube y te doy las llaves.

En eso, se me ocurrió una gran idea. Escalé un poco, pero al momento de impulsarme en una rama, me caí.


Auch.

Sí, dolió un poco pero era justo lo que quería. Fingí estar desmayada.

-____, ya no finjas y sube -me dijo él. No respondí. -
¿_____? -repitió. Sentí como él ya estaba a mi lado. -Diablos -me acarició el mentón. -¿_____? Contesta.
Luego sentí que él me cargó. Sentí que corría. Tenía tantas ganas de reír.

Luego de un par de minutos, sentí que ya no estaba en la calle, sino en una casa. La de él. Sentí que Josh me recostó en un sofá.

-¡Papá! -gritó él. -Papá, ¡necesito tu ayuda! -pero nada, nadie le respondía. -Diablos, no está. -dijo. -____, despierta por favor. -me acarició la mejilla. -Por favor...

Bien, lo haré. Despertaré.

Abrí los ojos lentamente, él pareció reaccionar.

-¿____?

-¿Qué pasó? -musité. Miré su mano, allí estaban las llaves.

Perfecto.

Abrí los ojos completamente, le quité las llaves rápido y salí corriendo de allí. Él tardo unos segundos en comprender que era sólo una broma. Yo reía, reía muy fuerte.

-¡Caíste! -le grité y corrí hasta su habitación.

Abrí su ventana y salí de su casa. Corrí hasta mi ventana y cerrado. Diablos, había dejado todo cerrado. Rodeé mi hogar y corrí hasta la entrada. 
Cuando apenas iba a abrir la puerta, siento que me toman el brazo. Es él.

-Auch, auch, Josh duele -le dije.

-Lo siento -me soltó el brazo. -Buena broma ____.

-Lo sé, la merecías -dije sentándome en el escalón que está frente a la puerta. Él hizo lo mismo.

-Lo siento... lo de tus llaves.

-No importa -él vaciló un poco, hasta que miró al buzón.

-Mira, tienes mensajería -me dijo.

-Vaya, es cierto, pásamelos -él tomó los sobres y me los dio. Los puse a un lado.

-¿No los leerás?

-No, en un rato.

-Bien.

Josh y yo comenzamos a charlar como lo hacíamos de pequeños. Como los amigos que somos. 

Pasaron un par de horas, cuando un Ford negro se estacionó frente a mi casa.

-¿Esperabas a alguien? -me preguntó Josh.

-Para nada -le dije.

Veo que un hombre alto, con tez morena se acerca a nosotros. Llevaba un traje negro y era calvo. Tenía una cicatriz cruzando su cara. Era aterradora. Traía unas gafas Ray Ban. ¿Qué ocurre aquí? Josh y yo nos pusimos de pie.

-Buen día, jóvenes, ¿es la casa de los Wells?

-Sí -respondí yo. -¿Quién es usted?

-¿Eres _____ Wells?

-Exacto -respondí asustada. -¿Usted es...?

-Vengo aquí para ayudarte.

-¿Ayudarme?

-Voy a encontrar a tu padre, a ese criminal que mató a tu madre. 

¿Cómo es que ese señor sabe eso?