𝐈𝐍𝐃𝐄𝐋𝐄𝐁𝐋𝐄 ©J.JK #1

⸙ᴄᥲρᎥᴛᴜᥣ᥆ 29

--¿Qué ocurre?-- pregunto mientras escondía su cara en mi cuello y daba suaves besos en este.

-- Mi abuela va ha venir a casa y tengo que estar pronto...-- suspiré ante sus besos.

-- Por la cara que has puesto, no parece que te guste la idea.-- me miró.

-- Es como mi madre, creo que es incluso peor... Desde que murió el abuelo se ha vuelto una auténtica arpía y anda con su novio disfrutando del dinero.-- comenté con molestia.

Jungkook rió y volvió a atacar mi cuello, dando besos húmedos mientras que sus manos tenían la intención de quitarme la ropa interior.

-- Si quieres puedo hacerme pasar por ella Caperucita...-- susurró.

-- ¿No crees que sería muy turbio lobito?-- sonreí mientras lo acercaba más a mí.

-- Puede ser...-- me besó.

Rodeé mis piernas en su cintura, sintiendo de primeras aquel bulto que rozaba mi intimidad, dándome un escalofrío que recorrió todo mi cuerpo.

Aquel beso se tornó a uno más salvaje y necesitado.

Nuestras respiraciones se aceleraban junto a nuestros corazones, y aquella llama se estaba convirtiendo en un incendio si no parábamos.

-- Si seguimos así te lo haré en la mesa.-- gruñó en el beso.

Me sentía tan acalorada y cegada por la lujuria que no me importaba hacerlo en una mesa.

Hasta que recordé que no estábamos solos.

-- Jungkook...-- gemí a lo cual él me respondió tirando de mis bragas.

Agarré sus manos intentando pararle, pero dejé escapar otro gemido cuando se restregó contra mí.

Esto era el paraíso, se sentía demasiado bien, y parecía que no teníamos la intención de parar.

--¿Qué estáis haciendo?-- preguntó una dulce voz.

Aquella vocecita nos hizo ponernos alerta.

-- ¡Hye! ¿Qué haces aquí?-- pronunció Jungkook con dificultad mientras se separaba rápidamente de mí.

Yo por mi parte me baje de la mesa y coloqué mis ropas casualmente, como si no hubiera pasado nada.

-- Tenía sed...-- miró a Jungkook. -- ¿A qué estabais jugando?-- preguntó inocente.

Jungkook se quedó pensativo y aproveché el momento para hablar.

-- ¿Quieres zumo de frutas?-- hablé mientras me ponía a su altura. -- Dicen que si bebes ese zumo tus sueños se te cumplirán-- reí leve.

A Hye se le iluminó la cara y gritó un «Si» como respuesta. A su vez, empezó a cantar y salir de la cocina alegremente.

-- Por los pelos...-- suspiré.

-- Si... No me hubiera gustado mucho explicar el juego-- rió. -- ¿Se te cumplirán todos los sueños bebiendo zumo de frutas?-- volvió a reir.

-- Fue lo primero que se me ocurrió.-- dije en defensa -- ¿Acaso tienes?-- pregunté mientras miraba la nevera.

-- Pues sí, estás de suerte. Cuando mis padres están ocupados me dejan a mis hermanos, y como buen hermano mayor estoy preparado.-- dijo orgulloso mientras hacía una pose heroica.

-- Como un buen hermano...-- repetí sus palabras.

Hice una pequeña mueca al recordar a Lily, siempre pensé en que algún día seríamos buenas amigas, o simplemente hermanas de verdad, que se ayudan mutuamente y están ahí para apoyarse pase lo que pase.