Capítulo 20:

15 2 0
                                    

—Dime, Taehyung.—

—No.—

—Dime.—

—¿Qué me ofreces a cambio?—

—¡Taehyung!—

—¡Oye, esto es un negocio, quiero algo a cambio de darte información!—

—¡Pero sólo quiero saber dónde está Jimin!—

—¿Qué me darás?— Tae se cruzó de brazos frente a Sunhee.

—¿Galletas?—

—¿Cuándo?—

La castaña bufó antes de sacar de mala gana galletas de su mochila. Se las extendió haciendo un puchero.

—Lo siento, ahora son mías.— dijo el chico, quitándoselas de la mano y comenzando a comer del paquete.

—Taehyung.—

—¿Hmm?— la miró.

—¡¿Dónde está Jimin?!—

—Oh, cierto. Está ensayando en el salón de baile. Es en otro edificio, edificio F, cuarto salón de la izquierda.—

—Gracias.— empezó a caminar.

—Sunhee.—

Ella giró a verlo.

—Me agradas.—

—¿Sólo porque te di mis galletas?—

—No. Por muchas cosas.— sonrió con su característica sonrisa cuadrada.

Esto provocó una sonrisa en Sunhee. Taehyung era demasiado tierno cuando quería.

—Tú también me agradas.— giró de nuevo y continuó caminando hacia el otro edificio.

—¿¡Sólo porque te di información de Jimin!?— gritó el chico para que lo escuchara.

—¡Sí!— le respondió riendo.

—¡Que grosera!—

Escuchó como el chico reía detrás.

Pasaron un par de minutos y ya estaba en el edificio que le había indicado Tae, el edificio F. Se adentró, siendo fácil identificar el salón, ya que se percató de la ventana que había en el. Gracias a ella podía ver como practicaban los chicos del equipo, entre ellos, Jimin.

El rubio se movía con tanta facilidad y agilidad, que le resultaba impresionante saber que era el mismo Jimin que conocía. Este se veía tan concentrado y serio. Sonrió al ver que el chico se percató de su presencia, lo saludó discretamente con la mano para evitar distracción y esperó a que la canción cesara. Él fue hasta la puerta y la abrió una vez que terminó.

—Hola.— saludó ella primero.

—Hola.— el chico sonreía con entusiasmo, no podía evitarlo.

—¿Puedo abrazarte?—

El contrario se sorprendió por la pregunta repentina.

—Estoy sudando...—

—No importa.—

Jimin sólo la miró sin saber qué decir.

—De acuerdo...—

Ella lo rodeó por la cintura y lo abrazó fuertemente. Jimin correspondió dudando un poco, pero al final acarició su cabeza.

—¿Pasa algo? ¿Qué ocurre?— inquirió Jimin.

Strawberries & Cigarettes; pjmDonde viven las historias. Descúbrelo ahora