Louis comienza a trabajar como asistente personal de Siena Styles, la diseñadora de modas más importante de la industria. Nunca se imaginó que tras conseguir este trabajo se encontraría con el amor de su vida nuevamente. Su corazón se rompe al saber...
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Era otro día "normal" en la vida de Louis. Observaba al lindo chico de ojos verdes y cabello largo a lo lejos, platicando con sus amigos. No sabía lo que decía, pero se imaginaba como sonaba y en su cabeza no pudo pensar en una voz más perfecta que esa.
— Ya deja de observarlo. Me causas miedo. — le dijo su amigo rubio al oído, haciendo que el más bajo se sobresaltara.
— Yo no estaba haciendo eso. — le aseguró mientras acomodaba sus gafas.
— Sí, ajá... — se burló Niall — ¿Porqué no sólo se lo dices? — y los ojos de Louis se abrieron exageradamente.
— ¿Cómo se te ocurre decir eso? El tipo es completamente heterosexual. Además tiene a su hermosísima novia Claire. — rodó los ojos, odiaba tanto a esa chica.
El ojiverde ni si quiera sabía de su existencia en la escuela. Y era raro porque su amigo rubio y él, eran bastante conocidos por ser los "maricones" de la escuela.
— Louis, eres muy ingenuo. Ese chico ama los penes, sé lo que te digo. — dijo con confianza mientras masticaba unas frituras que acababa de sacar de su mochila. Louis quiso tomar algunas, pero Niall rápidamente llevó la bolsa a su pecho.
— Tacaño... Te iba a invitar a mi fiesta de cumpleaños, pero ya no.
— No podrías hacer eso, soy el único, aparta de tus padres, que estará a la fiesta. — dijo, sin pensar en la que salía de su boca. Ciertamente, en ningún momento quiso hacer sentir mal a su amigo.
Louis se levantó de donde estaba y caminó en dirección a los baños.
Uno de sus dos lugares favoritos para desahogarse.
Se colocó sus audífonos y puso la música en modo aleatorio, la primera canción en sonar fue 'A Thousand Years'. Amaba esa canción y, aunque no le gustara admitirlo, tenía una gran obsesión con la saga de Crepúsculo.
El suave ritmo de la canción se vio interrumpido por el estruendo que se cuerpo hizo al chocar violentamente contra el suelo.
No sabía en que momento había impactado contra el cuerpo de él. Lo que sí sabía era que sus ojos estaban perdidos en las hermosas facciones del ojiverde. Sus mejillas se calentaron al darse cuenta de lo obvio que estaba siendo. Desvió su mirada rápidamente.
— ¿Te encuentras bien? — preguntó el ojiverde, realmente preocupado por el lindo chico tirado en el suelo.
En ese momento, Louis supo que había tenido razón, la voz de Harry era hermosa.
— S-sí, b-bien... — artículo, atropelladamente.
— Me alegro. — le tendió su mano al ojiazul para ayudar a levantarlo — Mi nombre es Harry Styles...
— Ya sabía. — susurró el castaño. — Soy... — sus palabras se vieron interrumpidas por el grito del ex capitán del equipo de la escuela. Ni siquiera pudo tomar la mano de Harry.
— ¡Deja a Harry, marica! — el chico rubio camina hacia ellos con determinación. Las miradas de todos los estudiantes estaban sobre la escena. — Harry no te juntes con este tipo de personas.
Las facciones del ojiverde se volvieron de total confusión. No entendía lo que su amigo decía.
— Y según tú... ¿qué tipo de persona es él? — interrogó con el ceño fruncido.
— Es una marica ofrecida. — escupió con repulsión hacia el chico con ojos acuosos en el suelo.
Y Louis no podía soportar las miradas repulsivas de todos los estudiantes sobre él. Su cuerpo estaba temblando, anunciando que en cualquier momento las lágrimas saldrían.
— Harry, que no te vean con este chico. Podría arruinar tu reputación y tu pase a ser el capitán del equipo. — algo hizo 'click' en la cabeza de Harry.
No podía perder la única oportunidad que tenía para hacer sentir orgulloso a su padre. Él no lo estaba obligando, pero sabía que eso era lo que más deseaba su padre.
— Vamos, Harry... — el rubio tomó el hombro del ojiverde — Dejemos a esta marica.
Louis sintió como un líquido cayó en su mejilla, efectivamente el chico rubio había escupido en su cara. Todos los que estaban presenciando la escena comenzaron a reír.
— ¡Maldito! — Niall iba corriendo hacia la escena. Al llegar empujó al chico, pero él ni siquiera se tambaleó — ¡Lárguense de aquí, malditos! ¡Tú también, estúpido! — señaló a Harry, quien no había hecho nada para defender a su amigo. Todos eran unas malditas porquerías.
Todos se retiraron del lugar, dejando a Louis y a su amigo solos. Esas eran las consecuencias de no esconderse, de mostrarse tal cual eran.
Louis estaba dolido, y no por la humillación, sino porque pensó que Harry era mucho más que una reputación.
— ¿Donde están tus gafas? — preguntó el rubio mientras buscaba desesperadamente las gafas de su amigo.
— Abrázame, Ni. — suplicó Louis, desde el suelo. Niall no lo pensó mucho para acercarse al cuerpo tembloroso de su amigo y abrazarlo.
[...]
Su pasado estaba volviendo, y no quería que eso pasara. Había tratado tanto de olvidar eso, y no quería que el pasado volviera para atormentar su presente y futuro.
Christian Jones. Ese maldito era su pasado, y ahí tuvo que haberse quedado.
— Harry, que bueno verte. Desde que salimos de la Universidad, no he sabido nada de ti. — el rubio se había acercado a Harry para estrechar su mano.
Louis observaba toda la escena sin saber muy bien lo que tenía que hacer. No sabía que haría Harry, ¿lo presentaría como su esposo? En ese momento, su más grande miedo era que Harry se avergonzara de él. Sí eso pasaba, definitivamente, no lo soportaría. No soportaría ni una sola humillación más. Se acabaría, si Harry lo hacía, se acabaría... para siempre.
— Chris, es un gusto verte.
Claro que para Harry, no era muy agradable. No podía culpar a Christian por las cosas del pasado, puesto que él no lo obligó a hacer nada de eso, pero igual, la espinita seguía ahí; él no le agrada, no podía soportar su presencia ahí.
— ¿Son tus hijos? — señaló, a Austin y Sienna. Harry asintió con orgullo y con una gran sonrisa en su cara — Son hermosos.
— Gracias...
— ¿Estas casado? — volvió a cuestionar.
Louis pudo escuchar la pregunta. Su corazón comenzó a latir rápido. Estaba realmente nervioso, de la respuesta que diera Harry, dependía el futuro de su relación.
— Sí, estoy casado. — respondió su titubear con orgullo y felicidad desbordando por cada poro de
su cuerpo —. Con él mejor hombre del mundo.
Los ojos de Christian se abrieron por completo. No podía creer que lo estaba escuchando.
— ¿Él? — fue lo único que atinó a decir.
— Sí... Louis, ven.
Louis no se movía de su lugar. La mirada de Christian estaba concentrada en él... y tenía miedo.
— Papi Lou... — escuchó la voz de André — Papá te está hablando.
Lentamente, y con André aún en sus brazos se acercó a ellos. Al llegar, Harry tomó a André entre sus brazos.
— Te presento a mi lindo esposo... Louis William Tomlinson Styles.
