Héroes del Mundo

La verdad.

Super Dude no había tenido oportunidad de hablar con Wonder Storm, al llegar a la ciudad bajaron del Jet y todos se fueron despidiendo, los heridos fueron al hospital junto con PT el cual llevaba a PD a que un médico le revisara. Mysterion se acercó a ambos chicos muy serio para el gusto de Super Dude.

— ¿Puedo hablar con ustedes dos? —Super Dude busco el cómo negarse, pero en cuanto vio a Wonder Storm acepto.

El grupo de super héroes camino alejándose de esa zona, una vez en un lugar que podrían considerar solitario, Mysterion hablo.

— ¿Qué fue lo que paso?

— ¿A qué viene eso, Mysterion?

Mysterion cruzo sus brazos sobre su pecho con una mueca de disgusto, Super Dude solo llevo sus manos a su cintura exigiendo una respuesta a su pregunta. Storm simplemente suspiro, simplemente deseaba poder acostarse y que el día terminara de una vez.

— ¿Cómo que a qué viene esto? Estaba tratando de salir de una habitación cuando de la nada me electrocute, me congele y de la nada me golpearon.

— ¿Tenemos que hablar de esto? —Storm dijo con tono molesto, para Super Dude fue un alivio no tener que lidiar con la explicación de la combinación de los poderes y para Mysterion fue desagradable no poder ayudar a que se diera cuenta de la situación en la que estaban. — Acabo de ver como muchas personas morían, estoy cansado, me duele mi cuerpo y a la vez estoy muy confundido... sólo quiero ir a descansar...

Mysterion asintió sin más y paso junto a Super Dude.

— Tú y yo hablaremos más tarde, ¿oíste? Llévalo a casa, hablen si es necesario. Debes darte prisa en que se dé cuenta de lo que ocurre, si no, eres casi inútil.

Super Dude miro molesto a Mysterion, Mysterion solo le dedico la misma mirada molesta para después desaparecer en las sombras de la noche, Storm estuvo a punto de comenzar a caminar por si sólo hasta que Super Dude le detuvo.

— Te acompaño a casa.

— No, debes estar cansado también... ve a descansar.

— ¿Me permites acompañarte?

— ¿Por qué?

— Sólo quiero comprobar que llegues a casa sin congelar nada.

Una pequeña sonrisa melancólica paso por el rostro de ambos, el rubio simplemente asintió y comenzó a caminar con el otro a su lado, una vez llegaron a lo que eran los vestidores de los del equipo, cada uno se cambió y al mismo tiempo salieron de los vestidores como personas civiles, estudiantes para ser más exactos. Ambos sonrieron.

— Bueno, chico de hielo, ¿Te apetece cenar conmigo otra vez?

— No lo sé, chico de la hiper fuerza, son las 5: 00 pm y tengo que pasar apuntes.

— Es una pena, con lo que me gusta hablar contigo.

— El gusto es mutuo compañero... bueno, si tú invitas las hamburguesas a domicilio... no habría problema que te quedaras en el departamento mientras ambos pasamos apuntes.

Craig sintió saltar de alegría su corazón, no sólo Tweek le dijo que le gustaba estar con él, sino que lo invito a su departamento para pasar los apuntes y además cenar, obviamente no iba a desaprovechar esta oportunidad.

— Claro, yo invito las hamburguesas si tú invitas las sodas.

— Jaja, me parece justo.

Claro, ambos la pasan muy bien juntos.

[...]

Alemania.

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