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Sehun.

Me salí lentamente, cuidando de no perder el condón ni de herir a Luhan.

Sus ojos estaban vidriosos y distantes, realmente no estando presente. Al principio pensé que se había desmayado, entonces, cuando vi que sus ojos seguían abiertos y sólo tenía la mirada perdida comprendí que sólo estaba en una especie de trance post-orgásmico. Había leído al respecto algunas veces, pero en realidad nunca había presenciado algo así. Me sentía bastante orgulloso de haberlo ocasionado en realidad.

Luhan reaccionó entonces y cuando le sonreí y comenzó a llorar me alarmé.

—¿Qué sucede, XiaoLu? ¿Te he lastimado? — ¿Lo había lastimado y en realidad estaba en shock por el dolor? ¿Había sido muy brusco?

Luhan negó con la cabeza y pegó su rostro en mi pecho, sollozando y partiéndome el corazón.

—Yo no-no sé por qué lloro... Es sólo que te-te amo mucho...

Sonreí y acaricié la cabeza de Luhan con dulzura.

—Me diste un susto de muerte, XiaoLu, pensé que te había lastimado o que-

—No es nada de eso Shixun. Lo que sentí...nunca sentí algo parecido. Es tan intenso...

—Yo también te amo, XiaoLu.

Después de eso Luhan se quedó dormido, acurrucado a mi lado y su respiración sirvió como una nana para mí porque de inmediato me quedé dormido también.

* * * *

El movimiento junto a mí fue lo que me hizo abrir los ojos y sonreí de inmediato al encontrar a Luhan tratando de liberarse de mi abrazo.

—Es muy temprano, XiaoLu, vuelve a dormir.— Murmuré y Luhan se congeló y luego me miró. Se veía comestible con su rostro hinchado por el sueño y un ligero sonrojo en sus mejillas. Su cabello era un desastre, pero nada de eso lo hacía ver menos atractivo.

¿Luhan era un ángel como pensé cuando lo conocí? Ningún ser humano podía verse tan atractivo recién despertado.

—Lo siento, no quería despertarte.— Respondió Luhan con voz ronca. Sexy.— Tengo que lavarme y bajar a preparar el desayuno. Xiaojun se pone bastante gruñón cuando se despierta y su desayuno no está listo.

Cerré los ojos y lo solté, estirándome y desperazándome. Luhan se levantó y fue directamente al baño. Escuché la regadera y me sentí tentado a acompañarlo para una repetición de la noche anterior, pero me contuve y me senté en la cama en su lugar, dando una rápida mirada al reloj junto a la cama. Eran las 8 de la mañana. No tenía que ir a trabajar hasta las 11, pero sabía que Xiaojun era madrugador, así que me vestí y salí de la habitación hacia la cocina.

Yo les prepararía el desayuno a ambos esta mañana.

* * * *

Luhan.

El olor de la mantequilla me golpeó tan pronto como abrí la puerta de la habitación y salí al pasillo. Sonreí, adivinando lo que sucedía y fui directo a la habitación de mi hijo para despertarlo.

Abrí la puerta y me quedé boquiabierto al encontrar a Xiaojun sentado en lo que parecía ser su cama recién tendida.

—¿Xiaojun?— Pregunté confundido y él me sonrió.

Criminal LoveDonde viven las historias. Descúbrelo ahora