Capitulo 15
Pov Adam
Nicoletta estaba peor que una vibora de cascabel y verdaderamente no quería arriesgarme a acercame a ella. Anoche lo hice para que viniera a dormir en la casucha que lleva años construida aquí, pero ella me tiro con un coco que me dio en el estómago. No quiero imaginarme que hubiera sido de mí, si el coco me daba en la cabeza. En estos momentos ambos estaríamos jodidos en el medio de la nada porque mi móvil lo tengo bien oculto y ella no lo encontrará.
Fue un error grandisimo secuestrarla, pero no tenía otra alternativa para estar una semana completa junto a ella. Sabía que estando en Italia no podría pasar tiempo junto a ella para así demostrarle que de verdad la amo y quiero estar con ella. Sé que me pase drogandola, pero opciones no tenía.
Ella esta sentada en la orilla de la playa y tomaba agua de la botella que le dejé a su lado en la noche. ¿Debería acercarme? Probablemente sí, pero pensaba que quería espacio.
— ¡Nicole te vas a quemar!
Buena excusa imbécil. Te pasas de inteligente, Adam.
Nicole me miro taladrandome con la mirada—. ¡Vete a la mierda! ¡Te sugiero que no duermas porque te llenaré la boca de arena para asfixiarte! — grito para luego lanzarme la botella. Estaba echa una fiera y eso me excitaba muchísimo.
— Si lo haces nadie vendra por ti — dije conteniendo las ganas de reirme. Nunca la había visto tan alterada y me gustaba de una manera masoquista.
Solte un suspiro y poco a poco me acerque a ella hasta quedar a su lado. Sabía que ella quería matarme, pero el que no arriesga no gana y no puedo perder el tiempo cuando los tengo contado.
— Nicole disculpame por haberte drogado para traerte hasta aquí. — Me sente a su lado y la observe por unos segundos.
Sus facciones eran delicadas, pero en este momento estaban profundas y sus ojos miraban el horizonte sin querer mirarme. En cierta forma extraño sus miradas. Nicoletta siempre me miraba con amor y ahora ésas miradas no las veo, no son mías. Quisiera volver hacerla reír, gritar, sonreír y gemir en mis brazos. Estoy loco por hacerle el amor, por amarla de verdad y demostrarselo en todos los sentidos.
— Llevame devuelta, Adam. ¿Qué ganas con esto? — pregunto encarandome con sus ojos inyectados de furia. No pude controlarme más y la aprisione en la arena.
Sus ojos grises se abrieron iluminando mi rostro. Estaba sorprendida y lo sabía. Se había quedado sin palabras y yo tenía tantas cosas que decirle. Nicoletta olía flores silvestres y sus labios estaban rosados, deseos de ser besados. Yo quería y deseaba besarlos.
— Te amo Nicole. Se que no me crees, pero de verdad te amo. — Atrape sus labios con una paciencia increíble y los saboree con suavidad. Nunca le había dado un beso como esté y era perfecto.
Su piel era perfecta y me encantaba. Ella no me había correspondido aún hasta que roce con mi lengua sus labios y ella se abrió a mí dejandome llenarla con mi lengua. Mis manos fueron directas a su cintura para memorizarme cada parte de su cuerpo. Esté beso era distinto y me lo estaba disfrutando.
— No. No puedo — susurro comenzando a llorar. Me detuve, pero me quede sobre ella observandola—. ¿Qué quieres de mí, Adam?— pregunto entre lágrimas y yo suspire.
— Quiero tu amor, Nicoletta. Se que mi gran error fue serte infiel y dejarte siempre sola, pero quiero remediar esos errores — respondí esperanzado de que ella me diera una oportunidad.
ESTÁS LEYENDO
Destinado a amarte
Romance{Leer La fuerza del destino antes} William ya conocía lo que es amar intensamente y con la mujer más impresionante que no imagino que se enamoraria. Ella era su reina, su amor, su todo y se encargaría de hacer todo lo posible para recuperarla. Él...