Por fin es viernes.
Me levanto de la cama perezosamente y salgo hacía la cocina, mi lugar favorito de esta casa.
—Buenos días—le digo a Fernando y me siento a su lado.
—Hola Kenzie, ¿qué tal te va en el trabajo?
—Bien, ¿por qué lo preguntas?—le contesto mientras mastico mi tostada.
—No, por nada, era por saberlo. ¿Te ha llamado Millie?
—Qué va, me dijo qué en cuánto supieran algo, me avisarían.
Llego al instituto y me encuentro a Dylan en mi taquilla.
—Hola Mackenzie—me saluda.
—Hola—esto es bastante incómodo.
—Vengo a pedirte perdón por lo de ayer, sé qué estuvo mal. Aunque no me arrepiento de haberte besado. Ya no pasará más, si tú no quieres, claro.
—Déjalo, ya da igual.
—Acabo de cortar con Loren cuándo la he visto esta mañana.
—Oh, ¿cómo se lo ha tomado?
—Mal, aunque se lo esperaba. Dice qué me vio más distante con tu regreso.
Más tarde, salimos del patio y me voy con las chicas al campo de fútbol. Pero una persona se interpone en nuestro camino.
Loren.
—Hola Loren, ¿te...?—empieza a decir Sarah, pero ella la interrumpe con un grito.
—¡Eres una maldita zorra! ¡Me has robado a Dylan, no tendrías porqué haber regresado, estabas muy bien lejos de aquí!—grita ella.
Esto sí qué no me lo esperaba, y menos de ella.
—Loren, yo...—no me deja terminar porque estampa su palma con mi mejilla.
No voy a permitir qué me peguen de nuevo. Otra vez, no.
—¿Qué haces?—me está sacando de mis casillas.
—Loren, será mejor qué te vayas—le advierten las chicas.
—¡Eres una puta, me robas el novio y tienes la cara de hacer cómo si no pasara nada!—y dicho eso, me coje de los pelos y me tira al suelo.
Nunca he sabido defenderme.
Y ahora, pasa igual.
Momentos después, alguien la coje de la cintura y veo qué es Dylan. Las chicas me ayudan a levantarme, y la directora viene hacía mí.
Mierda.
—Vosotras dos, a mi despacho—manda ella con voz autoritaria y Loren y yo la seguimos en silencio.
Llegamos a su despacho y nos sentamos en una silla, y la directora, detrás de la mesa.
—¿Qué ha pasado?
—Ha sido una pelea, nada más—se excusa Loren.
—¿Quién ha empezado?
—Ella—le contesto yo con voz firme.
—¿Te has defendido?—y yo niego con la cabeza—Bien, Loren, estarás una semana castigada. Después de clases, irás a limpiar los vestuarios. Mackenzie, te puedes ir.
Me levanto y salgo rápidamente de la
sala. Camino hasta el campo de fútbol y me encuentro a los chicos allí.—¿Qué te ha dicho?—pregunta Liam.
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LOVE YOU (COMPLETA) #2
Teen FictionTras su secuestro, Mackenzie es obligada a abandonar a sus amigos e irse de su ciudad. ¿Qué le pasará ahora? Léela para descubirlo.