Gracias al Quidditch ~ Fred Weasley [2]

IV

Los estudiantes de Hogwarts ya habían llegado al gran comedor, la cena había terminado, Dumbledore había dado su discurso típico de comienzo de año y había presentado a los nuevos maestros, las chicas estaban caminando en dirección a su sala común cuando el profesor Severus Snape las intercepto.

- ¡Hey! Pesadilla - Dijo el hombre en dirección a Kaida, quien corrió a abrazarlo rápidamente.

- ¡Padrino! Que bueno verte de nuevo - Dijo la chica.

- Si, si, pero no me abraces tanto, que la estupidez tuya se contagia - Habló Severus serio mientras la Gryffindor soltaba una carcajada - ¿Como estuvieron tus vacaciones? ¿Ese Auror de pacotilla te causo muchos problema?

- Sabes que no, Sev.

- Bueno, como sea, te espero mañana para tomar té en mi despacho, pequeña - Dijo el hombre acariciando el hombro de su ahijada para luego desaparecer por los pasillos.

- ¿No entiendo como no le tienes miedo? - Pregunto Taylor.

- Es mi padrino, y es un amor en el interior.

- ¡Ja! Muy en el interior será.

- Señorita Moody - La voz de McGonnagall se escucho detras de las chicas, y todas voltearon a verla - El director Dumbledore la espera en su despacho.

- Enserio Kai, ni siquiera han comenzado las clases y ya te metiste en problemas - Reclamo Angie.

- ¿Que hiciste esta vez? - Pregunto Alicia cruzandose de brazos - No me digas que te vengaste de los gemelos por tu cabello.

- No, no hice nada - Contesto Kaida ofendida por que sus amigas pensaran así, aunque no debía sorprenderle, se iba a vengar de todas formas, quizas los gemelos la habían ido a acusar anticipadamente.

- Okey, te esperamos en la habitación - Dijo Angie. Kaida se dirijio a la gargola que da a la oficina del profesor Dumbledore y toco la puerta del despacho una vez dentro.

- Adelante - Se escucho la voz del director.

- Profesor Dumbledore, ¿Queria verme?

- Efectivamente, señorita Moody - Dijo indicandole con la mano el asiento en frente de él, invitandola a sentarse - Quiero hablarle de un tema muy delicado , todos sabemos muy bien que Sirius Black ha escapado de la prisión de Azkaban.

- Si, profesor - Dijo la chica aparentando tranquilidad, aun no tenia la oportunidad de digerir bien la noticia, pero no podía perder los estribos frente al director.

- El ministerio de magia a recurrido a los dementores para proteger Hogwarts, como ya comente en la cena, lo que no dije es que el ministro los envió porque usted, señorita Black, residirá en el colegio junto con el señor Potter.

- Esta diciendo, profesor, que los dementores están en Hogwarts ¿Por mi y mi primo? - Pregunto Kaida. Dumbledore era de las pocas personas que estaba al tanto de la situación de parentesco entre ambos, así que no debía ocultar nada con él.