capítulo 1

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DIVIDIDA
capítulo 1

SERENA
2da sesión

Han pasado tres dias desde la primera sesión que tuve con el doctor Kou, y ni siquiera recuerdo la mayor parte de ella, gracias a Usako, esa mujer es perversa y pervertida hay veces que amanezco a horas de casa, con extrañas marcas en mi cuerpo, y vestida de una manera que no es mi estilo, con diminutas faldas de cuero y tops, eso cuando llego a amanecer con ropa, ya que la mayoría de las ocasiones me encuentro desnuda, en alguna cama de los mas lujosos hoteles con todo pagado y he llegado a persivir el aroma se él, los recuerdos de mi primera vez llenan mi cabeza, en ese momento toque el cielo, literal mire las estrellas es fue tan tierno, jamás imaginé que fuera una vio mentira, no recuerdo como es que llego a esos lugares, su carácter obviamente es mucho mas fuerte que el mío, por mas que he tratado de controlarla ella es mas fuerte cada dia. No se cual sea su objetivo o que es lo que busca.
Temerosa de lo que pueda pasar en el trayecto al consultorio tomo un taxi, estoy a buena hora mi cita es a las 5:00 pm y son las 4:30 cuando me encuentro frente al edificio, saludo al vigilante llamo al elevador, pero una vez mas ella con su voz llena de pecado se apodera de mi.

USAKO
Pretendía no salir hasta la noche, he ir a aquel club y devorar a Darien pero este doctor no se me escapa vestido, antes de llegar al piso saco de la bolsa algunos cosméticos y me pongo un rojo carmín en los labios, por suerte al desaserme de la ropa de Serena, no tiene otra opción que usar la que a mi me gusta pero aun asi insiste en llevar esa horrible gabardina que tapa todo mi cuerpo incluyendo mi hermoso y bien torneado trasero, ojala pudiera acabar con esa personalidad tan fastidiosa.
Termino de maquillarme y la puerta del ascensor se abre, la secretaria me anuncia, y veo en sus ojos esa mirada curiosa tratando de escudriñar mi interior, la miro y le digo:- se le perdió algo?-
Ella se disculpa, y el guapo dortor sale del consultorio, con una camisa polo blanca un pantalón de lino café, su cabello atrapado en una coleta, sonríe y me extiende la mano para saludarme he invitarme a pasar.
-adelante señorita Usako...- dice
- gracias doctor...- digo coqueteandole y aprieto su mano, pensando en lo que me gustaría que el me apretara de esa manera entre sus brazos. Me señala el sofá de piel que esta junto a la ventana, y me pide tome asiento mientras el va por la grabadora y la librera junto a su escritorio, lo miro y me encanta, fantaseó por unos segundos con el y Darien deborandome en la cama...
Me siento en el sofá alzándo la falda un poco mas arriba de mis rodillas, y cruzo las piernas, me recargo un poco y muerdo mi labio inferior... Para luego acariciar el contorno de mis labios y hacer que el doctor me vea. Él lo hace pero disimula que no le ha gustado, se sienta frente a mi y dice:- muy bien Usako esperaba que Serena viviera hoy...-
- asi ... Para que?- contesto con mis ojos fijos en los suyos
- tengo que terminar una charla con ella... Es algo sólo de nosotros dos...- sonrio burlonamente se que la insípida de Serena nisiquiera lo dejaría besarla.
Para que la quiere ella es aburrida, no es una mujer de verdad... Aun es una niña, Mejor digame doctor... Tiene alguna cita para hoy en la noche?-
me levanto camino hacia él y me siento en su regazo, él de inmediato se pone de pie tomandome de la cintura, y alejándome, pero pude sentir la dureza de su miembro, estoy segura que si hurgo un poco mas no tardare en estar en su brazos.
-señorita Usako es usted hermosa, y encantadora pero necesito hablar con Serena si la deja venir le prometo salir hoy en la noche a tomar un café con usted...- no me agrada la idea de dejar a la tonta de Serena con él, pero su promesa me emocionó, asi que la deje salir.

SERENA
No se como pero estoy sentada frente al doctor con mi falda muy arriba y siento el maquillaje en mi rostro, rápidamente bajo la falda acomodo mi camisa.
- lo siento doctor... - digo algo apenada
- por que se disculpa?- me pregunta con su tierna mirada
-por lo que sea que Usako haya dicho o hecho...-
-calma Serena... Puedo hablarle de tu verdad?-
-sssi claro doctor Kou...- digo algo nerviosa y tartamudeando
-Serena... Antes que nada te debe quedar muy claro que tu no eres ni seras responsable de lo que Usako haga ok?-
-pero... Es que todo están confuso...- digo desesperada como es que en una persona pueda haber dos personalidades...
-calma... Para eso estas aqui... Para comprender... Yo te ayudare y juntos treremos de vuelta la tranquilidad a tu vida... Ahora dime Cual es el primer recuerdo que tienes de tu infancia?- esa pregunta me hizo remontarme a mi fiesta de seis años donde esperaba con ansias conocer a mi madre, recuerdo que anhelaba un hermoso vestido que habia visto en un aparador del centro comercial, pero mi abuela decidió ponerme un largo vestido blanco y una coleta solo fueron invitados los hijos de sus amigas de la iglesia.
- pues sabes Seiya mi infancia fue como todas...-
-mmm como es como todas?-
-mi abuela se encargo de mi desde que nací, mi padre en ese tiempo habia adquirido un trabajo que le exigía estar viajando constantemente, pero siempre estuvo muy al pendiente de mi...-
-y tu madre?- esa palabra fue tan extraña para mi... Hace años que no pensaba en ella, no al menos con el deseo de verla... De saber que es de ella?
- no lo se, mi abuela murió sin decírmelo... Y no tengo el valor de preguntarle a mi padre...- el doctor me miraba con ternura y respetó en sus ojos no habia la clásica lastima que todos me tienen desde pequeña, incluso mi abuela. Su mirada me daba un poco de calor, a mi corazón.
- como se llamaba tu abuela?- pregunto
-Serenity... Ella era una mujer hermosa, estricta, clásica y muy religiosa... Su pérdida dejo un vacío en mi corazón y vida...- recordar a mi abuela es algo mas que solo recordar sus palabras o gestos, es una combinación de dolor, amor.
- dime hace cuando que murió... Hace cuatro años cuando yo tenia dieciséis... Fue un infarto fulminante, desde ese dia vivo con papá en su pensión donde conocí a...- es solo hecho de descubrir que ese hombre aún esta tan presente en mi me duele... Siento la humillación una y otra vez al caminar pienso que toda la gente sabe mi desgracia y se burla de mi.
- por que lloras... A quien conociste...- me pregunta el doctor mientras se acerca y con un pañuelo que saca de su bata y limpia suavemente mis lagrimas, le agradecí; mis labios temblaban y tengo tanto coraje encerrado en mi, lo que Darien me hizo es lo peor que un hombre puede hacerle a una mujer incluso recordarlo me da vergüenza.
- calma Serena hablame de ti? Dime cuales son tus gustos? A que te dedicas?-
Aspire mi nariz unas cuantas veces, y seque las lagrimas que aún rodaban, dibuje una sutil sonrisa.
- bueno como ya sabe soy Serena Tsukino, me encantan los animales, los marinos son mis favoritos me encantaría ser bióloga marina, y pasar el resto de mi vida en el mar... No se que me atrae de él océano ya que la casa de la abuela quedaba muy pero muy lejos de una playa... Ademas ella nunca me hubiera permitido ponerme un traje de baño... Una de esos lindos que mis compañeras de colegio usaban en sus vacaciones y me mostraban en las fotos cuando regresaban de ellas... Mi abuela se habría infartado al verme mostrar un poco de mi vientre... o peor aun un escoté, ella se encargaba de hacer mi ropa, toda larga solo dejando libre mi cara, era rutinario ir todos los dias a la iglesia incluso hizo me inscribiera en el coro, nunca tuve alguna amiga, mucho menos un amigo mi abuela decía que la juventud de ahora era una libertina y que podían contagiarme sus malas mañas, es por eso que todos le temían y por ella no se atrevían a hablarme, aunque enfrente de mi casa vivía un chico muy guapo siempre al terminar de comer subía a mi cuarto con la escusa de hacer la tarea solo para verlo jugar fútbol con los demás chicos... Yo me ocultan tras las cortinas miraba fascinada y a la ves horrorizada como al calor del juego se quitaba su camisa... Por suerte mi abuela nunca me descubrió espiando a ese joven que nunca supe su nombre sólo se que le llamaban rey, sabe doctor... Aveces quisiera tener el carácter de Usako... Ella no se reprime...- la verdad es que hablar con el liberaba la tensión encerrada en mi, jamas tuve el coraje de enfrentar a mi abuela y pedirle que me sacar del colegio de monjas y me mandara a uno mixto, jamas pude decirle que me hubiera gustado asistir a fiestas, vestirme moderna, ser un poco mas coqueta...
No queria disgustarla ademas que mal podría hacer ella sólo estaba protegiéndome de salir lastimada, o embarazada como varias se mis compañeras a manos de hombres como Darien. Cuando entendí que lo mejor era seguir las enseñanzas de mi abuela, ella murio dejandome a cargo de mi padre, al cual solo veía los fines de semana.

DIVIDIDA ( Terminada)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora