Habían pasado varias horas desde el enfrentamiento con Hoseok, necesitaba desestresarse después de la disputa con su hermano, por lo que su mejor opción era bajar a ver al moreno para que le diera mimos. Tras la pelea, había hecho que Hobi apagara algunas de las cámaras de su propiedad, como la de su habitacion y la del sótano, entre otras. De esta manera, podía asegurarse de que su intimidad seguía de cierta forma intacta.
Al abrirse la puerta del sótano, a Namjoon se le escapó una de sus sonrisas caracterizada por sus dos hoyuelos. Era la primera vez que le veía en ese día, por lo que se levantó y se quedó en frente de él sosteniéndole la mirada. En ese momento, Jin se giró para asegurarse de que la puerta quedaba totalmente cerrada y asi evitar cualquier tipo de interrupción.
- Siento si no he podido venir a verte, digamos que he tenido ciertos contratiempos. Aún así, he bajado porque tenemos que hablar. - En ese momento Jin se puso tenso, su mirada indicaba cierta incomodidad y desconfianza que hicieron preocuparse al moreno. Este, intentando relajar el ambiente, cogió al omega de los hombros y se aproximó para intentar besarle. Amaba los besos del más bajo, pero de repente se paralizó, hubo algo que no le gustó ni un pelo. -Namjoon, tú... ¿conoces de algo a Jackson?
Namjoon se quedó sin habla, ese nombre nunca traía nada bueno tras de si y él lo sabia por propia experiencia.
- Si, le conozco muy bien. ¿Por que?. - Jin le miró directo a los ojos, cada vez le superaban más las inseguridades tras la revelación de ciertos datos unas horas atrás. Namjoon no podía despegar los ojos de las marcas que tenia Jin en el cuello.
- Aqui hago yo las preguntas.
-¡No! Quiero saber porque tienes chupetones en el cuello, los cuales, no he hecho yo ya que insististe de que nadie se podía enterar de lo nuestro.
- Eso no es relevante ahora Nam.
- Yo creo que si. Primero me dices que no diga nada, que nadie se puede enterar de que eres un omega, cuando a mis ojos querido, es mas que puto obvio. Y luego, tú mismo, te vas paseando con marcas de dios sabe quien como si fueras una zorrita a la que le gusta jugar con la gente. -Jin le cruzó la cara de un guantazo.
- Tú... ¡Pero tú que dices! Como puedes ser tan gilipollas y tan hipócrita. Él único aqui que ha jugado con alguien eres tú. Que ya lo se todo, Namjoon. Que no hace falta que sigas fingiendo. Así que yo de ti me callaría si no quieres que las cosas acaben mal para ti.
- ¿Me estas amenazando?
- Te recuerdo que eres mi rehén, por si se te había olvidado. Pero no te preocupes, me encargaré de hacértelo recordar. Por cierto, enhorabuena, has conseguido lo que te proponías, que era reírte de mi y de mis sentimientos, pero no te preocupes, soy más fuerte de lo que te crees. Así que mientras tu te pudres aquí, yo reharé mi vida.
Jin se separó del moreno y se giró a la puerta, abriéndola e invitando a alguien a entrar. Pasó dentro un chico de unos 25 años, calvo y de estatura media; parecía sacado de una serie de mafias rusas.
- Peniel, encárgate de él. Por ser la primera vez, que sea leve, que quiero tenerlo aqui durante una buena temporada.- Antes de salir de la habitación, Jin se giró y miró por última vez a Namjoon el cual se encontraba estupefacto. Si algo tenia que volver a matar al tigre interior de Jin, iba a ser esa última mirada llena de tristeza. De esta forma, salió de la habtiación dejándolos solos.
Peniel cogió al moreno y lo encadenó, lo arrastró amarrado de las cadenas y lo estampó contra la única estantería de la habitacion. Mientras lo tenía contra la estantería, este le cogió del cuello y le propinó un puñetazo con los guantes de pinchos que éste siempre tenía puestos. Esto hizo que el moreno hiciera el amago de caerse, pero Peniel no le dejó. Cogió una de las cadenas y le enganchó al techo, teniendo así más acceso para torturarlo, 360 grados de tortura para ser más exactos. Se dirigió a donde había dejado su maletín y cuando estuvo en frente suyo, lo abrió para empezar a sacar sus instrumentos. En este momento Namjoon se dió cuenta de que de verdad era un rehén.

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Too good to say sorry
FanfictionCegados por la envidia y la venganza, harán que el heredero más codiciado de toda Corea y el jefe de una importante mafia crucen sus destinos de una manera irremediable. Pareja principal: Namjin Parejas secundarias: random (ya lo iréis descubriendo...