Criminal Love

10

Sehun

Miré a Yoona ayudar a Jaemin a alimentar a su padre. El pequeño derramaba la mitad del bocado por la forma en que se retorcía de risa cada vez que Chanyeol hacía alguna tontería.

Habían pasado ya casi 6 días desde que Chanyeol había despertado y había conocido a su hijo, pero al parecer hicieron click al instante, pues desde que Jaemin había entrado a la habitación Chanyeol lo había perdido.

—Todavía no me puedo creer que Chan esté despierto y jugando con nuestro hijo.— Dijo Baek sentándose junto a mí en el sofá de la habitación.

Las cosas con Baekhyun realmente nunca estuvieron mal, al menos por mi parte. Yoona lo ignoraba cuando estábamos fuera de la habitación de Chan.

Ella estaba realmente furiosa con él y con Luhan y no tenía nada que ver con el hecho de que ambos estuvieran relacionados con Wu Yifan. Era, principalmente, porque ambos le habían ocultado a Chanyeol y le habían negado la oportunidad de conocer a su sobrino de forma personal.

Podía entender de dónde venía ese rencor, sin embargo yo no podía estar enojado con ninguno de los dos.

—Es increíble lo mucho que se parecen, ¿no?— Le dije a Baek con una sonrisa al ver como se iluminaban sus ojos al ver a su familia.

Justo en ese momento Jaemin dejó caer todo el plato de comida al suelo y de pronto comenzó a llorar, provocando que todos nos alertáramos.

—Perdón. Yo no quería...

Comenzó el pequeño cuando una molesta Yoona fulminó a Baek con la mirada.

—¿Qué tan malo eres con mi sobrino que llora así por un pequeño accidente?

—¡Yoona!— Gritamos Chanyeol y yo, reprendiéndola.

Jaemin comenzó a llorar más fuerte por los gritos y Baek corrió a sostenerlo y tranquilizarlo. Pude ver sus ojos brillar con lágrimas contenidas y tuve suficiente, fui por mi hermana y la saqué de la habitación.

—Es suficiente Yoona, no puedes dejar que tu rencor te supere. Tú nunca has sido cruel, pero lo que acabas de hacer estuvo fuera de los límites.

—No, Sehun, yo simplemente dejé claro lo que pienso.

—Lo hiciste con toda la intención de hacer quedar mal a Baekhyun frente a Chanyeol, Yoona.— Le dije y luego suspiré.— No puedes cuestionar la forma en la que educa a su hijo porque no es asunto tuyo.

Los ojos de Yoona se llenaron de lágrimas y comenzó a llorar.

—Lo siento, tienes razón, es sólo que yo...estoy tan molesta con él por ocultarme todo...

—Lo sé y te entiendo, Yoona, pero no puedes dejar que te gobiernen tus emociones.— Le dije mientras la abrazaba.— Baekhyun es una buena persona y un gran padre, estoy seguro de que lo sabes...

Yoona suspiró, se limpió las lágrimas y asintió.

—Creo que me iré a casa después de disculparme con Baekhyun. Necesito estar sola un rato.

Apreté a mi hermana y sonreí. Ahora, esa era la Yoona que conocía.

Dejé ir a Yoona y cuando dimos la vuelta nos encontramos con Luhan y Xiaojun parados a unos metros, observándonos. Mi hermana los saludó educadamente antes de entrar de nuevo.