CAPITÁN ROGERS

CAP 27 TE ESPERARÉ

¿LISTOS PARA LLORAR?
💔💔💔

Rogers bajó a Nat con mucha delicadeza una vez que estuvieron dentro del baño para después concentrarse en limpiar sus piernas con una toalla húmeda, siendo muy cuidadoso de no lastimarla.

El rubio terminó y de apoco fue dibujando una línea de besos por el largo de todo su cuerpo hasta llegar a sus labios, Nat solo pudo soltar un profundo suspiro, ya que la forma tan protectora que mostraba Steve cada vez que estaba cerca de ella le inflaba el corazón de amor. La rusa se arqueó de placer entre sus brazos y simplemente se dejó mimar.

-No recordaba que fueses tan bueno en esto... -Nat jadeó mientras su cuello era devorado por la boca seductora del capitán.

-Bueno debo aceptar que tuve mucho tiempo libre para imaginar todo lo que haría contigo cuando regresaras a mi. -Steve le dijo con una sonrisa ladina dibujada en su boca.

-¿Así? y cuénteme Capitán... ¿Qué imaginó que haría conmigo? -Le respondió con coquetería.

-Bueno... Digamos que...

Ronroneó acercándose hasta su cuello para susurrarle algo con su irresistible voz ronca y varonil. Haciendo que Natalia se sonrojara y comenzara a reír divertida y a la vez extrañamente avergonzada.

-Eso me parece muy creativo e interesante, Capitán.

Natalia sonrió y le contestó antes de besar sus labios con suavidad para luego colgarse de su cuello y abrazarlo con ternura, rozando y presionando sus pechos desnudos contra sus pectorales. Rogers tuvo que separarse de ella por un instante para abrir el grifo y comenzar a llenar la tina, disponiéndose a quitarse los restos de ropa para quedar en simples bóxers.

-Ya era hora que esos horribles pantalones desaparecieran de mi vista... Comenzaba a sentirme en desventaja... -Nat le dijo en un tono divertido, lo único que había logrado quitarle antes de que la asaltara había sido su camisa.

-¿Y que opinas de esta prenda? ¿Te gusta? -Steve le dijo mientras se acomodaba el elástico de sus boxers de forma provocativa para luego acercarse a ella.

-Nop... No me gustan, son horribles. -Ella respondió en tono juguetón, pero seductor.

-¿Así?

Contestó siguiendo aquel juego de palabras tan placentero para después tomarla por la cintura y atraerla a su cuerpo.

-Sip...

Natalia sonrió y llevó sus manos hasta la cintura de sus boxers para sumergir sus dedos por debajo del elástico y explorar un poco la piel acaramelada que el americano escondía debajo. La pelirroja no fue nada tímida al masajear las dos mejillas de su trasero respingado para después atraerlo contra su propio cuerpo y sentir la presión que ejerció la larga y endurecida erección que aquel hombre tenía palpitando entre sus piernas contra su pelvis.

-Me toca jugar...

Nat sonrió maliciosamente y comenzó a depositar muchos besos húmedos y candentes sobre los pectorales del adonis americano, mordiendo cada milímetro de piel y causando que soltara varios gruñidos roncos de placer que la encendieron.

-¡Ohhh, Santo Cielo!

Fue un profundo gemido lo que escapó de la garganta de Steve cuando las manos juguetonas de la rusa se deslizaron hasta su entre pierna para empuñar y acariciar su miembro hinchado por debajo de la ropa y estimularlo un poco. La pequeña traviesa se mordió el labio con lascivia al percatarse de la expresión indescriptible y terriblemente sexual que se enmarcó en el rostro de Steve así que aprovechó de aquella distracción para bajar su prenda por completo y mandarla volar. Quedando finalmente en condiciones iguales.