Two Worlds ͭ ⷶ ͤ ᷜ ͦ ͦ ᷜ

♡29♡

Tres días habían pasado, Tres días en los que estuve enfermo, más bien, sólo no quería comer nada, me sentía triste, era obvio ¿no? Perdí a mi bebé.

Los otros dos simplemente duermen tranquilos a mi lado, sus rostros eran muy parecidos, su cabello era un tanto extraño, uno de ellos tenía el cabello negro, como era de esperarse, el otro tenía cabello de plata y cabello oscuro...

----Hey ¿aún no te animas a comer?---me preguntó la mujer que me había rescatado, negué suavemente con un puchero.

----perdóneme pero no quiero nada---mencioné a la amable mujer, que sólo sonrió comprensiva.

Y es que de verdad sólo estaba esperando recuperarme un poco, porque aún dolía mi cuerpo, tampoco es como si estuviese planeando quedarme aquí, de ninguna manera lo haría, no me quedaría a estorbarle a ésta amable mujer, sólo estaba buscando mejorar un poco para poder darle las gracias y marcharme, pero más sin embargo un problema que me había chocado era ¿a donde iba a ir? Es decir, estoy devuelta aquí en el bosque lluvioso, mis padres viven mucho más allá de la frontera, simplemente no puedo llegar después de desaparecer, no puedo llegar con dos bebés como si nada hubiese pasado, no puedo llegar a la casa de mamá a decirle que me acepte, es que... No quiero ser una carga inútil, si iba a casa, que no estaba muy lejos, papá se molestaría conmigo y Lisa mi hermana se reiría de mi desgracia, lo único que cruzaba mi mente era el rehacer mi vida sólo, sólo mis hijos y yo, en las afueras del pueblo, porque sabía que el cabello platinado que poseía uno de mis niños era un problema, la gente al verlo sentiría miedo y de ninguna manera yo le permitiría crecer en ese ambiente, así que seríamos sólo nosotros aislados, sin que nadie sepa de nuestra existencia.

[...]

"Hola, lamento mucho no saber aún su nombre, es usted una persona muy amable, en verdad tengo que darle las gracias por tenerme aquí con usted durante ésta semana que estuve un poco mal, señora, prometo, se lo prometo, cuando sea grande, responsable y tenga algo que ofrecer, vendré con usted para darle todo lo que se merece, no se olvide porque yo cumplo lo que digo, en fin, el punto es que estoy sumamente agradecido con usted y su acto de gratitud, lamento irme sin despedirme de usted, pero es mejor así, porque sé que usted no me dejaría ir, lamento dejarle ésta nota en vez de decírselo directamente, pero simplemente no soportaría quedarme a incomodarla, espero verla pronto, quizá venga a visitarla en unos años, hasta luego y muchas gracias"

Al terminar de escribir, pegué la nota en la mesa, donde obviamente sería legible, tomando a mis dos bebés junto a una manta que la mujer nos regaló salí de la casa cerrando el pórtico a mi espalda, suspiré para caminar hasta un lugar donde exactamente nadie conociera, cerca al puente de la frontera pasé, no asomaba nadie por ahí, así que rebusqué por ahí a ver si encontraba el cadáver de mi hija, pero no encontré nada, quizá lagrimée un poco, pero seguí caminando por la orilla de la frontera, arrastrando mis pies, noté que estaba cayendo una leve brisa, nada fuera de lo común, así que mucho después de caminar, la frontera y el puente se perdieron de mi vista, había un riachuelo por ahí, así que me dirigí caminando hasta la parte alta de aquel, imagino que a nadie se le ocurriría vivir ahí...

Habían varias lianas por ahí, todo se veía sumamente poblado por árboles, así que simplemente por curiosidad, asomé mi cabeza por en medio de la cortina de lianas, vaya sorpresa, porque era como un pequeño pasadero a otro lugar del bosque, cuidadosamente crucé y cerré la cortina, para mi sorpresa, había terreno plano, el césped estaba verde, la lluvia no era tan feróz, habían flores y unos cuantos animalitos, era extrañamente perfecto.

Con suma delicadeza me senté en el césped, acostando los cuerpecitos de los bebés en el suelo, claro, sobre la manta, así que me puse de pie de nuevo, miré a mi alrededor.

Habían varias ramas de los árboles de alrededor caídas, así que tomé la que era más recta, apuntando hacia el otro lado del pequeño campo cerré los ojos <<necesito mucha madera>> un lazo de luz salió de la vara, sonreí al ver eso pero se desvaneció en cuanto me emocioné, quizá debía tomarlo más en serio y concentrarme, cerrando los ojos de nuevo <<necesito tablones de madera>> aún con los ojos cerrados, al tener en claro cuál era la posición del árbol frondoso, apunté con la vara, con máxima concentración, un ruido muy escandaloso me hizo abrir los ojos, resultó que el árbol cayó al suelo derribado, cosa que significaba que iba en buen camino, entonces pensé de nuevo lo de los tablones, en unos cuantos minutos ya tenía más tablones de los que podía contar.

Asombrado por lo que acababa de hacer miré hacia un lado, donde los niños seguían acostados sobre la manta, por suerte no les molestaba el ruido que estaba haciendo y sólo se mordían sus propias manos, no tenían dientes así que no se harían daño, eso creo...

Quizá usar magia no es tan difícil, o al menos no me ha parecido del todo complicado, no tenía que estar trabajando en escribir hechizos como lo hacía Taehyung la mayoría del tiempo, yo...simplemente lo pienso y se hace.

Para el anochecer, al menos tenía una amplia estructura y un techo, mañana lo continuaría, así que después de unos cuantos suspiros me recargué en la única pared terminada que tenía la "casa" si es que se le podía llamar así, dejé la vara reposando a mi lado y me acosté junto a los niños, cubriendolos de la temperatura, quizá para mi era normal, pero para ellos no, así que como última decisión, después de mucho tiempo tomé mi forma lobuna, mi pelaje tricolor brillaba al igual que la última vez, ésta vez si que abrigué a mis cachorros.

(Estoy comenzando a editar los primeros capítulos, porque digamos que ésta historia está cercana a su final, hay un enredo más pero el final no está tan lejos XD)