Ese dichoso día... (HS)

25. Chantaje

Por la mañana Harry me llevó a la universidad en su coche, apenas cruzamos tres palabras. Yo estaba metida en mis pensamientos, cuando Harry hacía el intento de establecer una conversación yo le respondía con monosílabos -Ajam, si, claro, no. Habíamos llegado a la universidad, yo me bajé del coche y  él se fue a trabajar.

La mañana pasó normal y tranquilamente. Ya era la hora de comer, cogí mi bandeja con comida y me senté con las chicas en el comedor.

-¿Qué tal chicas? ¿Alguna novedad?   -les dije sentándome-

-No... de momento nada.   -dijo Lisa-

Mi móvil sonó y todas nos pusimos tensas, lo saqué de mi bolso... 

-Es Harry.  -dije-

Todas respiraron. Descolgué el teléfono y me aparté de la mesa para tener un poco más de intimidad.

-Hola Harry ¿Pasa algo?.

-Hola pequeña. ¿Qué tal va tu mañana? 

-Bien, ¿Porqué lo preguntas?  

-Por saber... de tí. Ultimamente no hablas mucho y estoy un poco preocupado.

(Harry es un amor)

-No te preocupes cariño es que... tengo muchas cosas que hacer de la universidad y vienen los examenes, estoy un poco agobiada la verdad.   (Otra mentira para Harry)

-Bueno si es eso te dejaré más espacio para que estudies y te puedas concentrar más. ¿Nos vemos en la cena?

-Claro.

-Te quiero Bella.

-Y yo a ti Harry.

Ojalá pudiera contarle todo a Harry, siento que algo dentro de mí se rompe cada vez que le miento. Él sólo quiere lo mejor para mí y mi protección y yo lo estoy manteniendo al margen, lo estoy apartando de todo y siento que no es justo. Pero es por su propio bien, si algo le pasa a Harry por mi culpa... yo...   Basta, no debo pensar en esto. Todo se va a arreglar.

Era la hora de nuestra próxima clase, pasé por mi taquilla a coger el libro que me faltaba. Cuando llegué a mi taquilla, la abrí, cogí mi libro y entré a clase. 

La profesora estaba hablando, y la verdad no se de qué, no estaba prestando atención. Me apetecía dibujar, eso me relajaba. Abrí mi libro en busca de una página donde poder expresar mi arte cuando de repente ví una carta. Miré hacia mi alrededor para ver si alguien me miraba, todos y todas estaban atentos de la explicación de la profesora o en su defecto tomando apuntes. La abrí y me dispuse a leerla.

Hola mi queridísima Bella

Estás haciendo muy bien en mantenerte callada. Y así vas a seguir. Ahora tengo un encargo para tí ¿Ves la entrada a una obra de teatro que hay junto a esta carta? Pues tómala, es un regalo de mi parte. Ve sola, allí te enterarás de toda la verdad. El amor no siempre es sincero Bella tienes que aprender a mirar bien los pequeños detalles.  Si no vas... no verás la realidad.

                                                                                            Tu acosador preferido.

¿Qué? Pero qué está hablando de amor y detalles. ¿Qué hago? se lo debería de contar a las chicas... Aquí no dice nada que me prohiba contarselo a ellas.  Les mandé un mensaje de texto a todas:

-Chicas, tengo novedades. Nos vemos en la casa de Paige al salir. Urgente.

Al salir fuimos todas a la casa de Paige como les dije y les conté lo sucedido, les dí la carta para que la leyeran y me aconsejaran qué debía hacer.

-Tienes que ir... -me dijo Selena-

-Lo sé, pero tengo miedo ¿Y si es una trampa? Además no sé a qué verdad se refiere.

-Tengo una idea. -dijo Lisa- Nosotras te acompañaremos pero sin que nos vean, sacaremos entrada para esa obra de teatro y estaremos vigilándote, no te pasará nada, te lo prometo.

-¿Haríais eso por mí?

-Todas estamos en esto, juntas -dijo Paige-

-Gracias chicas, sois las mejores -las abracé a todas-

Llegó la hora de ir al teatro, todavía faltaban un par de horas para la cena, asique Harry todavía no me esperaba. Todas estábamos listas, nos pusimos un poco de incógnito con abrigos largos y gorritos y nos dirigimos al teatro para llevar a cabo nuestro plan. 

Las chicas sacaron sus entradas y entraron por separado, cuando todas estaban ya dentro entonces entré yo. Divisé disimuladamente donde estaba sentada cada una y ocupé mi lugar. Estaba nerviosa, tenía un mal presentimiento. La obra comenzó y las luces se apagaron. ¡Así no podré ver nada! 

Me llegó un mensaje al móvil, lo miré y era Paige.

-¿Has visto algo? Me aburro.

-No he visto nada raro, Paige centrate, esto es importante.

Ya había pasado media obra y no había sucedido nada. Y entonces lo vi... Vi entrar a Harry ¿Qué hace él aquí? Parecía que estaba buscando su asiento. Parece que lo ha encontrado. Se sentó al lado de una chica pelirroja. No entiendo nada. ¿Qué está pasando aquí?

Por un lado mi conciencia me decía que me fuera de allí y más tarde le pidiera explicaciones a Harry, por otro lado mi conciencia me gritaba que fuera hasta su asiento y le pidiera explicaciones ya. Miré a las chicas y ellas me miraron a mí. Todas tenían cara de confusión. La obra terminó y el público se puso en pie aplaudiendo. No podía ver bien a Harry con tanta gente, pero lo ví. Inevitablemente lo vi. La pelirroja se había girado y había besado a Harry en los labios. Y Harry no se aparta, no le dice nada, está... está devolviendole el beso. El dolor que sentí en el pecho fue tan grande.... tan grande que lo único que pude hacer fue marcharme de allí.