Magical Issues

Capítulo 14

El tiempo jugó su juego. Muchos, muchos días pasaron, días que se dividieron entre las obligaciones escolares, entrenamientos, prácticas, magia, mucha magia. Pero sin dejar a un lado esa hasta improvisada vida familiar que ahora tenía Luna junto a Jor y esta otra versión de su madre. Sabía que no era exactamente su madre, pero le ayudaba muchísimo a no extrañarla tanto.  Por su parte, Jor estaba experimentando oleadas de visiones de un posible futuro, imágenes realmente devastadoras. Y no era que aparecían de vez en cuando, era  diario y era sofocante. Una tarde, Luna estaba a solas en el departamento grabando su bitácora.
–Es increíble todo lo que ha estado pasando el tiempo que ha pasado y yo sigo acá. Es una mezcla de emociones y sentimientos que me invaden. No puedo negar que adoro estar aquí, las personas con las que comparto son tan geniales, bueno son súper personas y eso es maravilloso. La escuela me gusta, aunque hayan chicas que honestamente son muy desagradables. Me encanta salir y con un poquito de mi ayudar a los chicos con todas estas cosas que a veces se aparecen por ahí, me hace sentir muy útil. Esto también es gracias a ellos, o sea esto es recíproco, ellos me enseñan y yo les ayudo. En todo este tiempo he aprendido tanto, se podría decir que soy una pequeña peleador nivel 1 -Lanzó una risita juguetona- Y sí, esto se ha convertido en una rutina muy loca. Pero no puedo dejar de pensar en lo mucho que extraño a mi mamá. Sí, aquí comparto con su otra versión, y aunque ella es súper genial, tanto que hace unos días estuvimos los tres, ella Jor y yo en un karaoke y la pasamos muy bien, no sabía qué Jor cantara y que lo hiciera bien, ok, creo que me desvíe, el punto es que aunque la pase tan bien con ella, no es realmente mi madre. -Suspiró-Aunque todo vaya fluyendo, hay momentos en los que me pregunto qué es lo que realmente debo hacer. Hace días Jor me preguntó si no quería saber quién era mi “Benefactor” por decirlo de alguna forma, la persona que me guía, que me mantiene aquí, y sí, claro que quiero saber, pero no puedo hacerlo, lo prometí y… -Tomó aire- Siento que esa persona es la misma que me habla de vez en cuando, esa voz que está ahí en mi cabeza, esa voz que me hace sentir como en casa, lo sé, de una forma rara, pero es así. Todo esto me hace ver como si estuviese loca. – Se reía nerviosamente- Ya he hablado de Jor varias veces, pero me siento en la necesidad de hablar sobre él cada vez que hago esto, porque se ha portado conmigo muy bien, era como si nos conociéramos de toda la vida. Y hablado de conocerse de toda la vida, está Peter. – Dijo esto y se quedó en silencio por varios segundos- No sé, no sé qué pensar, no sé qué decir. O sea, yo lo veo y veo al Peter con el que crecí, el que conozco de toda la vida, mi casi hermano, pero de pronto comparto con él, habló con él o sólo le veo a los ojos y… y es como si fuera otra persona, evidentemente es otra persona, pero… -Volvió a quedarse en silencio- Yo no debería estar pensando en estas cosas, hay tantos factores en contra, y Uno de ellos es que literalmente me dobla la edad y…

–¿Y eso que tiene que ver? – Luna abrió los ojos con nerviosismo ¿Desde hacia cuanto tiempo Jor estaba escuchando todo lo que decía? No se atrevía a voltear- Dime ¿Qué tiene de malo que Peter sea mayor que tu? -Caminó hacia donde estaba- Si a ti te gusta, y tu le gustas, pues que les valga madre lo que piense la gente ¿Acaso no me dijiste que tu papá le llevaba como 10 o 12 años a tu mamá? Mi papá le lleva unos mil años, así que -Encogió los hombros- Yo no veo nada de malo en eso y…. – Se quedó en silencio y vio que el dispositivo grabador estaba encendido- ¿Estabas grabando tu bitácora ¿No? – Luna asintió- Ay ya qué importa… ¿Quién va a escuchar eso?

–Nadie, creo. Sólo yo. Ya qué, eres parte de esta bitácora ¿Quieres decir algo para tenerlo grabado? Lo que sea.

–Además de reafirmar lo que te dije ¿Qué puedo decir? ¿Quieres que hable de lo insoportable y mimada que eres? ¿De lo agobiante que diariamente te me haces? -Decía graciosamente- 

–¡Jor!

–Sabes que es broma ¿Qué puedo decir? Son tantas cosas, eres la niña más valiente que conozco, con una voluntad tremenda, con un corazón que no le cabe en el pecho, unas ganas inquebrantables de hacer el bien. Una gran hechicera que me tiene embrujada desde el día que la conocí, vamos que no  cualquiera puede lograr lo que ella logra conmigo. – Los dos se rieron- Y sí, es una niña mimada, pero es un amor, una princesa y es mi hermana. -Luna sonrió con una lágrima corriendo por su mejilla- Y… ¿Qué pasa con Peter?

–Y… Corte. -Apagó la grabación- ¿Qué pasa con Peter? Pasa que mañana me va a reprobar la asignación fotográfica. Porque lo último que le dije es que se iba a sorprender con mis fotos, y vaya que se va a sorprender, no tengo nada.

–Que nivel tienes para cambiar las conversaciones. -Luna encogió los hombros- Con eso te puedo ayudar.

–¿Me vas a prestar de las fotografías que tienes guardadas?

–¿Prestar? -Abría un armario- Las fotografías para una galería no se prestan. -Sacó un estuche mediano- Te voy a ayudar a encontrar las fotografías perfectas para tu trabajo,.  Mira en donde estamos, esto es Nueva York,  aquí hay de todo. – Le entregó el estuche en donde estaba la cámara. La cara de Luna fue un poema- ¿Qué? ¿También quieres que las tome yo? – La rubia encogió los hombros- Vamos, también tienes he aprender. Con un poco de concentración, pueden salir cosas muy buenas. No todo en esta vida son selfies o fotos frente al espejo. -Tomó el celular de ella y abrió la cámara- ¡Sonríe! – Luna sonrió visiblemente, acto que él aprovechó para tomar la fotografía de los dos juntos- Por favor, mira lo guapo que salí. Ah, sí, también saliste bien. – Luna frunció el ceño haciendo que él se riera.- Hay que encontrar esta visión, allá afuera. Vamos, que hay mucho que hacer. -Los dos se pusieron en marcha-

Los dos estuvieron caminando por diversos lugares de la ciudad, no sólo tomaban fotografías, también se divertían a su manera. Fue una tarde bastante diferente. Casi al caer la noche, los dos llegaban discutiendo un poco por las fotos.

–Tienes que dejar de pensar que las fotos están mal, son buenas fotografías. -Jor iba hacia la cocina mientras Luna se sentaba en el sofá y encendía la cámara para revisarlas-

–Pero a mi visión, no son perfectas. Jor, no sabes como me ven en ese taller, mis fotos nunca son buenas. Y las demás personas se burlan de mi.

–Sí eres exagerada. – Le gritó desde la cocina.- Pero digamos que es cierto. Esta vez no te van a decir nada, porque todas esas fotos son perfectas, o sea, tienen mi visión. -Salía con dos tazones con helado. Luna estaba muy pero muy callada, seguía viendo las fotos, pero ya no veía las suyas, las que había tomado, ya estaba más atrás.- ¿Qué pasa? -A la pregunta Luna volteó con una media sonrisa- ¿Qué?

–¿Quién es la rubia con la que sales en estas fotos? -Jor se sorprendió-

–No, no, no, no… -Dejó los tazones en la mesa e intentó quitarle la cámara. Luna de puso de pie y se alejó con rapidez-

–¡Hey! ¡Hey! ¡Hey! Detente ahí. -Puso su mano al frente para impedirle quede acercara más- Sí te estoy preguntando es porque ya vi todas las fotos. -Jor apretó los labios con pesar- ¿Quién es?

–No, no… no… no. -Respondió nerviosamente-

–Ay mírate, mira como te pones. -Decía en tono burlón- Enserio ¿Quién es? ¿Fue tu novia? Porque en las fotos se ven muy felices, se ven hermosos. -Veía una de las fotos y se la enseñó a Jor- ¿Quién es? ¿Quién es? ¿Quién es? -Insistía-

–¡Ya! No seas así.

–Tu no me conoces, cuando soy insistente, puedo caer en lo insoportable. Dime quien es.

–Se llama Anne, Anne Carter y… -Suspiró- Y Ya.

–¿Y ya? Vamos ¿Eran novios? De verdad, se veían tan lindos juntos.

–Estuvimos saliendo. -Respondió sentándose y suspirando- Pero eso ya pasó, ya… yo lo arruiné ¿Si? Ya está. – Luna torció la boca-

–¿Y la querías? -Jor alzó la mirada, sus ojos brillaban-

–¿Querer? -Encogió los hombros-

–¿Por qué se te hace tan difícil expresar lo que sientes? No es tan difícil.

–Pero… Querer, a veces siento que algo muy grande.

–Ay por favor. – Se sentó frente a él- A todos nos gusta que nos digan que nos quieren, y que nos lo demuestren.

–¿A ti te gusta?

–¿Qué si me gusta? A mi me encanta, soy súper melosa, de esas personas a las que le encanta que la apapachen y le hagan muchos cariñitos. Lastimosamente desde que llegué aquí nadie me lo ha dicho. Pero puedo sobrevivir con ello. Vamos Jor, no es tan difícil aceptar y demostrar cariño. Y mira, mira esta foto – Le mostró una foto en la que él salía junto a Anne, viéndose son una sonrisa- Aquí hay algo lindo. Y ella es hermosa. -Jor sonrió de costado- Vamos, quiero que me hagas una promesa. Yo no sé las condiciones en las que quedó todo esto, no la conozco a ella ni nada. Pero puedo ver lo que hay a través de tus ojos. Así que, quiero que me prometas que cuando termine todo esto, porque me vas a poner eso de excusa, la busques y arregles todo lo que “arruinaste" ¿Estamos? -Jor bajó la cabeza y empezó a reír nerviosamente- ¿Estamos?

–¿Por qué eres así?

–¿Así cómo? Yo soy un amor. – Dijo con una sonrisa- Pero estoy hablando enserio ¿Me lo prometes? -Jor se puso de pie y asintió-

–Te lo prometo. – La respuesta de Jor emocionó mucho a Luna que de levantó casi disparada y le abrazó-