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-----Después de ese día fue que ustedes terminaron volando durante casi un año porque yo no sabía como deshacer los lazos de magia----Reí mientras les contaba la historia a los dos chicos que me miraban estupefactos, ahora simplemente tenían cinco años, que pasaron volando.

-----¿Y por eso es que Yeonjun no puede caminar bien?----Reí nervioso al notar que el más inteligente de mis hijos comenzaba a preguntar esas cosas.

----No~~ es sólo que como ustedes son hermanitos, siempre hay uno más débil porque la repartición de cerebro o yo que sé no fue igual porque ustedes son tres, digo dos, a demás aún son muy pequeños por eso no caminan tan bien aún.

----Papi ¿entonces no tengo cerebro?----Me preguntó Yeonjun mientras se frotaba un ojo.

----Claro que si mi bebé---acaricié su cabello.

Ambos se encontraban sentados frente a mi, hace ya varios años cuando los vi por primera vez, según aquella mujer el primero en salir fue Soobin, por tanto significaba que era el mayor, claro, sólo por unos cuantos minutos,

El menor de los chicos se encontraba intentando comer su propia mano, no tenían hambre, sólo era una fea costumbre que yo mismo me encargaría de quitar, elevé mi mano retirandole el pulgar de la boca----No te chupes las manos----Regañé, Yeonjun me miró con un puchero pero no me doblegué a su táctica----Mejor~ vamos al jardín----tomé a cada uno de una manita ayudandolos a levantar, caminamos juntos hasta el jardín y nos sentamos en el césped, los alrededores seguían igual de hermosos como la primera vez, por su puesto también me encargaba de cuidar las plantas, también protegiendo el pequeño "santuario" con la magia que había aprendido a desarrollar.

Había intentado construir lo más parecido a un hogar, una casa simple pero práctica que funcionaba, manteniendo la comodidad, para mi era perfecto, éramos sólo yo, mis dos bebés y la naturaleza.

----Chicos ¿quieren escuchar una historia?---Soobin se encontraba tirado jugando con hormigas, me recordaba a mi en varias ocaciones pasadas.

----¡si!---Gritaron emocionados ambos chicos, dejando plantadas sus otras actividades, dándome la máxima atención.

----Pues... Es más como algo que me pasó----Comencé---¿Sabían que ustedes dos tienen otro papá?---ambos me miraron negando----Tienen otro, cuando dos personas se enamoran, se supone que primero se conocen, se arregaln, tienen bebés, yo no terminé de conocerlo, pero igual decidí tenerlos a ustedes, su otro papá era muy bonito, quizá lo sigue siendo, cuando supo que los tendría a ustedes se emocionó mucho, estaba muy feliz, de hecho ustedes se llaman Soobin y Yeonjun por petición de su padre.

----¿y donde está mi otro papá?----Me preguntó Yeonjun, no esperaba esa pregunta de su parte, la esperaba más de Soobin, pero de todas formas sonreí admirando sus orbes achocolatados que desde el interior al exterior traía de la oscuridad la claridad, sus ojos eran un tanto extraños, desde la pupila todo era oscuro pero a medida de que se extendía por el iris sus ojos tomaban un color miel.

Y es que cuando me preguntaba ¿donde está? También hacia que me preguntara exactamente lo mismo, no sé porque jamás volvió por nosotros, aún desarrollé mi vida lejos de la multitud por si decidía venir para que no se preocupara por nada----Papá es un Príncipe, como de las historias mágicas, está muy lejos de aquí, protegiendonos de los malvados hombres del pueblo nevado, estoy seguro de que algún día vendrá por nosotros y estará muy feliz por verlos.

----Papi, ¿entonces tu también eres un Príncipe?----Me preguntó Soobin, acaricié su cabello negro.

----Se podría decir que si, técnicamente aún sigo siendo la pareja de él----Mi mano se dirigió a mi cuello donde aún se encontraba la marca de sus colmillos, apenas levemente apreciable, incluso a veces.... Podía sentir por ahí sus emociones, justo ahora por ejemplo, se encuentra muy enojado, no tengo idea, pero me hace sentir sumiso, aún si estámos a kilómetros de distancia, ésta marca sigue uniendome a él----Si, sigo siendo como un Príncipe, sólo que no me llegué a sentir cómo uno, tampoco me agradaba ser uno----incluso ahora con mis veinte años no he cambiado de opinión...

Por un momento se me escapó una lágrima de esas traviesas, al recordar que quizá nunca más me lo encontraría de nuevo ni por casualidad----Papi, no llores----Me abrazó mi hijo menor, seguido por el mayor, ambos me derribaron al suelo, acostandose sobre mi cuerpo dándome muchos abrazos.

Ahí fue cuando supe que en verdad ellos eran lo único que tendría de Taehyung, que serían lo único que me haría sentir mejor cuando lo extrañara...






(Estoy intentando terminar ésta historia para el mes. De Julio, las ideas ya están organizadas y estructuradas, sólo falta mi tiempo para escribir) WuW feliz día, tarde o noche <3

Two Worlds  ͭ ⷶ ͤ ᷜ ͦ ͦ ᷜDonde viven las historias. Descúbrelo ahora