04

518 61 19
                                    

Café, urgentemente necesita un café, lleva toda la noche despierto escuchando las notas de voz o más bien regaños de voz que su teléfono tiene, no se supone que eso pasaría, él debería de estar ocupado, mimando, cocinando, hablando, riendo con ella, no debería de tener el tiempo para llamar y menos a Zoro.

Eres mi mejor amigo, no entiendo porque te comportas así.

Tiene razón, es su mejor amigo, pero joder, él es el amor de su vida, aquello que le da sentido a sus días, la razón por la que quiere levantarse, la razón por la que lee cosas de cocina, sobre vinos, la razón por la que se especializo en arquitectura, quería construir su sueño, quería re-modelar y si es posible, crear desde cero su más profundo deseo, porque aquel local malgastado por el paso de los años no merece tenerlo a él entre sus paredes.

Eres un estúpido, un alga con patas completamente tonta.

Tenía razón pero era más un idiota, siempre se catalogó en esa palabra, IDIOTA porque solo pensaba en él, porque lo quería exclusivamente a su lado, quería que RORONOA fuese el apellido de ambos, que los reconocieran como la pareja del momento, pero no, para los idiotas los sueños no se hacen realidad.

Sabes que puedes decirme cualquier cosa, se supone que confías en mi ¿No?

¿Realmente lo hacía? Se decían la verdad por muy dolorosa que fuese, estaban en todo momento para el otro, jamás se dejaron solos, él le confiaba secretos, sus temores, sus miedos, sus inseguridades, sus todos, era transparente, pero Zoro no era como él, porque tenía secretos, no podía simplemente ser transparente porque existía un riesgo, el riesgo de ser juzgado por alguien más, tenía a su padre eso era más que suficiente, pero todo el mundo tiene secretos, no todos pueden ser escuchados por alguien más.

¿Dónde estás ahora mismo? Iré a buscarte

Y de alguna forma quería eso, que el viniese a buscarlo, que le dijera la falta que le había hecho a su vida, que se sentía perdido y que la única forma de mantenerse a flote con la realidad era acumularse de problemas, quería que le dijera como estaba, que se encontraba igual o incluso peor en ausencia de Zoro, quería una película de color rosa, en la que la protagonista se da cuenta que el amor de su vida siempre ha sido su mejor amigo. Porque realmente quiere eso, escapar lejos de todo, dejar de lado las preocupaciones, los miedos, los que dirán, y simplemente irse con él, pero la vida no es un cuento de hadas y mucho menos una película de color rosa.

No puedes seguir escondiéndote

Tenía razón, había tratado de todas las formas posibles ocultarse, de hacerse invisible o que al menos su presencia pasase desapercibida, o en este caso, su ausencia, pero hablamos de él, quien pone atención a cada maldito detalle incluso nota cuando algo no está en su lugar, por eso es que ambos se llevan bien, porque ponen todo el empeño posible en los detalles, en arreglarlos y volverlos a su lugar.

Te espero mañana a las 3 de la tarde en el All Blue

Ese mensaje, ese maldito mensaje estaba haciendo estragos en su mente, su boca se sentía reseca, la cabeza le daba vueltas y su estómago dolía a horrores, no había probado ningún bocado y por nada del mundo quería salir de su oficina, en múltiples ocasiones Robin había tocado a su puerta, su preocupación se podía escuchar en su voz - Estoy bien, solo han salido mal algunos cálculos. Saldré cuando termine - Le dijo en un intento de calmarla y de paso calmarse a sí mismo.

El reloj marcaba las 10 de la mañana, tenía que dormir al menos una hora si no quería terminar destruyendo de nuevo un teléfono, se recostó en el suelo, no tenía ánimos para llegar al sillón, cuando estuvo recostado, en medio de su gran oficina miro el techo, tenía que ser un hombre, tenía que enfrentarlo, mirarlo a la cara y decirle - No podemos seguir siendo amigos - Como si fuese tan sencillo, él es alguien curioso y seguramente lo bombardearía de preguntas, ¿Cómo las responderá? Podría mentir como lo ha hecho pero eso solo sería peor con el tiempo y decir la verdad no estaba en sus planes.

TENIAS QUE SER TÚDonde viven las historias. Descúbrelo ahora