capítulo 15

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PARK JIMIN

El día de la fiesta que organizó Kibum había llegado, eran las 7:00 p.m y ya estaba en aquella fiesta, incluso habían más personas que las que creía que serían y eso que aún empezaba la fiesta.

– Jiminnie, llegaste.

– Hola, Jinki.– Lo saludé de vuelta con una sonrisa

– ¿Gustas algo para tomar? Tenemos refresco, jugo, agua y las bebidas alcohólicas hasta las ocho de la noche.

– Agua está bien, Jinki.– Respondí con una sonrisa

– Bien, entonces ven.

Asentí, Jinki me llevó a la cocina, en donde realmente no había nadie ya que todos se encontraban en el patio de la gran casa y parte de la sala. Me sirvió un vaso con agua y agradecí cuando me lo dio.

– Ahorita regreso, Jiminnie. Kibum me dijo que lo ayudara a que todo esté en orden.

– Sí.

Jinki sonrió y después de unos minutos entró a la cocina Jeon quien se veía enojado.

– ¿Dónde está el alcohol?

– Hasta las ocho de la noche.– Respondí.– ¿Tan joven y bebiendo alcohol?

– Se supone que no debería de importarme Yerim.– Suspiró frustrado.

Yo no dije nada, simplemente seguí tomando mi agua escuchándolo quejarse.

– Vino con otro chico y se estaban besuqueando en el patio.

– ¿Y? ¿piensas emborracharte por tu ex?– Reí, pobre Jungkook ridículo.

– Es molesto.

– ¿Estás celoso?

– Un poco... ¡Espera! ¿por qué te estoy contando esto a ti?

– No lo sé.– Me encogí de hombros.– Tú sólo comenzaste a hablar.

– Dame eso.

Jungkook arrebató el vaso de agua de mis manos y después le tomó.

– Estúpido, es mi agua.– Me quejé.

– No estoy de humor para pelear.

– Pero tu me provocas, además no deberías de estar así por ella ¿realmente no la puedes superar? Ha pasado más de un año, ¿sabes?

– Pensaba que sí, pero...-

Me levanté de mi asiento y caminé hacia la salida ignorando lo que estaba diciendo.

– ¿Me dejarás solo?

– Hay una fiesta que me espera.– Lo miré burlón y sin más, salí de la cocina. No quería escuchar sus quejas de su ex.

JEON JUNGKOOK

Música, demasiada música, comida, bebidas y personas bailando y besándose con todo mundo, entre ellas Yerim. Entró con un chico, se subió a una habitación con otro y ahora estaba bebiendo con otro. Ella está loca. Pero poco a poco me fue importando menos lo que hacía.

Ya pasaban de las diez de la noche y Jinki se acercó a mí que me encontraba tomando un vaso de refresco.

– Jungkook.

– ¿Sí?

– ¿Puedes subir a Jimin a la habitación de Kibum?

– ¿Qué?– Lo miré totalmente extraño.

– Se quedó dormido en el sofá y tengo miedo que alguien le vaya a hacer algo, es muy lindo que se pueden aprovechar de él y la habitación de Kibum es segura. De hecho es la única habitación que tiene seguro, por eso me dio la llave...– Me mostró la llave y negué.

– ¿No puede ir alguien más a dejarlo?

– Jackson se acaba de ir, Kibum está supervisando, Minho está bailando y Taehyung estaba en las mismas o peores condiciones que Jimin, el idiota apostó con otro chico para ver quien tomaba más y ya sabes quién perdió así que ya vinieron por él.

– ¿Y tú?

– Imposible que lo llevé cargando para allá, probablemente los dos terminemos en el piso a penas intente cargarlo.– Rió.

– Ni modos, que ahí se quede.

– Pero...

– Me vale un comino lo que le pase al enano ese.

Me di media vuelta ignorando a Jinki  y me senté en un sofá de ahí en el que se podía apreciar a Park durmiendo y a unos chicos que se le estaban acercando. Yo mismo me sorprendí cuando inmediatamente me dirigí hacia allá lo más rápido posible.

– ¿Qué creen que hacen, imbéciles?– Les dije a los chicos que estaban enfrente del enano.

– No somos gays, pero ese chico se ve muy hermoso y en la escuela he escuchado que él sí lo es y quizás podamos...-

El chico no terminó de hablar porque le di un puñetazo en la mejilla.

– ¡Oye!– Se quejó tomando la parte en la que le pegué.

– Ni se te ocurra tocarlo ¿entiendes?– Estaba totalmente enojado, tanto así que él por el temor asintió.

– Y lo mismo va para tí.– Le advertí al otro imbécil que lo acompañaba.

Después cargué tipo princesa a Jimin sintiendo que era liviano ya que su cuerpo era delgado, y sentí que enrolló sus brazos en mi cuello.

– Las llaves.

Le dije a Jinki una vez estando enfrente de él y me las dio sin dudarlo y con un "gracias".

Subí las escaleras ignorando todas esas asquerosas escenas hasta que llegué a la habitación del fondo la cual, efectivamente estaba con seguro, la abrí, me adentré al cuarto y después la volví a cerrar con seguro.

Dejé a Park en la cama y por alguna razón me quedé mirándolo. Entraba un rayo de la luz de la Luna por la ventana que daba justamente en su rostro, admito que es hermoso así que me puse de cuclillas para observarlo más de cerca, aunque debo de admitir que mi mirada estaba más concentrada en esos esponjosos labios entre abiertos. Ni yo mismo me pude contener más y me acerqué a ellos para unirlos con los míos, era una sensación que nunca antes había sentido, incluso muy diferente que besar a Yerim ¿esto se sentía besar a un chico? porque se sentía tan bien y más cuando sentí que se estaba profundizando más el beso. Me separé y él seguía durmiendo así que únicamente sonreí y salí del cuarto. Este será un pequeño secreto mío.

Molesto Park • Kookimin Donde viven las historias. Descúbrelo ahora