𝐈𝐍𝐃𝐄𝐋𝐄𝐁𝐋𝐄 ©J.JK #1

⸙ᴄᥲρᎥᴛᴜᥣ᥆ 06

Lo miré extrañada, ¿A qué viene eso?

—¿Por qué crees que voy a ser devorada?– pregunté sin mirarlo.

— Mm... Simple intuición– contestó sin importancia.

—Puede que tú intuición falle– le miré sin expresión.

Jungkook levantó una ceja y se incorporó. No pude evitar ver cómo sus brazos se tensaban y sus venas sobresalían.

—¿Quieres hacer una foto?–

¡Mierda!

—No gracias...– aparté mi mirada de él rápidamente. Escondiendo mi rostro que seguramente parecía un tomate.

¿Por qué narices te has quedado tanto tiempo mirando !?

— Escucha Caperucita...— escuché como se levantaba– Si quieres que mi intuición falle, mantente alejada de los lobos.– susurró en mi oído.

Casi me da un infarto, ni siquiera escuché como se acercaba.

Me quedé helada con sus palabras. Lo único que tenía que hacer era alejarme del bosque...¿No?

Cuando me di la vuelta Jungkook caminaba en dirección a su residencia.

—Parece que le agradas– Isabella se sentó a mi lado e Irene al otro. —Jungkook no suele hablar mucho, y menos con alguien que no conoce o no le interese. Durante el discurso de la directora tenía la mirada fija en tí.– sonrió burlona.

—Apenas hemos hablado...–

—Hablareis más con el paso del tiempo. ¡Ya verás!– me revolvió el cabello.

—Bueno pequeñas– se levantó y estiró su cuerpo. —Tengo cosas que hacer–

—¿Pequeñas? ¿No tienes nuestra edad?– preguntó Irene.

—¿Eh? Pues no, tengo un año más que vosotras y los demás tienen veinte años.– dijo obvia.

— Vaya, pensaba que eras de nuestra edad–

—¡Que más da la edad que tengamos!— rió– No estéis mucho aquí, sería peligroso. ¡Nos vemos!– Isabella corrió hasta la academia dejándonos a Irene y a mi debajo del árbol.

—¿No es genial?– dijo Irene mientras dirigía su mirada a mi rostro.

Alcé una ceja.

—Estamos con el grupo más Badass y populares de la Academia...– sus ojos brillaron.

—Si... Bueno...–

—Por no hablar de los bellezones que son– asintió con la cabeza.

—¿Y... Y si se meten con nosotras?– pregunté, siempre que andabas con estos grupos, te convertias en una diana para las demás personas.

—le pregunté lo mismo a Isabella. Se lo que pasa con estas cosas... Eres el juguete nuevo, ya sabes... ¡Pero no hay nada de que preocuparse! Nadie se atreve con el grupo de Jeon–

No me sonaba muy convincente. Ni siquiera conocía a Jungkook y ya me estaba dando una advertencia.

Nos alejamos del bosque y volvimos a la residencia, colocamos nuestras pertenencias y toda la ropa en las cómodas.

El resto del día fue normal, a diferencia de otros comedores la comida estaba bastante buena. El comedor estaba en la planta baja. Una gran sala blanca y azul pastel, lámparas de araña y un montón de mesas en círculo esparcidas por la sala. Al parecer tú no tenías que levantarte para nada, una vez que entrabas lo único que tenías que hacer era escoger una mesa y sentarte, pues ya había un plato de comida con una tapadera en la mesa al igual que las bebidas y el postre.