Capítulo 25

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Todos observaban a Luna con asombro. La estruendosa risa de Mephisto se escuchó en toda la calle. Todos quedaron expectantes, menos los tres que luchaban contra Blackheart y sus  demonios. La voz de Mephisto se dejó oír.

–No importa cuanto te empeñes en relucir, en mostrar una imagen fuerte, cuando sólo eres una pequeña niña con miedo. Jamás vas a poder conmigo, jamás vas a derrotarme. No eres nadie.

–Soy Luna Strange, hija de Stephen Strange, el hechicero supremo. Y sí, puede que sea solo una niña con miedo. Pero estoy segura del poder que corre por mis venas. Y nadie va a venir a hacerme menos. -Decía mientras descendía. Loki volteó a ver a Stephen-

–Tiene carácter la niña ¿No?

–Se parece a su madre. -Respondió Stephen un poco en broma, un poco enserio. Loki se quedó de pie viéndole fijamente-

–¿Tengo que reírme ante tu sentido del humor o qué?

–¿Qué? ¿Acaso no es cierto? -Sonrió y se elevó para ir junto a Wanda-


En el suelo, Jor se acercó a Luna, muy sonriente le hizo gestos sobre su vestimenta.

–Mírate, Luna Strange toda una hechicera. -Ella encogió los hombros- Te ves increíble y… - Se quedó en silencio un segundo- Tienes un basculo.

–¡Sí! Lo tengo… ¿Celoso?

–Un poco. -Respondió graciosamente. A ninguno les dio oportunidad de decir nada más, el cielo empezó a tornarse rojizo, algunos truenos se escuchaban al fondo y una increíblemente fuerte ventisca empezó a azotar toda la ciudad. Pero no era sólo un viento fuerte, era muy fuerte, casi comparado con vientos huracanados. Stephen desde su ubicación creó un escudo para protegerse junto a Loki y Wanda. Abajo Luna hizo lo mismo para protegerse a ella y a Jor. Aunque Cassandra por su parte intentó hacer algo para proteger a los demás, no podía hacer mucho, el viento era tan fuerte que le costaba mantenerse en pie. Varias personas fueron levantadas del suelo. Algunos empezaron a ayudar a las demas personas, era difícil mantenerse en pie, Kate se golpeó contra una pared, pero continuó caminando. Peter balanceándose intentaba contener a las personas que no podían mantenerse en el suelo. Pero el viento golpeó mucho más fuerte, cortando sus telarañas en el aire, pero no haciendo que sólo cayera. La risa de Mephisto sonó fuertemente justo antes de que una especie de remolino envolviera a Peter bamboleándole contra diversos edificios. El viento paró y el cuerpo inconsciente de Peter caía al suelo. Cuando Luna le vio, gritó.

–¡No! -Corrió hacia él, Jor  le siguió junto a los otros chicos. Wanda desde arriba notó el acontecimiento, así que hizo estallar una brillante luz roja para luego descender. Tanto Loki como Stephen habían quedado a merced de Blackheart. Luna quitó la máscara de Peter para ver si estaba respirado.- ¡Peter! ¡Peter! Despierta por favor. – Le movía levemente el rostro. Wanda le detuvo-

–Luna, Luna no. – Le tocó el hombro, y luego le tomó el pulso a Peter- Tiene pulso leve. Hay que llevarle a un hospital. – Luna asintió-

–Sí, sí, sí. Hay que llevarlo al Metro General. -Respondió azarada-

–¿Qué? Luna, el Metro General está a casi 7 calles de aquí. – Dijo Cass. Luna abrió un portar que conducía al hospital.- Ok, pero alguien tiene que ir con él.  – Antes de que Luna pudiese decir algo, Jor le habló mentalmente: “Tu no. Tu tienes que quedarte aquí”. Ella le miró con pesar, pero asintió. Cass suspiró al ver la expresión de Luna- Voy a ir yo ¿Alguien con quien hablar?

–Sí, Christine Palmer. Sólo dile que vas de parte de… de Strange, sólo Strange. Ella lo va a ayudar. Y va a poder mantener su identidad en secreto. -Respondió Luna con una voz serena, pero con una angustia enorme. Los chicos levantaron a Peter para hacerle pasar por aquel portal. Luna suspiró al verle pasar frente a ella. Estaba conteniéndose, tenían una impotencia enorme, quería llorar, pero no podía dejar que le vieran así, no podía dejar que vieran que no era tan fuerte. Jor le tomó por los hombros y le miró fijamente-

–Luna no, no puedes dejarte llevar por sentimentalismos. Te lo dije hace un rato, hay que tener el corazón duro en este tipo de situaciones. Piensa que él va a estar bien, pero ya, no pienses más en ello. Preocuparme en terminar con esto ¿Si? – Luna suspiró y asintió. Todo este día estaba siendo una montaña rusa de sensaciones- ¿Terminamos con esto?

–Terminamos con esto. -Respondió tomándole la mano a su hermano. –


Y todo volvía al inicio, parecía que jamás terminaría todo eso. No importaba lo que hicieran, salían cada vez más. La escena parecía ya a esa etapa en las películas en donde todos los personajes están completamente derrotados, pero aún así lo intentan, sin importar nada. Ya Luna y Jor no usaban su magia, se estaban descompensando físicamente, sólo peleaban, Jor con cuchillos y Luna con el Basculo. Los tres grandes hechiceros, estaban en la misma situación, se sentían acorralados. Hasta que en un arranque de ira, Wanda explotó el negro portal. Loki, Stephen y el mismo Blackheart cayeron al suelo por el impacto. Blackheart con una expresión de terror, intentó abrir un portal para escapar. De esto Luna se dio cuenta.

–No, no, no, ni se te ocurra. -Murmuró justo antes de volar hacia él-

–¡Luna! ¡No! – Jor le gritó en vano, la pequeña rubia fue detrás de aquel demonio que entraba en ese portal. Jor fue con rapidez antes de que este desapareciera, pero fue tarde.-¡Maldición! ¿Esta niña acaso no piensa en las cosas que hace? – Se preguntó molesto- .

–Sí piensa en las cosas, sólo no piensa en las consecuencias. -Respondió Kate lanzando un par de flechas- ¿Y ahora qué? ¿A dónde fue?

–No tengo idea. -Congeló a dos de los demonios-

No pasaron más de tres segundos cuando nuevamente se abrió aquel portal, expulsando violentamente a Luna, que se golpeó la cabeza.

–¡Vamos! Esto como que ya se está haciendo costumbre. – Se dijo a sí misma. Detrás de ella salió Blackheart, pero si antes de entrar ya llevaba una expresión de terror, ahora no había una palabra que describiera su expresión. Veía a Luna con miedo, intentó ponerse de pie para irse, pero se vio interceptado por Loki y Stephen. No sabía hacia donde ir, era como si hubiese olvidado todas sus habilidades.-

–Ay, el pobre demonio tiene miedo. -Exclamó Loki- ¿Qué pasó? ¿Te asusto el bando “equivocado"? – El demonio no hablaba, estaba literalmente acorralado. Loki estaba a punto de atacarle, pero Stephen le interrumpió-

–¡Loki! ¡No! Sin asesinar. – Loki viró los ojos-

–Le quitas la diversión a todo. -Stephen se acercó a Blackheart, ignorando lo que Loki le dijo-

–Se acabó, de tu parte se acabó. – El demonio sonrió pedante-

–Sí, puede que sí.  Pero ¿Realmente creen que van a poder contra Mephisto? No sean ingenuos.

–No seas ingenuo tu. -Stephen abrió un portal y le hizo un gesto a Loki. Entonces, entre los dos, lograron encerrar a Blackheart en una prisión dimensional. Loki alzó la mano esperando a que Stephen chocara los cinco, este le miró y pasó de largo-

–Que estirado eres.


Mientras esto ocurría, Jor ayudó a Luna a ponerse de pie.

–¿Qué fue lo que pasó? ¿Estás bien?

–No sé qué pasó. Yo… - Se tocaba la cabeza- Sí, estoy bien. Quiero que esta pesadilla termine ya.

–Y podría terminar de una vez por todas, para ti. – Se escuchó la estruendosa voz de Mephisto que poco a poco se iba haciendo visible frente a todos. Stephen y Loki estaban justo detrás de los chicos, y Wanda detrás de ellos. Todos miraban a esa gran masa que iba moldeándose en medio de la calle. Cuando el demonio Escarlata se había materializado los hermanos se miraron, sí lo habían visto antes, pero sólo en sueño, jamás en persona. Y era realmente intimidante.

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