《30》

1.3K 60 9
                                    

N/A: Hace unos días cumplí un mes más con mi novia y estoy malditamente feliz así que nuevo capítulo. Disfrútenlo ♡

Lauren's POV.

Sus dedos vagaban por mi cuerpo, no dejaba de tocarme, por ningún motivo paraba y eso hacía que mi deseo incrementara al paso de los minutos. Era de por lejos la sensación más placentera de estar con alguien. Ninguna chica o chico me causaba todo lo que ella. Es electricidad no tenía punto de comparación.

-¡Joder Camz!

-Esto te responde a tu pregunta. Eres mía, Lauren. Sólo mía.

La pausa entre cada palabra mientras embestía mi cuerpo con sus dedos me hacía volar al infinito.

-¿Ya te he dicho que amo la vista de tu trasero?

-Traviesa -rió.

Volvió a subir su boca a la mía, su cuerpo desnudo y sudado sobre el mío, su cabello revuelto y su trasero a mi entera disposición tanto así que no pude evitar darle una nalgada. Mordió mi labio. Di otra nalgada y volvía a morderme.

¿Quieres excitarme más?

-Quiero todo de ti, bebé...

Mis manos tomaban las sábanas entre ellas, arañaba de vez en cuando. Mierda que placer estaba sintiendo.

Eres muy hábil con la lengua.

-Y eso que no haz visto nada -me dio una de sus sonrisas y volvió a su trabajo.

Lamía con todas sus ganas, sus dedos jugaban con mis pliegues.

Me encantas así de húmeda, Jauregui.

Dio un ligero masaje a mi clitoris y luego volvía a meterse dentro de mí, sacaba los dedos y comenzaba a lamerlos hasta dejarlos limpios. Todo lo hacía sin dejar de mirarme.

-¿Me quieres matar?

-Sólo quiero aclarar que nadie puede tener lo que es mío.

La combinación de lengua y dedos era lo que me llevaría al borde del orgasmo, con su mano libre acariciaba mis pechos y de vez en cuando le daba un suave estirón a mis pezones que estaban demasiado sensibles. Durante el acto los llegó a morder. Sentí una corriente.

-¡Harás que me venga!

No respondió sólo aumentó la velocidad.

¡Joder!

-¿Más?

-Mierda. Sí.

-Vente para mí, bebé.

-No pares, Camz. No pares. ¡Ah!

-Cuanto pagaría por escucharte gemir siempre.

-Camila. Normani y yo nos preguntábamos si... -detuvo su oración- Ah...

-¡Mierda Dinah!

-Uh... lo siento -rascó su cabeza-. Mis ojos no vieron nada. ¿Estaban teniendo sexo?

-No sé, tú dímelo.

-¿Lo tomo como un sí?

-Eres una idiota, largo de aquí -dijo Camila.

Me apresuré a cubrir rápido mi cuerpo desnudo con la sábana.

Cazadores De VampirosDonde viven las historias. Descúbrelo ahora