Cotton Candy | YoonMin [Omegaverse]

⋆ 06 ⋆

El Sol comenzaba a colarse por la ventana de la recámara perteneciente a la linda pareja que dormía muy cómodamente abrazada en su cama.
El aroma a chicle y manzana combinaba perfectamente con el de chocolate y tierra húmeda que impregnaba todo el lugar.

El primero en despertar fue SeokJin que, al abrir sus ojos lentamente lo primero que pudo observar fue a cierto alfa de tez morena que lo tenía aferrado a su cuerpo en un cálido abrazo. Sonrió por lo feliz y hogareño que se sentía, estar en los brazos de su alfa era de sus momentos favoritos en el día. Se acercó lentamente al cuello de NamJoon para poder inhalar todo el delicioso aroma de su amada pareja. Kim NamJoon era su adicción.

Dió un pequeño saltito al sentir como su alfa se removía y soltaba pequeños gruñidos, señal de que estaba despertando. Los brazos de NamJoon lo abrazaron con más fuerza mientras sus manos acariciaban la espalda de el omega pasando a su estrecha cintura, acercándolo más a su cuerpo.

—Buenos días precioso. —soltó con voz ronca al estar apenas despertando. Depósito un delicado beso en el cuello de SeokJin, exactamente en la marca que yacía orgullosa en el.

—Buenos días amor. —respondió Seokjin, soltando leves suspiros por lo satisfactorio que era sentir la cálida respiración del alfa en su cuello.

NamJoon paró las caricias de la espalda de SeokJin para pasar a su abultado vientre, donde se encontraba creciendo la muestra de todo su cariño y amor, su cachorro.

—¿Cómo amaneció nuestro lindo cachorro? —preguntó con un tono más agudo, causando que Jin soltara una leve risita.

—Feliz de tener a un papá tan apuesto como Nam~. —contestó el pelirosa simulando la voz de un niño. Posó una de sus manos en la de NamJoon que se mantenía acariciando su pancita. —También despertó con hambre. —hizo un puchero el cual fue besado velozmente por NamJoon.

El castaño rió por eso, todas las mañanas el bebé y SeokJin despertaban con un gran apetito (más del normal).

—Entonces creo que tendré que preparar algo rico para consentir a los dos amores de mi vida. —dijo NamJoon intentando levantarse de la cama para preparar algo de comida en la cocina, siendo imposible gracias a que su Omega no lo soltaba. —Cariño, tengo que ir a cocinar.

—No, iré yo, no quiero que mueras o quemes la casa. —negaba mientras se levantaba de la cama. NamJoon lo miraba simulando indignación.

—¿Tan poca fe me tienes?

—Lamentablemente, sí.

SeokJin fue hasta el baño para darse una ducha rápida antes de cocinar, no le gustaba sentirse sucio en las mañanas. Se colocó unos pantalones sencillos color negro junto con una sudadera holgada, ya que la mayoría de su ropa le quedaba bastante apretada a causa de su creciente pancita.

Bajó para preparar algo mientras NamJoon se bañaba y alistaba para ir al trabajo.

Su alfa bajó y entro a la cocina al percibir el delicioso olor a Hot Cakes. Llevaba puesto unos pantalones de vestir y una camisa blanca con las mangas dobladas hasta la mitad de sus brazos y un botón desabrochado.

—Siéntate Nam, ahora te sirvo. —indicó Jin al notar la presencia de NamJoon.

El castaño obedeció y se sentó en su lugar de siempre, viendo como su precioso omega servía todo.

El pelirosa le extendió un plato con Hot Cakes, fruta picada y su café que nunca podía faltar en las mañanas. Sonrió mostrando sus hoyuelos y recibió el plato, borrando su sonrisa al ver el plato de SeokJin.

—Pero que... —murmuró con confusión. El pelirosa comía animadamente unos Hot Cakes con tres bolas de helado sabor a Chocolate, miel, chispas de chocolate y Chantilly.