Una más, ese es mi mantra por el momento, una más, debo dar otra vuelta, no me voy a desmayar yo puedo hacerlo, pero creo que no es suficiente con mi voluntad, siento un frío en mis manos y un cosquilleo en mis mejillas, estoy a punto de caer lo puedo sentir, pero me niego a fallar ante el capitán y su prueba, pero mi cuerpo no lo resiste más y en un paso que doy más todo se empieza a poner negro y siento como voy perdiendo el conocimiento.
Abro mis ojos y no comprendo donde estoy, me pesa el cuerpo y me siento sin capacidad para moverlo a mi voluntad, miro a mi alrededor y todo parece indicar que estoy en la enfermería del cuartel, cuando recuerdo mi castigo y cómo mi cuerpo sucumbió al cansancio.
Veo una figura al lado de mi cama sentada en una silla así que lo enfoco para descubrir al causante de mis males, el capitán.
-Hola capitán - dije con una sonrisa cansada - Creo que no me fue bien, no logré mantenerme hasta que me lo indicara - terminé aún con una sonrisa mientras lo miraba a los ojos - ¿Cómo te sientes? - fue lo único que preguntó, no dijo nada sobre el castigo.
-Lista para otra maratón - respondí en tono de broma, pero parece que para el no fue una buena broma ya que solo suspiró agotado y se levantó de la silla en la que se encontraba - Descansa por hoy, mañana continuaremos.
Sin más se giró y salió del lugar, el capitán Levi es muy extraño, pero cada vez que miro sus ojos siento que todo desaparece, sus ojos me gustan y su mirada que superficialmente parece fría pero que en el fondo esconde algo más que una parte de mi quiere descubrir, me hace querer acercarme más y conocerlo mejor, algo que no había sentido con nadie más, con todos estos pensamientos locos en mi cabeza volví a caer dormida.
Cuando desperté el lugar estaba completamente solo, me levanté de la cama y decidí ir rumbo al comedor, parece que es aún temprano ya que no hay muchas personas y en el pasillo veo a mi padre caminado junto al capitán, no les di mucha importancia al principio probablemente hablan sobre la expedición de la otra semana, pero una espina me decía que los escuchara hablar, así que con cuidado me aproxime lo más posible
-Ese no es el problema Levi - escuché a mi padre - Son los rumores que hay lo que me preocupan - Eso llamó mi completa atención ¿de qué rumores hablan?
-Yo solamente la estoy entrenando como pediste, de manera pesada y exhaustiva no veo en que se relaciona una cosa con la otra - respondió el capitán seriamente ¿están hablando de mi?
-Se relaciona en que pasas mucho tiempo con ella y eso está empezando a causar rumores, sin tomar en cuenta situaciones como la de hace unos días en la que los encontré - replicó mi padre lo que me causó un sonrojo, si solo supiera que después de eso nos besamos - Ya te expliqué y sabes que no tenemos ninguna relación, lo que pasó hace unos días fue un accidente, pudo haber sido Petra o hasta Hanji.
-Ambos sabemos que si hubiera sido Hanji la dejarías caer antes de sostenerla - aclaró mi padre lo que me causó mucha gracia - Pero eso no es lo importante, Levi recuerda que _____ es mi hija después de todo y la conozco lo suficiente para saber que, si ella se enamora de ti no dejará la legión a menos que tu lo hagas o a menos que ella muera, es justo como su madre, y tú eres muy importante para la humanidad como para perderte por amor, los sentimientos pueden llegar a nublar tu juicio y necesito que te mantengas claro.
-¿Perderías a tu hija con tal de mantenerme en la legión? ¿Aunque eso signifique su muerte? - preguntó el capitán y mi padre no respondió, dándome a entender que si lo haría, justo como con mi madre, ella lo amaba y por eso siguió en la Legión hasta el último día de su vida, para estar junto a mi padre, mi pecho dolía demasiado para contenerlo, así que sin darme cuenta estaba entrando en la oficina de mi padre a la que habían llegado durante su charla.
Sin pensar en mis acciones o las consecuencias de lo que estaba haciendo entré y le hablé directamente a mi padre - Aunque trate de sacarme de aquí no lo haré líder de escuadrón Erwin, si de verdad me quiere fuera de la legión de reconocimiento, deberá expulsarme usted mismo - dije sonando dolida y retadora al mismo tiempo, esperando su reacción que hasta el momento no era ninguna, él parecía meditar todo lo que estaba sucediendo en ese momento lo cual me exaspera.
-Esa es tu decisión, yo solamente quería mostrarte lo que es estar en la Legión y que no tomes la elección basada en emociones o pensamientos que permean tu verdadera forma de pensar y por los que puedes arrepentirte en el futuro - dijo como quien está hablando del clima y no alguien que conspiró para alejar a su propia hija - No se preocupe por eso, no me encuentro afectada por emociones o pensamientos así que no me voy a arrepentir y podré lidiar con las consecuencias de lo que haga - dije y salí del lugar tirando fuego por mis ojos con rumbo al campo de entrenamiento, sentía una persona seguirme.
Cuando llegué a un punto de molestia me giré para encarar a la persona y distinguí al capitán Levi quien se detuvo al hacerlo yo -Capitán ¿Alguna vez se ha enamorado? - pregunte de repente lo cual pareció sorprenderlo, al fin una emoción en él -No, mi vida no deja espacio para sentimientos como el amor - respondió y yo lo miré a los ojos que reflejaban honestidad -No he tenido una vida lo suficientemente normal como para desear una pareja o una familia como las personas normales, mi familia ahora es la legión.
-Yo tampoco se lo que es el amor, es por eso que me cuesta tanto comprender como mi madre se enamoró de mi padre, que es una persona tan cerrada a los otros - dije tratando de entender a mi madre un poco -El beso... ¿Trató de usarlo como una forma de deshacerse de mi? Para que mi padre me aleje de su entrenamiento -dije medio en pregunta y medio en afirmación.
-Tu padre no sabe del beso, no le dije nada de eso - respondió lo que me causó sorpresa, esta es su oportunidad de quitarme de su camino -¿Por qué? - fue lo único que pude formular
-Porque no me quiero deshacer de ti contrario a lo que piensas, me siento cómodo con tu cercanía y no te voy a alejar hasta saber por qué eres diferente -respondió calmadamente como midiendo sus palabras, el capitán me quiere cerca y por instinto trato de comprobar sus palabras acercándome a él, mi cuerpo quiere más, estar más hasta sentir su cuerpo pero me rehuso a acercarme más.
Estábamos a un paso de distancia, lo sentí subir su mano a mi rostro y con el dorso de sus dedos me acarició la mejilla, movió su palma hasta mi nuca y en un impulso me acercó hasta unir nuestros labios, en ese momento el mundo se detuvo.
______________________
¿Qué tal? ¿Les gustó?
ESTÁS LEYENDO
Similares (Levi y Tu)
FanfictionTodos piensan que soy fría, que no tengo corazón, justo como él, dicen que nos parecemos, pero no es así, si se tomaran el tiempo para conocerme sabrían que no soy tan fría como los demás piensan.