The only one ↬ KookTae

8. Altamente peligroso y tiene un hijo

Antes de comenzar, me gustaría que leyeras una historia.

Cuando era niño, mis padres vivían en una granja a las afueras de Busan, era un lugar modesto pero amaba estar ahí, cada vez que amanecía me levantaba corriendo a poner mis botas y lanzar maíz a las gallinas, darle de comer a los caballos.

Había una vaca a la que mi padre me dejó bautizarla como Clarabella, era enorme y la mayor parte del tiempo estaba comiendo, era mi vaca favorita, tanto así que estuve ahorrando seis meses para poder comprarle una de esas campanas que se colocan en el cuello, amaba a esa vaca.

Cuando Clarabella murió, estuve con ella en sus últimos momentos, mi padre me insistía con que me fuera, pues sería doloroso verla marchar, cuando estuvo conmigo más tiempo del requerido; ese día lloré, y los chicos de las granjas cercanas se rieron de mí, pensaban que era estúpido al llorar por una vaca y que era afeminado, que probablemente me quedaría en esa granja por siempre, llorando en los restos de Clarabella.

Ese día me prometí que nunca más lloraría.

Pero ¿Por qué me estás diciendo todo esto? Te preguntarás.

Verás, en este mundo, siempre tienes que decidir a qué lado jugar, te lo dije desde un principio; perdedor o ganador, es una pregunta de selección simple.

Recuerda esto, podrá servirte para después: Perdedor o ganador, rico o pobre, siempre ten presente que la gente verá lo peor de ti, sin importar qué.

Tenlo en mente, quizás querrás recordarlo más adelante.

Bien, ahora sigamos.

El jueves por la tarde, Taehyung y yo estábamos descansando de nuestra muy agitada maratón de sexo.

Es insaciable, creo que realmente nunca podré cansarme de su culo.

Él entendió que no era de acurrucarme ni dar abrazos, así que contra sus principios de que siempre después de un buen revolcón debe haber un espacio para acurrucarse; no envolvió sus brazos y sus piernas en mi como un pulpo pero sin embargo se mantiene bastante cerca ya que lo atraje hacia mi.

Su olor es completamente adictivo.

¿Y cuando está recién follado?

No hay nada que se le compare. Nada me sacará de esta cama en todo el día, ni a él tampoco.

Aunque me gusta la atmósfera de silencio, siempre es bueno tener una conversación, las conversaciones con Taehyung son bastante interesantes la mayor parte del tiempo

Además me gusta la forma en la que sus ojos brillan cuando habla de algo que le gusta.

—¿Has exhibido algo además de aquella galería? —Pregunto y Taehyung suspira.

—Te dije que lo había intentado pero no a muchos les gusta lo que hago.

—Pues a la mierda. —Digo y me recuesto de lado para mirarlo. — Es increíble lo que haces, y es algo que necesitas mostrar. —Taehyung ríe.

—Es muy dulce de tu parte. —Responde pasando una mano por mi pecho. —Pero no estoy de humor como para escuchar otra vez que vuelven a rechazar mis obras.

—No pierdes nada con intentar. —Digo, y él sonríe, sus ojos brillan.

—Gracias, pero paso.

—¿Qué quieres que haga para persuadirte? —Pregunto, y mi voz baja de tono, me mira a los ojos.

—Transfiere diez mil millones de won a mi cuenta. —Dice con risa en su voz y yo suelto una carcajada.

—¿Tienes pinturas recientes? —Pregunto, él comienza a trazar figuras sinsentido en mi pecho.

—Hum, un montón.

—Bien, tú dame tiempo yo veré qué puedo hacer. —Digo.

—Por favor, no tienes que hacerlo. —Responde él y yo tomo su labio inferior entre mis dientes para callarlo iniciando un fogoso beso.

Espero que te des cuenta de que mi regla de 'No besos a menos de que estemos a punto de tener sexo' fue totalmente quebrada, destrozada, como un techo de vidrio de una casa en llamas.

¿Pero sabes qué?

Ni siquiera me importa.

Al menos en ese momento, no me importaba.

Cuando dejamos de besarnos él toma una respiración.

—Olvidé comentarte que hace unos días me encontré con el esposo de tu amigo en un restaurante.

Mi corazón se detuvo.

—¿El esposo de mi amigo? —Pregunté frunciendo el ceño, el presionó su índice entre mis cejas sabiendo que ahí se formaba una pequeña arruga.

—Umm, sí, Jimin creo que era su nombre.

Maldición, de verdad Jimin encontró a Taehyung, mierda, debería tener miedo sobre eso ¿Cómo lo encontró tan rápido? Solo pasaron tres días.

—Es muy agradable. —Dijo y se subió en mi pecho, creo que fue demasiado tiempo para él sin acurrucarse, pero no me estoy quejando. Enrollo mis brazos en su cintura un poco más arriba de su culo.

Culo que, honestamente me parece impresionante.

—Sí, también está un poco loco. —Dije y él sonrió, nuestros rostros estaban bastante cerca y pude notar nuevamente el grosor de sus pestañas.

—Me pareció agradable que me contactara. —Dijo y sus dedos trazaron mi mandíbula. —Dijo que siempre ha querido conocer al chico que 'enganchó' al gran Jeon Jungkook. —Hizo una pausa en la que permití que mis dedos trazaran la curva de sus nalgas hacia abajo. —¿Sabe que solo estamos follado por diversión?

—Lo sabe, sí. —Mis dedos cruzaron y delinearon el montículo de nervios, la respiración de Taehyung se cortó por unos segundos. —Es sólo que le gusta molestar, me descubrió enviándote mensajes e hizo un escándalo por eso.

Rió. —Estuve viendo la foto del bebé.

—Minhyuk. —Dije y froté los dedos, jadeó.

—Hmm, sí. —Jadea y mira hacia su culo mordiendo su labio. —Tienen un gran parecido. —Dijo y yo asentí metiendo un dedo, aún estaba húmedo.

—Eso lo dices porque no has visto a Yoongi, Jimin no necesitó prueba de ADN, son idénticos. —Digo y barro con mi dedo su interior, él se retuerce y se sujeta de mi hombro.

—Bueno, espero verlo. Jimin me invitó a su casa, como a un almuerzo o algo así. —Dice con la voz tensa, sujeta mi brazo cuando comienzo a mover ahora dos dedos con vigor.

—Bueno, eso es algo que podemos hacer. —Digo. —Pero tendrás que saber que Jimin es altamente peligroso.

—Altamente peligroso y tiene un hijo. —Gime y muerde mi pecho para callar sus sonidos.

Santo Dios ¿Es normal que me excite tanto verlo tan sumiso?

Y es que fuera de la cama, es altanero y decidido ¿Pero en ella? Se vuelve vulnerable, dispuesto a dejarme hacer todo lo que yo quiera.

—Es un buen punto—Digo, y cuando se corre en mi muslo, siento como golpea mi pecho.

—Te detesto. —Jadea y luego toma mi cara y me besa.

Y ese beso, fue el detonante de todo.