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– En serio ¿cómo pueden existir personas así?– Y se seguía quejando Lee mientras conducía hacia su mansión.

Habían salido de la casa de los Kwon hace unos cinco minutos y Lee aún seguía criticando a Ji Yong y a la familia Kwon en general, Jimin estaba harto de eso.

– Entonces la hipocresía es algo muy común entre ricos.– Habló Jimin después de escuchar todos esos insultos hacia sus "aliados".

– Jimin, silencio.– Ordenó su madre entre dientes.

– Me pregunto si el señor Kwon estará diciendo lo mismo de nosotros en este momento...– Ignoró a su progenitora.

– Jimin, sabes que estoy en lo cierto.– Dijo Lee mientras seguía conduciendo.– Ese marica ¿va a ser nuestro próximo aliado? Eso es lo que sucede cuando no educas bien a tus hijos.

– Ji Yong es bisexual, es alguien muy listo y quizás atento. El cargo que se le dará le va muy bien.

– ¿De dónde te sacaste esas palabras?– Se burló el señor.

– Detesto la hipocresía. Usted se queja de los homosexuales diciendo que son "poco hombres" cuando usted no es capaz de decir lo que realmente piensa de las personas en su cara por temor de perder "la fama".– Bufó.

Lee se detuvo de repente y después miró a Jimin con una mirada acusante.

– ¿Qué tú jamás te callas?

– Sólo digo lo que pienso, desde que lo conocí me he sentido asfixiado todo el tiempo.

– Si te sientes "asfixiado" ¡¿Por qué no te sales a tomar un poco de aire?!– Dijo ya fastidiado.

– No me refería a eso, pero ya que lo dice, no sabía que se podía hacer eso si no ya lo habría hecho desde hace más de cinco minutos.– Abrió la puerta.

– Jimin, no bajes.– Lo miró su madre amenazante.

– Pero Lee dice que puedo bajar.

– Si te bajas, ya no subes.

– Pero si las cosas se ponen cada vez mejor.– Sonrió.– Entonces si me bajo, ustedes se van y yo me quedo. Es como si me abandonaran.

– No es abandono si tú sólo te sales voluntariamente.– Habló Lee mirando a Jimin.

– Si me hubieran dicho que se podía hacer esto desde un principio, todo hubiera sido más sencillo.– Los miró a ambos.

– ¡¿Realmente te vas a ir?!– Volvió a decir la mujer.

–Desde que ese señor llegó a nuestras vidas ha sido un total infierno. Me gustaría estar contigo, madre, pero sé que si te dieran a elegir entre Lee y yo, inmediatamente escogerías a Lee

Ella se quedó callada por unos segundos hasta que cuando Jimin estaba a punto de bajar, habló.

– No hagas cosas de las que luego te arrepentirás.

- ¿Por qué crees que voy a bajar?– Sonrió ladeado.– Mi hogar está en Busán.

– ¿Abandonas tus estudios? Si te vas, dejas todas tus cosas allá.

Jimin se quedó callado. Sabía que si bajaba iría corriendo a los brazos de Jungkook y que posiblemente la señora Jeon lo apoye, pero aún así no quería ser una molestia ni mucho menos con su divorcio. Lo mejor sería esperar.

Cerró la puerta y se colocó su cinturón de seguridad para después cruzar sus brazos haciendo un puchero. Lo último que vió fue la sonrisa triunfante de su madre. Lee arrancó y Jimin simplemente colocó sus audífonos como de costumbre mientras mensajeaba con Jungkook.








Molesto Park • Kookimin Donde viven las historias. Descúbrelo ahora