capítulo 7

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DIVIDIDA
capítulo 7

El doctor Seiya, me miraba pero no pronunciaba palabra, mi cabeza estaba haciendo ideas y suposiciones sobre los que Darien diría a mi padre, pero de una cosa estaba segura fuera lo que fuera mi papá nunca le diría donde estaba.
Llegamos a la clínica, un lugar lleno de vegetación y un enorme edificio.
- Serena antes de entrar quiero que sepas que este lugar no es un manicomio, aquí hay personas con problemas similares a tuyo, algunos con deprecion, quiero que veas esto como una especie de retiro, y sobretodo recuerda que eres libre cuando no te sientas cómoda puedes irte, nadie está por la fuerza- dijo sonriente
- si doctor gracias con su ayuda se que saldré adelante...- conteste tocando su mano y mirando sus ojos, unos ojos llenos de cariño debo admitir que en otro momento de mi vida no me hubiera sido difícil enamorarme de él.
Me ayudó a bajar del auto, una vez dentro del lugar me sentía más tranquila saber que estaba lejos de Darién y de todo lo que me causó me hizo sentirme más tranquila miré el sitio era hermoso con árboles frondosos plantas por doquiera, más que una clínica parecía una casa de playa la vista al mar era hermosa, fue lo que más me gustó, al parecer el doctor Seiya era muy conocido ya que todas las enfermeras y doctores lo saludaban con bastante familiaridad el mismo me llevo al cuarto donde me quedaria. La puerta era blanca el edificio no tenía la decoración típica de una clínica parecía una casa muy lujosa, entramos era hermoso una enorme ventana hacia pasar a raudales la luz del sol,  la cama estaba perfectamente  acomodada con cojines azules, y un edredón blanco las paredes eran azul turquesa, el techo estaba decorado con figuras marinas caracoles, conchas. Puso mis maletas sobre la cama, y dijo -por el día de hoy no habra sesión, es mejor que descanses el viaje fue muy largo y espero te gusten las instalaciones...-
- son hermosas no le imaginé un lugar así... - dije acercándome hacia la ventana al mirarla quedé maravillada la vista daba directamente al mar ese mar brillante de un azul profundo ese mar infinito, que después solo verlo, me transmitió calma.
Me dejo sola para instalarle diciéndome que me esperaba en la estancia en una hora para presentarme al personal y me mostraría las instalaciones, más detalladamente, salió del cuarto me quedé un poco más mirando en mar, y después me di una ducha, con agua tibia, salí y me puse la ropa más ligera y olgada que tenía, me hice una cola y solo pinté mis labios, salí del cuarto y recordé el camino, hacia la puerta principal pero antes de bajar las escaleras me encontré con una chica.
- hola mucho gusto soy Amy y tú?- dijo extendiendo su mano y sonriendo
- Serena... Mucho gusto!- conteste y extreche su mano
- el doctor Kou te trajo verdad?-
- si así es... Dime llevas mucho aquí?-
- como dos semanas... Es un lugar agradable y me ha ayudado a salir de mi estado mental... Debo irme espero y puedamos ser amigas..- dijo sonriéndome y se dirigió hacia los cuartos baje las escaleras y en la puerta de encontraba el doctor hablando con un joven rubio.
- disculpe doctor...- dije algo timida
- oh Serena... Que bueno que estás aquí... Mira te presento a Haruka mi mejor amigo y socio el es el doctor que dirige está clínica...-
- mucho gusto Serena... - dijo y sonrió le contesté la cortesía
- Serena cualquier cosa que necesites no dudes en pedírmelo- dijo el rubio
Le agradecí y se alejó, el doctor Seiya me miró y dijo:- ven vamos a caminar...-
- Claro- conteste y el abrió la puerta
Tarde estaba callendo... Y por primera vez en meses Usako no había salio, me mostró los alrededores y por alguna razón nuestros pasos nos llevaron a la orilla del mar.
- Serena veo que estás más tranquila...-
- doctor sabe, es algo extraño pero no quiero que se vaya...-
- por que?-
- tengo miedo que Usako aparezca cuando usted no esté...-
- eso no pasará... Tu eres más fuerte, y estás empezando a mantenerla a raya...-
- no!! No!! Quiero que me deje sola!! No después de lo que pasó con él- dije y me agelle a su brazo como un reflejo inconsciente.
- cálmate!! No temas, no llores...- dijo alzando mi mirada y limpiando mis lágrimas con su mano,
- me quedare esta noche, está bien?- dijo sonriendo
Solo asentí y volví a undir mi rostro en su brazo.
- dime qué te gusta más del mar?- preguntó me quedé fijamente mirándo como las olas rompían en unas rocas cerca de donde estábamos.
- su infinidad, sus misterios, su vida, la forma en que sobrevive apesar de las porquerías y las estupideces que le hacemos como el se mantiene y de vez en vez nos recuerda que es muy poderoso... Pero a la vez paciente tanto que alberga la mayoría de la vida de nuestro planeta-  mientras decia estás palabras desearía que el mar se llevará lejos el recuerdo de Darien, que al meterme en el lo arastarra como arena, al mirar a Seiya sus ojos me veían asombrando casi con la boca abierta.
- que pasa doctor sé encuentra bien?- pregunté
- si, la forma en que ves el mar es fascinante...-
- bueno el mar es mi refugio, pensando en él me relajo... Sabe que la primera ves que no tuve conciencia de mi... Fue el día que Darien me humilló...-
- serena no estamos en sesión...
- quiero contartelo como amigos... Te tengo demaciada confianza... Puedo tutearte verdad?-
- si claro... - contestó me decide de mis sandalias y enterré mis dedos en la arena, nunca después de ese día comenté esto con nadie, mi padre se enteró por otras personas y cuando me cuestionó respeto mi decicion de no hablar de ello.
- ese día, no quería salir yacía una semana que Darien me había dejado una carta donde decía en pocas palabras que solo fue un desechable para el... Reí y Mina me convencieron de salir y despejarme no muy convencida acepte el lugar era bonito había grandes pantallas, jaulas con chicas y chicos bailando el sitio me recordada a los clubs donde el solia tocar... La noche era amena... Baile un poco Reí me presento a unos amigos... Pero de la nada el dj comenzó a decir " tengo un sorpresa para la señorita... Serena Tsukino !!! De un hombre que nunca la olvidará..." Mi corazón comenzó a latir tanto pensé que Darien me pediría perdón, que saldría con algún detalle hermoso pensé que me haría la difícil... Los chicos con los que estaba emocionados comenzaron ha hacer señas para que todos me ubicaran, yo tenía tanta pena, me sentía como toda una celebridad... cuando las luces se enfocaron en mi, Mina me animo para pararme, una empleada del lugar me dió un sobre, cabe decir que el lugar estaba lleno... Reí me dijo... "Hay Amiga no lo perdones tan fácil... Que sufra... "
Paseaba mis ojos por todos lados tratando de ver a Darien, o a Lita la encargada de sus relaciones públicas y que fungía como su representante, desde que Darien comenzó a tener fama. El dj pidio a los asistentes que dirijieran su mirada a las pantallas y entonces comenzó el espectáculo de horror... En las pantallas se comenzó a observar un vídeo sexual donde los protagonistas éran Darien y yo... Claro el muy cobarde tapo su cara... Cerré mis ojos todos los presentes comenzaron a chichichear a burlarse de mi, Mina me tomo de la mano y corrio hacia la salida mientras Reí furiosa le gritaba y maldecia al dj que tenía cara de que no sabía nada, entre mi vergüenza pude distinguir que mientras Reí le gritaba el intentaba quitar el vídeo, Mina me saco aprisa del lugar donde a mi paso los desgraciados gritaban... majaderias... Recuerdo cada insulto, que esos malditos me dijeron, mientras grababan con sus celulares, Mina me tapo la cara con su chamarra y me subió a un taxi, Reí salió corriendo y me llevaron a su departamento, en todo el camino no dije palabra a ellas las escuchaba hablar pero no les ponía atención, en mi solo vivían el odio, el dolor pasaban una y otra vez las malditas escenas, llegue a tal estado que no recuerdo cómo baje del taxi, ni como salí de tal estado.
Mis amigas dicen que solo me quedé mirando a la nada, y por más que ellas me hablaban yo parecía estar ausente. Dicen que me recosté en el sofá y me quedé dormida, me dejaron sola  por un minuto no se dieron cuenta a qué hora me salí, recuerdo que a la mañana siguiente amanecí en un motel cerca del lugar donde el se presentaba, sin recordar nada, y con esa sensación de vacío, en mi, justo en ese momento mirándome en un lugar extraño, desnuda comense a llorar, con un sentimiento que no podía escribir y aunque intentaba no llorar mis ojos no parecían tener control, así comenzó está maldita enfermedad que solo me ha acercado más al dolor.

DIVIDIDA ( Terminada)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora