Capítulo 10:

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—¡Sí!— gritó Jungkook con orgullo al haber ganado por tercera vez.

—Uy, sí, soy míster perfecto.— dijo un Taehyung molesto antes de dejar el control en la cama de mala gana.

—Tú lo dijiste, no yo.—

—Ti li dijisti, ni yi.— arremedó el castaño y se tiró de espaldas a la cama.

—Estás celoso~.—

—Te dejé ganar. Aparte de que me dolían los dedos y ni podía hacer movimientos tan rápidos.—

—Es la peor excusa que he escuchado; y mira que te gané aún con un poco de dolor de cabeza.— se acostó también de espaldas a su lado, mirando el oscuro techo de su habitación.

—Jungkook...—

—¿Mhm?—

—¿Puedo hacerte una pregunta?—

—Ya lo estás haciendo.—

Taehyung lo miró arrugado la nariz como forma de desagrado.

—Vamos, es broma— rió y le dio un leve golpe en el hombro—. Dale, suéltala.—

—¿Aunque sea un poco...curiosa?—

Kook giró su cabeza para mirarlo y prestarle atención. En el fondo deseaba que no preguntara nada sobre el beso, no quería que el ambiente se volviese tenso. Asintió. Tae apartó su vista un momento, pensando en las palabras exactas y correctas para soltarlo.

—La vez que te conocí en la fiesta...— comenzó.

Por favor no hagas mención del beso.

—Esa vez estabas mal, incluso llorabas...¿Por qué?— alzó su vista nuevamente, topándose con los ojos oscuros del menor.

Jungkook mantuvo contacto con él por unos escasos segundos, pero ahora fue él quien dirigió su mirada a otra parte al mismo tiempo que jugaba con sus manos. El castaño sintió arrepentimiento de aquello.

—E-Está bien si no quieres contarme, entiendo que nos acabamos de conocer y no tengo porque preguntarte eso, yo lo sie...—

—Es por una persona.— musitó sin mirarlo.

Taehyung volvió a prestar su atención en él en cuanto escuchó esas palabras.

—Oh...¿no te molesta hablar de ello?—

Negó el menor.

—De hecho...creo que estaría bien hablarlo con alguien aparte de Hoseok.—

—¿Hoseok?—

—Es mi mejor amigo.—

—Ya veo...Bueno, puedes contarme a mí si así lo quieres.—

Jungkook suspiró antes de comenzar a contar, recordando a la hermosa chica que sin duda extrañaba.

—Ella y yo intentábamos tener algo, una relación. Lo intentamos por varios meses, pero mi trabajo me impedía verla cuando quería o cuando acordábamos dedido a los proyectos que surgían...Peleamos por eso mismo, y aquel día en la fiesta, fue el día en que ella decidió ya no seguir, por eso fui a beber...Fue mi culpa al final de todo. Creo que yo...no puse todo de mi parte y la perdí. Ella dijo que se había enamorado de mí, lo cual hace más sentimental la situación. Me duele haber sido tan patético y no luchar...—

—¿También la amabas?— se atrevió a preguntar.

Kook pensó en la pregunta tanto como el día en que Sunhee se abrió emocionalmente frente a él.

Strawberries & Cigarettes; pjmDonde viven las historias. Descúbrelo ahora