Clever than Ever(Is It Love?Daryl)[TERMINADA]

CAPÍTULO 29

RUBY

Aquella magia tuvo que ser interrumpida cuando escuché los pasos de Korovin cada vez más cerca de nosotros. De un salto me volví a sentar en mi posición inicial como un soldado cuando su capitán le ordena ponerse firme. Pero por mucho que intentase ponerme seria, algo había a mi alrededor que hacía adivinar hasta al más ciego, que yo estaba completamente excitada.

Y eso a Daryl le encantaba.

Me recoloqué el pelo como pude rehaciéndome la coleta de nuevo. Pero por mucho que fuera a una peluquería y me hiciera el recogido del siglo, mi rostro era un cúmulo de rojeces y mis pupilas seguían completamente dilatadas. Tampoco ayudaba que Daryl se relamiese de forma obscena mandándome el mensaje de que yo le había parecido deliciosa y que, en el momento que nadie mirase, me daría algunos otros bocados. Le di un codazo antes de que el rostro un tanto reflexivo de Korovin saliese del umbral de la puerta principal.

Me levanté inquieta y no me dio tiempo a preguntarle; él simplemente comenzó a hablar:

-Me han informado de varias cosas. La primera es que alguien ha llamado al teléfono de tu casa y están averiguando quién fue porque Eduardo cogió la llamada antes de que se percatasen mis hombres. Dicho esto, he de decirte que en algún momento, Eduardo se ha marchado de la mansión sin ser visto y sin dar ninguna especie de razón. Tampoco nos ha avisado a nuestros teléfonos y eso es lo que más me preocupa de esto.

-No puede ser que se haya marchado así, debe de estar en alguna parte de la mansión. Recuerda que el terreno es grande; él jamás incumpliría la promesa de vigilar mi hogar. Él es mi segunda persona de confianza en este mundo de mierda y jamás me abandonaría-Le dije con gran ansiedad pero Korovin parecía no estar convencido. Siempre que había algo grave o que tenía algún tipo de corazonada oscura, decidía escondérsela hasta confirmarlo todo al cien por cien, pero esta vez quería que me contara hasta aquello que él pensaba que eran simples conjeturas.

-Edward te lo suplico, si tienes algo rondando por tu cabeza necesito que me lo cuentes. Recuerda en el peligro que estamos.

Él asintió y se sentó justo donde yo estaba anteriormente. Se pasó las manos por su cabello ligeramente blanco y comenzó a hablar:

-Creo que Eduardo esconde algo porque lo siento un tanto distante desde hace unos días. Es cierto que nunca ha sido alguien que rezume amor, pero no suele ser tan así. Recuerda que ha sido el mejor amigo de mi hijo desde antes de que tú le conocieras así que básicamente lo he conocido toda la vida. También sé que si es algo grave él no dirá nunca nada.

-Pero debemos de hacer algo, no podemos quedarnos así quietos. Necesitamos que tus hombres den con él de la forma que sea. Quiero que comprueben si falta alguno de los coches por si acaso se ha marchado con uno porque entonces hay dos opciones; o se ha marchado solo a pie y ha ido a un lugar cerca o bien se ha ido con alguien.

-Quizás ha ido en autobús-Dijo Daryl pero pensé un poco y lo descarté. Eduardo odiaba las aglomeraciones de gente por lo que nunca iba en autobús o metro. El taxi era caro, pero podía ser una posibilidad ya que su sueldo no era precisamente malo. En cualquier caso, si él hubiera efectuado una llamada para contratar un servicio de taxi, quedaría reflejado en su registro y los hackers que estaban en mi hogar podrían detectarlo. Le di mi idea a Korovin y con una sonrisa sacó el teléfono para mandar un mensaje. Esperaba que las cosas no fueran tan graves como pintaban.

Tras diez minutos de silencio, Korovin guardó de nuevo el teléfono en el bolsillo y cambió completamente de tema:

-Me he fijado que Matt no está con vosotros así que supongo que habrá ido a pasear así que Daryl te encargo que vayas por él mientras que me ocupo de algunas cosas con Ruby. Estaremos en la primera planta la segunda habitación a la derecha. No tardes demasiado por favor, dentro de poco será bien entrada la noche.

Daryl asintió y se fue en la misma dirección que Matt tomó hacía algunos minutos atrás. Korovin me hizo una señal para que lo acompañase y le seguí maravillándome de aquella decoración tan magnífica. Una leve risa salió de la boca de él:

-Tranquila pequeña, te haré un tour con más calma, ahora debemos de resolver el tema de las identidades porque mañana vamos a tomar un barco turístico. Eso quiere decir que debes de parecer menos tú y más a otra persona completamente diferente, así que te cambiaremos la ropa y el pelo, por supuesto.

-Espera, ¿Qué vas a hacerme en el pelo? -Le pregunté un tanto tensa. Mi cabello negro y corto por la mandíbula era cómodo y me encantaba; no quería renunciar a algo así, pero parecía ser que mi querido compañero no estaba de acuerdo conmigo.

Él mantuvo el silencio hasta que llegamos a una habitación con colores demasiado pastelosos para mi gusto. A mí me gustaba el cuero, los colores oscuros y los ambientes sobrios. Pero todo eso era opuesto a mí y eso me provocaba arcadas.

Mi rostro era un chiste y Korovin se reía de él; aquello era una gran mierda y eso lo mostraba con claridad. No pude evitar preguntarle de quién coño era esa habitación. Él me respondió con una enorme sonrisa:

-De mi querida hermana, esta casa fue mi casa de crianza durante muchos años. La heredé de mis padres porque mi hermana digamos no era demasiado digna de confianza; era una derrochadora así que mis padres le dejaron algo no tan valioso como esta casa. Siempre se caracterizó por tener un gusto, digamos, particular.

-Que encantador-Le dije con ironía. Desde luego si me tropezara a esa mujer, le daría unas lecciones de decoración de interiores sin dudarlo.

Ambos entramos a aquel dormitorio y Edward comenzó a sacar ciertos productos de uno de los armarios del baño que se encontraba en una de las esquinas de aquel inmenso lugar. Desde un rizador hasta un tinte que cuando me percaté de su color, quise vomitar aún más.

- ¿¡Rubio!?¿¡Me tomas el jodido pelo!?

-Una señorita no dice palabrotas de ese tipo querida y menos si vas a ser mi hija por unas horas. Es hora de que te conviertas en Leah Korovin, una chica adinerada inglesa de gustos refinados que ha heredado de su tía sus mismos gustos.

Aquello iba de mal en peor, pero cuando pensé en lo que diría Daryl cuando me viera, me hizo querer hundirme más en las profundidades de la tierra.