Capítulo 39: Primogénito.

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- ¿Eres tú? – preguntó al castaño, el arpa fue desapareciendo de sus manos al igual que el arco y se convirtieron en un collar con una clave de sol, que se enrollo en el cuello de Aion, Adalia respiro hondo.

- Si, es él - le dijo a Aion, quien no perdió tiempo y avanzó a grandes pasos hacia el castaño y los aprisiono entre sus brazos, abrazándolo.

– Mío - dijo llorando – Mieczyslaw – se separó de él y lo miró mejor, reconociéndolo.

Del cuerpo del rubio pronto comenzó a emanar una hermosa melodía, Stiles estaba un poco en shock, si, le habían dicho que él era su padre, inclusive él había querido que el hombre despertara, pero en aquel momento todo era tan real que no sabía cómo actuar.

Para él su padre siempre sería Noah Stilinski, pero no pudo evitar sentirse a gusto dentro de aquel abrazo que ese desconocido le estaba dando, aquel sonido era tan hermoso y a la vez nostálgico.

Esta vez los lobos se levantaron más rápido, a algunos la escena les pareció tierna, los otros estaban molestos porque sus oídos volvían a doler, Aion miró con recelo como los chicos estaban de pie, atrajo a Stiles más hacia su cuerpo y camino hasta Adalia.

- No dejaré que dañen a mi familia otra vez – su arpa volvió a aparecer en su mano, los lobos se pusieron alerta, pero antes de que actuara Adalia le agarro la mano que sostenía aquel instrumento.

- Ellos no son los malos – le dijo calmadamente – ayudaron a rescatarte.

- Es cierto, no les hagas daño – el castaño puso cara de perrito chapoleado, Aion iba a hacer caso omiso, pero no pudo con dos pares de ojos de ciervo en apuros que lo miraban y no pudo resistirse a tanta ternura.

El arpa volvió a tomar la forma del collar y abrazó tanto a Adalia como a Stiles protectoramente.

- Son MÍOS – miró de mala gana a los lobos, Derek iba a protestar, pero Adalia habló primero.

- Lo sabemos, ahora sentémonos, debemos hablar de algunas cosas – sin dejar de mirar a la manada los encamino hasta el sofá donde el rubio sentó a Adalia en su pierna derecha y a Stiles en la izquierda, el hombre era inmenso, un poco amenazante, pero el aroma que despedían los tres era muy agradable, había tanta calidez en esa escena, que nadie dijo nada.

- Ahora ¿Me puedes explicar qué hacen con una manada de lobos? – habló tranquilamente, pero sus ojos no dejaban de irradiar ira hacia los chicos.

- Los estamos adiestrando – fue lo primero que se le salió a Stiles, Josías y Adalia estallaron en risas, mientras los chicos se hacían los ofendidos.

- No es cierto – Adalia aún reía – déjame presentarlos, ellos son Liam, Isaac, Jackson, los gemelos Ethan y Aiden, Malia, Lydia, Kira y él es Scott, su alfa – señaló a cada uno mientras Aion retenía la información – ellos son Lisa y Dante, estaban con la bruja que te tenia prisionero, antes de que los ataques, ellos se alejaron de eso y fueron de mucha ayuda a la hora de salvarte – explicó antes de que pasara algo malo – y por último ellos son Cora, Chris y Peter son compañeros así como nosotros – el rubio se sorprendió – de hecho Dante es el compañero de Josías – el nombrado hizo un gesto con la mano a manera de saludo – él es Deaton, un druida – antes de que terminara de hablar Aion lo interrumpió.

- ¿Y quién es aquel que no deja de fulminarme con su mirada? – señaló a Derek, quien no dejaba de mirar como su castaño estaba sentado en las piernas de aquel hombre, sabía que era su padre, pero Aion había dicho que Stiles era suyo y eso al lobo no le hizo mucha gracia.

Stiles al escuchar la pregunta se levantó de donde estaba sentado y caminó hasta Derek, quien de inmediato lo aprisionó entre sus brazos y hundió su cara en el cuello de Stiles, llenándose con su aroma, Aion se quedó sorprendido, pero antes de que se levantara, el castaño habló.

Solo Yo |Sterek•M-Preg|Donde viven las historias. Descúbrelo ahora