Capitulo 5
Pov Ashley
¿Cómo puede ser tan mentiroso? "Siento mucho no poder ir a su casa, pero tengo un inconveniente familiar" ¡Grandisimo embustero! Me besa y luego se va porque ésa Cynthia lo llamó. Tiene que ser su novia para salir corriendo así tan a prisa. Tengo unas ganas de verlo para darle un fuerte puño que lo deje en el suelo. Desde que William regreso a Nueva York solo ha pasado una semana y estoy que reviento. No soporto a nadie que mencione su nombre en mi presencia y al parecer mi padre le encanta atormentarme porque no para de mencionarlo. Inclusive hablo de su madre una señora inteligente y emprendedora, como dijo mi progenitor.
- Ashley, Lance esta aquí nuevamente - dijo mi amiga entrando a mi habitación. Me senté de golpe en la cama y me asome por la ventana para ver al castaño con destellos dorados. Estaba parado con las manos en los bolsillos y luciendo mucho más varonil que cuando habíamos sido pareja. Sinceramente considero que nuestra relación era muy inmadura. Solo teníamos dieciséis años para ése entonces y nos creíamos los dueños del mundo.
Me recuerdo que nos enamoramos cuando teníamos quince y como nuestras haciendas eran vecinas nos encontrábamos todas las tardes o al amanecer en el río. Él fue mi primer amor y me hizo suya al amanecer en aquél río. Nosotros teníamos tantos planes y uno de esos era casarnos tan pronto cumplieramos los dieciocho años. Queríamos entrar a la universidad como marido y mujer, tontos enamorados al fin.
Solo que no me esperaba haber contraído aquél cáncer que me dejo sin amigos y sin novio. Aquél día cuando me dejo lo hizo con lágrimas en los ojos y en ningún momento dijo que no me amaba, solo decía que no podía estar conmigo en una situación así. Había llorado tomandome de la mano mientras decía que lo perdonara. Lo aleje de mi vida como él lo había pedido y luche por mi vida. Luego de sobrevivir le pedí a mi padre que me enviara a un internado en Ohio y Esmeralda me acompaño. Al principio me negaba a perdonarlo y lo odiaba, pero luego aprendí que no debería odiarlo porque él era un pasado que supere. Ya no lo odio, pero no deseo su cercanía.
Ahora solo estaba feliz que estaba con vida y limpia de cualquier cáncer. Todos éstos años me he mantenido visitando regularmente al médico y sigo estando limpia. ¡Gracias a Dios!
- ¿Otra vez? Voy a atenderlo porque no puedo seguir evitandolo.
Me levante decidida no me cambiaría para atenderlo así que me quede con unos jeans cortos amarillos, camisa negra de mangas cortas con escote en v, y unas sandalias negras amarradas a los tobillos.
- Botalo para que aprenda la lección.
Negue con la cabeza al escuchar aquéllas palabras de mi mejor amiga. Era evidente que Lance, no regresaba por amor y tampoco era que lo esperaba. Había pasado tanto tiempo que sabía que él solo quería mi perdón. Lo observe detenidamente mientras estaba de espaldas y se detuvo de golpe para girarse encontrándose así con mi mirada. Sus ojos se abrieron de par en par y aproveche para bajar los escalones.
- Creí haberte dicho que no quería tenería cerca - me cruce de brazos y no quite mis ojos de su mirada color verde aceituna. Siempre me habían gustado sus ojos porque los veía llenos de misterios, pero ahora me era totalmente indiferente. Él llevaba un pantalón crema con una camisa blanca haciéndole ver mucho más blanco de lo que era.
- Lo sé, pero necesitaba hablar contigo. Hace nueve años que no te veía y... No podía seguir sin verte - murmuro con la voz temblorosa y yo sonrei de medio lado-. Lance quiero que vayas al grano. No tengo tiempo - dije con indiferencia mientras de lejos observa a Santiago mirandonos. Metiche, pensé molesta.
- Quiero disculparme por haberte dejado cuando más me necesitabas. Fui un cobarde y me deje llevar por todo lo que mis amigos me decían, Ashley. Después de que dije todo aquéllo me sentí miserable, pero ya lo había echó y tú no querías verme. Sé...
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Destinado a amarte
Romance{Leer La fuerza del destino antes} William ya conocía lo que es amar intensamente y con la mujer más impresionante que no imagino que se enamoraria. Ella era su reina, su amor, su todo y se encargaría de hacer todo lo posible para recuperarla. Él...