Solo Yo |Sterek•M-Preg|

Capítulo 42: Grito.

- Derek debes dejar de gruñirles a todos los que intentan acerarse a Stiles – reprendió Adalia, luego el gruñido de Derek se escuchó – a mí no me ladres chucho, ve por tu galleta, chico malo – lo roció con agua, Aion desde el sofá veía la escena divertido.

Dos semanas habían pasado desde que se supo del embarazo del chico hiperactivo, que ahora sabían no era una enfermedad, eso lo había heredado de su rubio padre, lo cual nadie creía al ver como de serio y frío podía llegar a ser el hombre que medía 2.01 metros de altura.

Aion se había adaptado mejor de lo que esperaban a la cercanía de Derek, lo que no sabían era que el latido extra en el cuerpo de su primogénito lo ayudaba mucho a calmarse y a evitar cualquier escena sanguinaria.

La calma se había instalado en aquel edificio luego de tan reveladora noticia, con la llegada de Cora los chicos pensaban que las cosas podían salirse un poco de control, pero la loba sabía que estaba en desventaja y evitaba comentar cualquiera cosa, así que el silencia la había acompañado desde que llegó, solo los observaba y veía como interactuaban entre ellos, sorprendida de como actuaba su hermano con el castaño. El castaño, ella pensaba que era humano, pero ahora podía sentir que no era así, su olor se había mezclado totalmente con el de Derek y la energía pero parecía desbordarse de su cuerpo le podía los pelos de puntas, sin embargo se sentía segura y en completa tranquilidad, la loba en su interior quería mostrar respeto al compañero de su alfa.

Ahora que sabía la verdadera naturaleza del compañero de su hermano, entendía un poco el por qué.

Sus divagaciones fueron interrumpidas por la risa de su hermano al abrazar a su compañero, vio la felicidad en sus rostros y eso fue todo lo que le importó, sonrió para sí misma, ella protegería esa sonrisa, evitaría que cualquiera los lastimara, ese fue su nuevo propósito.

///////////////////////////////////////////////////////////////////////

Stiles estaba aprendiendo a sentir el bosque alrededor del Nemeton, cada árbol, arbusto, piedra y cada ser vivo que lo habitaba, desde la más pequeña hormiga, hasta el más grande ciervo.

Eso le gustaba, poder sentir la energía fluyendo en ellos, de alguna manera estar conectado a ellos le traía calma, quiso ver el Nemeton y se concentró en el gran tronco, sus ojos se volvieron completamente negros y lo que vio le intrigó, del Nemeton se desperdigaban seis grandes raíces de alrededor de quince metros de largo, su mente se quedó pensativa, iba dejar de percibir cuando algo llamó su atención nuevamente, de las puntas de estas grandes raíces un gran flujo se extendía, se preocupó.

Recordó lo que había aprendido con Josías y se concentró en utilizar esas habilidades, al hacerlo como si de un mapa se tratara pudo ver hacía donde se dirigían esas líneas de energía, cada una llevaba hacia un árbol en alguna parte del globo terráqueo.

Cada uno de estos vibró de emoción al reconocer al nuevo guardián del Nemeton, el castaño observó con gran detenimiento como cada uno de estos árboles se empezaban a regenerar, no es que estaban marchitos, pero la nueva energía adquirida les hacía lucir más frondosos y llenos de vitalidad, una sensación un tanto extraña le llego de uno de estos, el cual se encontraba cerca de un volcán, pero no le prestó atención.

Dejó de utilizar sus habilidades y se centró en mirar a Derek, el hombre lobo había hecho un gran progreso en lo que se refería a interactuar con otros, en especial con Adalia, desde que el de lentes empezó a instruirlo para que pudiera manejar mejor sus nuevas habilidades, el moreno se había mostrado más gentil con los demás a su alrededor.

De igual manera observó a Aion, aun no lograba referirse a él como su padre, desde que el rubia le había pedido perdón a su Mate solo habían cruzado algunas palabras, no había logrado crear un lazo entre padre e hijo, no podía sacarse de la cabeza que su único padre era Noah, pero Adalia también era su padre aunque este fuera quien lo gestó, su cabeza era un enredo, pero el trataría de que la relación con Aion mejorara poco a poco, la paciencia es una gran virtud.