Similares (Levi y Tu)

#30

Levi le daba la espalda a Hanji en todo momento así que me acerque al lugar en el que cayó su camisa y la levanté —Así que eran ciertos los rumores enana, no creí que realmente tuvieras algo con ese enano gruñón, después de todo ya lo conoces con su humor y su obsesión por la limpieza, además no es muy bien parecido, hay soldados más apuestos que él en la legión, e igualmente no creí que él te permitiera acercarte tampoco no es de las personas con más amigos por aquí - dijo y yo me sonroje mirando al suelo —Tch, Maldita cuatro ojos, déjala en paz de una buena vez ¿Qué quieres? - preguntó mirando sobre su hombro —¿Ves? Amargado - dijo mirándome y señalandolo —¡Hanji! Basta - ordenó girando su cuerpo para encararla —¡OH! ¿Estas así de amargado porque te duele? - dijo señalando su entrepierna, un ataque de tos me dio por la sorpresa ante lo que dijo y sentí mi rostro caliente —Eso es normal Levi al menos en los humanos, me pregunto ¿Como se reproducen los titanes si ellos no tienen sistema reproductor? - dijo como si la situación por sí sola no fuera incómoda —Hanji, por favor vete - pedí tomándola del brazo —¡Está bien! Ya entendí que los dos enanos quieren estar solos - dijo antes de salir por la puerta, suspiré de alivio y el calor en mi rostro me hacia sentir sofocada, me acerque a él y le pasé su camisa —Yo... Lo siento - hablé en voz baja.

—No te disculpes porque yo no me arrepiento de lo que pasó, me arrepiento que esa entrometida cuatro ojos llegara - dijo mientras se ponía su camisa —Me dejé llevar por el temor de la nueva misión y te puse en una situación incómoda - dije mirándolo como ordenaba su uniforme —No fuiste tu, fue ella por no tocar a la puerta como las personas normales - habló terminando de colocar impecablemente la camisa como si nada hubiera pasado a excepción de su entrepierna que se negaba a volver a la normalidad —¿Te duele? No lo había pensado hasta que Hanji lo dijo - pregunté acercándome —No mucho, ella ayudó a enfriarme con su intromisión - respondió acercándose más, la tensión nuevamente subiendo entre ambos –_____ - escuche mi nombre y la puerta abrirse —¡Maldición! ¿Aquí nadie sabe tocar la puerta? - dije furiosa volteando para ver a Damian con expresión furiosa también en su rostro —¿Qué es esto? - preguntó viéndonos a ambos.

—Damian ¿Qué quieres? - pregunté irritada por su pregunta inoportuna igual que su aparición —Yo venía a decirte las buenas nuevas, pero te veo con este enano de bolsillo en una situación comprometedora - terminó molesto y me dio gracia su definición de comprometedor considerando que no nos vio en la posición o con la misma cantidad de ropa que Hanji —¿Cuáles son las buenas nuevas? - interrogo ya que el momento lo arruinó por completo —Volveré a formar parte de tu escuadrón, tu padre me acaba de informar - respondió y sentí un dolor de cabeza a punto de venir, tomé entre mis dedos el puente de mi nariz —Ya que la situación está así, deberíamos dejar en claro algunas cosas importantes, primero no deberías llamar a Levi enano de bolsillo, más considerando que compartiremos el tiempo de entrenamiento y es tu superior - dije y el abrió los ojos sorprendido –¡No! ¡Me niego! ¡No quiero que estés cerca de él durante los entrenamientos! - dijo alzando la voz y molestandonos al capitán y a mi —¿Todavía no lo entiendes? - preguntó Levi a mi espalda que aun se mantenía atrás con un tono tranquilo pero peligroso —Damian, aunque no entrene con él es imposible poner distancia entre nosotros ¡Entiéndelo de una vez! - dije alzando mi voz —¡Ja! ¡¿SEGÚN TÚ POR QUÉ ES IMPOSIBLE?! - preguntó tan fuerte que parecía que toda la legión escuchó —¡Porque Levi es mi novio! - grité también aunque no tan fuerte como él, ambos nos quedamos en shock él por la noticia que acaba de recibir y yo por lo que dije sin pensar, sentía los segundos pasar como si fueran horas.

Damian se giró y salió de la habitación sin decir nada —Así que lo dijiste, no creí que lo hicieras - dijo el capitán calmado —A este paso en mi escuadrón estarán todos mis enemigos - hablé cuando comprendí lo mucho que lastimé a mi amigo con el modo de decirlo, debía saberlo, pero no de esa manera –Estará lastimado, pero no te odiaría nunca - dijo volteandome —¿Cómo estás tan seguro? - pregunté temerosa a lo que me espera —Porque aunque yo no quiera admitirlo, él te ama - dijo y besó mi frente —Tal vez debiste elegirlo a él - dijo suavemente antes de alejarse y salir de la habitación dejándome sola con mis pensamientos —Tal vez debí, pero él no me hace sentir como tú lo haces Levi - dije en un susurro para mi misma ante sus palabras.