Tan ruda como yo (Julian Casablancas y tú)

Capítulo 9

Lunes, primer día de escuela, último año.

Es todo lo que podía pensar Juliet cuando traspasaba las puertas del instituto, las miradas curiosas caían sobre ella cosa que no la molestaba, en cambio, se concentraba cada vez más en la imagen de Julian en su cabeza; la manera en la que él  vendría y la saludaría le hacía poner la piel de gallina, sus mejillas se ruborizaban pero nadíe podía notar eso mientras estuviera su cara escondida entre los libros. Al fin, llegó hasta el auditorio. Como muy bien lo suponía, el director iba a hablar unas cuantas palabras a los alumnos nuevos por el inicio del año escolar y después todos irían a anotarse en 8 cursos diferentes que se dictaban ahí. 

Juliet se sentó en una de las frías sillas y esperó, sacó de su mochila sus audífonos y cuando estaba por poner una de las canciones de Sex Pistols, alguien la agarró por detrás.

-Hola, de nuevo.- Se escuchó una voz masculina, era Julian.

-Pero si estás desde el año pasado.- Dijo Juliet dando la vuelta para verlo, se veía guapo con la casaca de cuero que llevaba.

-Sí pero solo era una "prueba". Querían saber que tan bien me acomodaba a la vida en este lugar.- Dijo Julian dando un salto y sentándose al lado de la chica pelinegra.- Nunca me dieron la "bienvenida", ni aquí ni las tipas de allá.- Julian señaló al antiguo grupo de (Tn)______; las chicas estaban en la puerta discutiendo sobre maquillaje mientras los miraban de reojo.

-No sé como pueden tener tanto interés en mí.

-Creen que les quitarás algún chico o eres una de ellas en potencia.

-No me interesan los chicos por ahora...-Dijo Juliet bajándo la mirada.

-Oh, te has enamorado.- Dijo Julian sin entender ni un carajo de lo que estaba pasando. Osea ¿Ella intentaba decir que volvería a aparecer su lado lesbiana?

-Se podría decir que sí pero no es tiempo de hablar de eso...- Juliet cambió de tema.- ¿Qué tal el fin de semana?

-Bueno, los chicos no me han mandado ni un mensaje y...

-¿Qué chicos?.- Preguntó Juliet con curiosidad, Julian no parecía tan fracasado como lo había pensado (Tn)_____.

-Unos amigos... viven en New York.

-Wow ¡New York! ¡Adoro NY!.- (Tn)_____ salió a flote por unos segundos, en los que Juliet reaccionó y volvió a esconderla.- Ejem, digo, que esa ciudad....Bueno, conocí a una chica.

-Ah ya.- Julian hizo una pequeña mueca casi invisible y se cruzó de brazos.- ¿Así que todas tus NOVIECITAS son extranjeras?

-Esto...no, solo que... olvídalo.- Dijo Juliet tratando de disimular su nerviosismo con un pequeño golpe en el brazo de Julian.

-¿A todo el que te pregunta tienes que golpearlo?

-Julian, me caes muy bien pero hay cosas que no debemos hablar, no aún, me falta conocerte.-Juliet se limpió los lentes y cerró los ojos para que el chico no sospechara quien era.

-¿Qué quieres? ¡¿Qué te muestre la pija?!- La broma la hizo reír como loca y todo el mundo volteó a verlos. Juliet estaba más que abochornada y en ese momento llegó el director y dio su discurso respectivo, toda la sala estaba en silencio. Hicieron pasar a los alumnos a inscribirse en los diferentes cursos, Juliet no se daba cuenta que Julian la seguía a todo momento y que se inscribió en absolutamente todos los mismos curso que ella, pero una persona sí: Frida.

Frida detestaba a (Tn)_____ con todas sus fuerzas, desde que se ingresó a la escuela fue objeto de burlas por parte de los chicos populares y al mudarse e ingresar a esa preparatoria no cambio mucho ya que aunque tuvo el gran honor de pertencer al grupo de las reinas del colegio y socializar con los diferentes chicos que había, igual paraban menospreciándola y era un cero a la izquierda. Ella nunca supo que era por su falta de lógica y su gran egocentrismo. Tenía un haz bajo la manga todo este tiempo: su cuerpo, era de medidas casi perfectas por lo que, según ella, era envidiada por las demás y no temía las acusaciones de sus amigas. Pero ahora, era la absoluta reina y nadie podía cambiarlo, ni siquiera (Tn)_____ que hasta donde sabía era la total diosa del internado donde se encontraba y ya poco le importaba la vida de sus ex compinches. Toda la vida había soñado con ser el centro de la atención y acabar con la antigua puta que lideraba la escuela, lo único que faltaba era desahacerse de la recién llegada, una perra fácil de matar.