Ellos no saben de nosotros. -(Cancelada) Josh Hutcherson & __________ -Daany

Capítulo 39

Capítulo 39.

-¿Segura que puedes?

-Sí, sólo me lastimé el brazo, no me quebré el pie -dije. -Además ya no me duele mucho, ya pasaron más de tres meses desde el accidente.

Tobias sonrió y salí del auto. Tomó el equipaje y caminamos juntos al aeropuerto.

Sí, hoy es el gran día.

Empezaré mi nueva vida en Massachusetts. 

-Vamos a esperar a que nos llamen, siéntate ahí -dijo Tobias apuntándome un asiento. Me senté.

-Estoy emocionada -digo sonriendo.

-Yo igual, ah... por cierto, Harry viene para acá -dice y asiento.

-Genial, también vendrá Katherine para despedirnos -digo con una sonrisa melancólica. 

Y así estuvimos, abrazados, esperando a que llegaran y que nos llamaran para subir al avión. 

Y en eso, pude ver dos siluetas entrando por la puerta de entrada. Reconocí una silueta. Era la de Harry. Y la otra, era de una chica. Iban tomados de la mano.

-Hola -dijo Harry cuando se acercó.

-Hola -sonrío. -Qué bueno que viniste.

-Lo sé -dice riendo. La chica que estaba a su lado le da un leve golpe en el hombro. -¡Ah! Lo siento, ella es Paola. Mi novia.

-¿Paola? -Digo y la miro, ella me sonríe. -Dios, ¡es un gustazo conocerte! Harry no paraba de hablarme de ti, ustedes dos... son muy tiernos -río y la abrazo. 

-Gracias, también es un gusto conocerte -dijo algo tímida cuando nos separamos.

-Ah, por cierto, él es mi novio, Tobias -digo. Ellos se sonríen y vuelvo a mirarla.

-Tú y Harry son hermosos -digo. Ella se sonroja. -No sabes, todo el tiempo habla de ti.

-Aw -dice Paola mirando a Harry. -Qué lindo.

-Yo siempre -Harry sonríe y la abraza. 

-_____, ahí viene Katherine -dice Tobias en mi oído y la miro.

-Hola -dice Katherine. -¿Cuánto falta para que te llamen?

-Eh... -Tobias miró su reloj. -Unos diez minutos.

-Genial.

Y ahí estuvimos, hasta que nos llamaron para irnos.

-Hasta luego chicos, los extrañaré -digo y Katherine me abraza. Cuando me separo, veo a Paola -Un gusto conocerte, Paola.

-Igual -me dice sonriendo. 

Le tomo la mano a Tobias y caminamos rumbo a la azafata, que recibía los boletos. 

Y entonces, escucho mi nombre.

-¡_____! 

Volteé instantáneamente y no me gustó mucho lo que vi.

-____, espera -dijo él, jadeando. -No te vayas.

Miro a Tobias, y luego a Katherine. No sé qué hacer. Veo a Paola y a Harry, ellos me miran. Miro de nuevo a Tobias. 

-Ve, despídete de él -dijo Tobias sonriendo. 

Asentí. Caminé hacia Josh y lo miré a los ojos.

-¿Qué haces aquí, en el pueblo? Creí que estabas en la escuela.

-____, ven -me toma de la mano, pero yo me suelto. Me mira. -No seas así, aquí todos nos escuchan... necesito hablar contigo en privado.

Suspiré.

-Bien, pero rápido, no quiero perder el vuelo.

-Bien -suspiró y me tomó la mano. Me jaló hasta un pasillo y me miró.

-¿Qué quieres? Dímelo rápido.

-____, tengo que decirte algo.

-¡Pues hazlo!

-¡No es fácil! -Suspiró. -____, te voy a extrañar... te amo.

-Josh... -digo después de unos segundos. -No, es imposible, déjame en paz.

Josh me había dicho te amo y yo le había respondido que era imposible. 

-____, ya, no finjas que tú no me amas, porque sé que lo haces...

-No, estás equivocado, yo... yo te odio.

-¿Ah, sí? -Me miró incrédulo. 

-Sí, te odio, odio la forma en que me trataste en el árbol, odio cuando eres tan directo, odio cuando me pones nerviosa...

-Prosigue -dijo él.

-Odio cuando me dices que me amas, odio tus palabras, odio cómo nosotros dos vemos las cosas de diferente modo, odio tu indiferencia...

Él me miró, triste. Yo también lo estaba, pero también estaba llena de rabia.

-Odio cuando me miras con esos ojos, odio... -suspiré y me limpié una lágrima. -Odio cuando me besas.

-Eso no es cierto.

-Lo es. Y odio... odio que tú hayas sido mi primer beso.

Se quedó tenso, yo sólo me limpié las mejillas y volví hacia Tobias. Él no miraba en nuestra dirección, miraba a la gente que iba pasando al avión. 

-Listo -digo.

-Bien, vámonos -me dijo Tobias después de mirarme a la cara y notar que estaba llorando.

Caminamos juntos, y gracias al cielo pudimos entrar a ese avión. 

Cuando nos sentamos en nuestros asientos asignados él me miró.

-¿Estás bien?

-Sí.

-¿Segura? Porque yo no lo creo.

-Es... es Josh -digo nerviosa, aunque él no diga nada, sé que se siente incómodo cuando hablo de Josh.

-¿Qué pasó?

-Ya no somos amigos -dije y me abrazó.