Cegados por la envidia y la venganza, harán que el heredero más codiciado de toda Corea y el jefe de una importante mafia crucen sus destinos de una manera irremediable.
Pareja principal: Namjin
Parejas secundarias: random (ya lo iréis descubriendo...
Entró en el despacho del magnate, el cual estaba bastante desordenado. Por delante suyo estaba Jungkook, que tenía la mano vendada, ya se encargaría mas tarde de preguntarle el motivo de su herida. Miró a su alrededor y pudo ver la cantidad de estanterías con libros que había en la estancia y se preguntaba si Namjoon se los habría leido todos. Quizás los rumores sobre que tenía una mente superior eran ciertos y su tarea para sonsacarle información le sería mucho más complicada. Se sentó en una de las sillas de terciopelo después de que el dueño de la casa le hiciera un gesto con la cabeza para indicarle que se acomodara. Oyó la puerta cerrarse tras de él, dando la señal de que se encontraban ellos dos solos.
- Bueno, Namjoon, nos volvemos a ver.
- Pareces sorprendido, últimamente parece que solo tiene ojos para mí, oficial Winwin. Me pregunto si los tendrá igual para su pareja.
- ¿Debería sentirme ofendido?
- Es usted el que lleva viniendo a mi casa para hacerme las mismas preguntas desde hace dos meses. Como podrá comprender solo puedo llegar a dos conclusiones: o tiene muy poca memoria para acordarse de lo que le he dicho la anterior vez o, simplemente, está tan enamorado de mí que no puede evitar venir a verme.
- Ya le...
- ¿Qué si ya me gustaria? La verdad es que no, y creo que a su enamorado Jaebum tampoco. ¿O me equivoco?
- ¿A que quieres llegar?
- Mejor ¿A que quiere llegar usted? Si va a venir a hacerme las mismas preguntas, le voy adelantando que mis contestaciones serán iguales. Si son nuevas, se las contestare agradecido porque haya modernizado el repertorio. – Winwin se aclaró la garganta.
- Veo que te coges demasiadas confianzas, cuando ahora mismo podría esposarte y llevarte a comisaria. Es más, ganas no me faltan, pero por respeto a Jungkook y Kihyun a los cuales tengo mucho cariño, te mantengo libre y con el derecho de la duda
- Vaya, veo que expande horizontes con la nueva información, estoy realmente orgulloso de usted oficial. Asi que si no le importa, ¿me podría decir de que dudas habla?
- Vaya, pues tan listo no serás. ¿No te has dado cuenta?
Alguien tocó a la puerta y un omega entró en el despacho. Kihyun llevaba en las manos un plato de pisto y la boca llena, dándole una apariencia de ardilla.
- Oye Nam, ¿Por casualidad no tendrás pan, verdad? Es que me lo he comido y ya no queda. Ups, Winwin, no sabía que estarías aquí. – Ambos alphas miraron la escena sorprendidos.
- Kihyun, estamos reunidos, ves a la cocina a preguntar, pero ahora no podemos...
- Entonces no tienes, ¿no? ¿Y tú, Winwin? – El omega bajo la mirada y se quitó varias migas que adornaban su barriguita.
- Tampoco tengo, lo siento. Se te ve muy bien, me alegro
- Muchas gracias, espero que Jaebum no tenga tantos antojos como yo, a este paso no podré pasar por las puertas y nadie me querrá por estar gordito. – Namjoon seguía con el semblante serio, pero en su interior la escena no podía parecerle más tierna.
- Kihyun, tengo que acabar de hablar con Winwin, asi que, si quieres, espérate e intentamos acabar rapido. Cuando termine, te prometo que te llevare a comprar el pan que quieras. - Al omega se le iluminaron los ojos y no pudo hacer mas que pegar un gritito de la emoción.
Winwin se levantó y se giró al Alpha que seguía sentado.
- Nuestra charla no termina aquí, vendré otro día. Solo decirte, que, aunque no hemos empezado con buen pie y me de la sensación de que va a ser difícil que nuestra relación mejore, puedes contar conmigo. Al fin y al cabo, tu eres el que cuida a dos de las personas a las que más amo. Asi que te voy a advertir, y si dices que he sido yo, lo negaré. Van detrás de ti, nadie se cree esa patraña que te has inventado de que te fuiste por tu cuenta. Al contrario, todos creen que hay algo más, en la comisaria están planteando la teoria de que tú y Kim Seokjin tenéis a tu padre.
- Ya te he dicho todo lo que se, yo no se donde está mi padre.
- Y hasta que no se demuestre lo contrario tendras mi apoyo, pero como resulte que tu estas detrás de todo esto, te hundiré. A ti y a todo aquel que te ayudó. No me hice policía para que las injusticias estén a la orden del dia sin que nadie haga nada.
Los pelos de Namjoon se erizaron por un momento. Su mente iba a toda velocidad avisando de que si las palabras del policía eran ciertas, su hermano y Jin estarían en peligro.
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El día había llegado, hoy era la reunión con Jackson en la cual le presentaría a la persona misteriosa que le ayudaba. Por dentro estaba lleno de miedo. Sabía que esto era lo que debía de pasar después de traicionar de la peor de las maneras a su familia. Taehyung estaba dispuesto a conseguir de nuevo poco a poco la confianza de los suyos, y sobretodo, de la persona que siempre estuvo ahí para él, su hermano.
Le sudaban las manos y el pecho le picaba por el micro que llevaba pegado. Miró a los lados viendo dos sombras casi imperceptibles para cualquiera, las cuales velarian por su seguridad. Hoseok había insistido en acompañarle, aunque Jin se opusiera rotundamente, por lo que se tuvo que conformar con vigilarlo desde la lejania, con un arma de precisión la cual si todo iba bien, no debería llegar a utilizar.
El punto de encuentro estaba claro, pero, para su sorpresa allí no había nadie. Estaba en la azotea de un parking abandonado, en el cual solo se veía el cielo estrellado que se expandia por encima de él.
Seungri y Hoseok se localizaban en alguno de los edificios de al lado, escondidos entre la oscuridad y sin hacer ningún ruido. La zona en la que se encontraban era más bien tétrica, ya que no había ni un alma y casi todo estaba hecho escombros.
Cuando llegó al centro del lugar, detuvo sus pasos al ver algo a sus pies. Una pequeña cajita, nueva y brillante la cual destacaba por ser lo único con color en todo el lugar. La abrió y encontró un pequeño papel doblado en su interior, el cual contenía una nota:
"Hola pequeño Taehyung. No se si eres demasiado imbecil por confiar en mi o demasiado tonto para traer escolta. Pero sea cual sea el caso, quiero que sepas, que fuiste un gran aliado sin tú saberlo"
Levantó la mirada y se dispuso a correr del lugar. Se escucharon disparos. Todo se volvió negro.
- Namjoon.... ojalá te hubiera dicho... alguna vez... te quiero
