Too good to say sorry

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Los ojos le pesaban y los pasos se volvían cada vez más lentos, pero no podía desistir ahora. Las lágrimas se juntaban con la sangre que había en su rostro, aunque no toda le perteneciera a él. En los brazos llevaba un cuerpo sin vida y en su interior podía presentir que en poco tiempo se encontraría en el mismo estado.

Sus piernas le pedían que parara y descansara y su mente le recordaba que si lo hacía, lo más probable es que no fuera capaz de reanudar su camino. Tenía que llegar hasta Jin, al menos para asegurarse de que alguien les hiciera justicia.

Con cada paso, sus heridas se iban abriendo poco a poco, haciendo que el dolor y el escozor se volvieran uno. El cuerpo frio del otro chocaba con su pecho, haciendo que este se oprimiera con cada roce, recordándole que aquel rostro no se volvería a iluminar jamas por su sonrisa. Quería llegar, quería abrazarse a si mismo y poder descansar al fin, que todo aquel sufrimiento se acabara en unos segundos, aunque el dolor era tal que creía que le acompañaría a la otra vida. Por fin vio a lo lejos el coche de Jin y su casa al fondo y con las ultimas fuerzas que le quedaban gritó:

- ¡Ayuda! ¡Que alguien nos ayude! – Cayó al suelo sobre sus rodillas, recostando con la mayor delicadeza que podía el cuerpo inerte en sus piernas. Vio una figura correr hacia ellos, y detrás algunas sombras que le seguían.

- ¡No! ¡Seungri, hermano! ¿Qué te han hecho? Despiértate, mamá nos espera en casa, tus hijos te esperan en casa. – TOP se agachó, cayendo para coger el cuerpo de su hermano menor entre sus brazos y abrazarle. – Dios mio, vuelve, por favor.

Jin se agachó para tocarle el hombro a TOP, el cual lloraba desconsoladamente la muerte de un hermano. Luego, subió la mirada a donde se encontraba Hoseok, le agarró de las mejillas para que este le mirara.

- Hobi, ¿Qué ha pasado? ¿Dónde te han herido? – Giro la cabeza hacia la gran casa - ¡Que alguien llame a Chan! ¡Necesitamos a un médico! – Volvió a posar la mirada en los ojos sin vida de Hoseok - ¿Dónde está Taehyung?

Hoseok abrió los ojos de par en par al oir ese nombre antes de volver a hacerse un mar de lágrimas, aunque estas ya no salían con fuerza.

- Ya no le siento Jin, creo... creo... - Se recostó en el pecho del mayor notando como su último aliento se aproximaba cada vez más – Se oyó un disparo, Tae cayó al suelo encima de un charco hecho de su propia sangre, luego hubo otro disparo, y otro y otro. – Como pudo levantó la cabeza para mirar a Jin – Se lo llevaron, yo solo quería... despedirme.

Todas sus fuerzas le abandonaron, cayendo encima de Seokjin. Chan llegó con dos ayudantes al lugar, encontrándose a dos almas rotas.

- ¡No, tú no Hoseok! Tienes que aguantar, yo no quiero estar sin ti. Me prometiste que no te irías y si lo haces serás un mentiroso, y tu, tu no eres asi. Tú no me puedes abandonar, tú no puedes, tú no puedes hacerlo... ¡Te lo ordeno! Tienes que aguantar Hobi, tienes que quedarte a mi lado ... por favor.