Un día a dia de los Joestar.
- Au (Reencarnación)
- Hombres embarazados
- Muerte de personaje.
- Stand
Los personajes no son míos, esta obra es simplemente para entretener.
Guido Mista, un joven que ansiaba vivir sin preocupación, sin problema, con lo que la naturaleza le daba, su mamá Bruno. Ahora ese adolescente de 18 años estaba boca abajo en si cama escuchando la canción: "Pobre diabla" de Don Omar. El día que Giorno se fue no pudo aclararlo, no pudo dar sus sentimientos, ahora solo le quedaba el recuerdo de ese sexo tan apasionado y tierno que había tenido con su bello chico.
Por más que buscabara en Internet, periódicos, libros, redes de mala fama y de chismes, Giorno no existía en el mismo mundo de su familia. Giorno era el secreto Joestar mejor guardado, que el tuvo el privilegio de encontrar y hacer suyo.
Bufo nuevamente metiendo la cabeza en la almohada, había pasado un mes sin ver a Giorno, estaba frustrado, enojado, tomo una decisión. Cuándo el siguiente mes inició, él inició su búsqueda, flores, recetas, que cosas le gustaban a Giorno, que decía la prensa de su padre, en ningún momento apareció algún dado de la "madre" de Giorno, parece que toda la familia se encargó de ocultarlo, lo único que había encontrado era un nombre: Jonathan Brando.
***
- Mista-. Bruno, preocupado por la actitud de su hijo, fue a ver si necesitaba algo-. ¿Estás ahí?-. Siguió tocando por varios minutos sin obtener respuesta.
Abbacchio, su esposo, desesperado por oír tantas veces la puerta, fue a su habitación tomando su arma—. Respeto tu privacidad como adolescente cerrando la puerta, pero reafirmó mi autoridad como padre entrando de todos modos—. Disparó a la cerradura y pateo la puerta.
- ¿¡QUE!?-. Bruno volteó a la habitación, estaba vacía y la ventana abierta-. ¡Ese idiota hará que lo maten!
***
Mista se encontraba enfrente de la mansión Brando, a una semama de que se acabarán las vacaciones, Mista decidió enfrentar lo más lo asustaba, después del número 4, toco la puerta tres veces.
- H-Hola, yo, vengo a hablar con él señor Brando-. Un rubio abrio la puerta, tenía marcas debajo de los ojos y una rara bandaba de dos colores sosteniendo su cabello.
- No se quién eres, pero para venir a enfrentar al conde de tal manera tengo dos conclusiones: Amas mucho a Giorno o eres idiota-. Soltó una risa dejándolo pasar-. Ceasar Anthonio Zeppeli de Joestar, Bienvenido-. Respondió a sí mismo el rubio-. Él vampiro no tarda en llegar-. Notó como él rubio tomaba sus cosas-. Diré que fuiste valiente-. Dicho esto, se retiró de la casa.
Empezó a escuchar como todo empezaba a temblar, el aura empezó hacerse más pesada, una clase de neblina rara empezó a aparecer y alguien empezó a bajar las escaleras. Mista supo que iba a morir, pero rápidamente detrás de él apareció el rubio que le mantenía el mundo de cabeza, Giorno, rápidamente bajo y lo tomó de la mano para llevárselo corriendo, pero en un parpadear, ahora ambos estaban sentados en el sillón y él dueño de la casa enfrente de ellos con una mirada amenazante.
- Así que tu eres el idiota-. Pudo sentir como Giorno apretaba el agarré de sus manos-. ¿Para qué quieres verme?
- Quiero, quiero varias cosas-. Mista estaba temblando enfrente de Dio, la presencia del rubio mayor era demasiada.
- Que idiota-. Dio sonrió con sarna, Giorno miró a su padre de forma molesta por decirle así a Mista-. ¿Qué te trae?
- Quiero que me permita salir con Giorno-. Dio levantó la mano en señal de que siga hablando, levantó nuevamente la mano y Telence, quién apareció más rápido que nunca, le entregó una copa de vino, inconscientemente se acordó de Abbacchio-. Y que le diga a Giorno de donde proviene, así el sabrá quién es.
El sonido de cristal cayendo se hizo notable, pero el vino no estaba derramado, Mista empezó a sentir miedo al no saber que podría pasarle ¿Qué estaba pasando? De esas cuatro personas en la habitación, solo Giorno era consciente del uso de The World de su padre. Dio, molesto, se levantó tomando lo del cuello, lo arrastró consigo hasta poder dejarlo contra la pared.
- Vienes a mi casa escondido, abusas de mi hijo, juegas con sus sentimientos y sin saber nada vienes a exigir información del segundo padre de Giorno, vaya que eres idiota-. Apretó el agarre con la única intención de matar a Mista-. ¿Últimas palabras?
- ¡Amo a Giorno!-. Dio, sorprendido, lo dejo caer al suelo de forma brusca, Mista lo vio de la misma forma desafiante, lo vio como lo veía Jonathan cuando se presentó como él abogado de Erina para la custodia de George II, Giorno, quién estaba sorprendido, corrió hasta donde estaba Mista, poniéndose frente a él. Ahora su padre si iba a matarlo.
- Giorno, quítate-. Telence se acercó rápidamente para sostener a su amo y evitar que matase a alguien-. ¡Quítate, voy a matarlo!
- ¡No puedes!-. Mista reaccionó rápidamente y puso a Giorno detrás de él, temiendo que Dio lo golpeara, aún que eso nunca pasaría, Giorno abrazó a Mista, estaba asustado-. ¡Me enamoré de él a pesar de lo que me hizo!
- ¿¡Por qué!?-. Telence, quién intentó que su amo no diera un paso más, también quería saber el porqué.
- ¡Vi el mismo brillo en sus ojos, como el que viste en mi padre Jonathan!-. Fue lo único que pudo responder-. ¡Ese brillo qe te dice que todo estará bien!
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Telence soltó a su amo Dio, rápidamente se puso enfrente de ambos jóvenes, temblando de miedo, vio como su amo Dio les daba la espalda y se iba a su habitación, Telence no se movió y tampoco dejo que los chicos se movieran detrás de él.
- ¿Telence? ¿Qué está pasando?-. Antes de que su pregunta pudiera ser respondida, Dio salió volando a su dirección, Dio cayó sobre la mesa de centro-. ¡Papá!
- ¡Telence, sacalos de aquí!-. Una niña, morena, con dornos verdes en el cabello, se lanzó hacía ellos, parecía no tener más de cinco, quizás a lo máximo, ocho años por su altura-. ¿Quieres una pelea?
- ¡Papá! ¡Telence sueltame! ¡Papá!-. Telence, siguiendo órdenes, sacó a los jóvenes de la casa y los metió al primer auto que vio en la casa-. ¡Telence, cuidado!
***
- ¿¡Qué mierda quieres!? ¿Quién eres?-. Tiró a la niña, ya inconciente, al suelo, su sala estaba destruida, quería saber quién era el culpable, quién lo quería muerto.
- Dio, Dio, Dio-. Él nombrado iba caminado escaleras arriba-. Los niños fueron solo, un rencor del pasado-. Dio detuvo su caminar.
- Telence-. Dio empezó a correr escaleras abajo, no había dicho: la niña, en su lugar fue: los niños.
Plural.
- ¿Qué le ha hecho su nueva vida, amo Dio? Antes, hubiera matado a esa niña-. Escondido en las sombras observaba, Pucci, como pronto, Dio, tendría el Stand definitivo y cumpliría su objetivo nuevamente.
Así que aprovechó la distracción delantera para irse de ese lugar.
***
— ¡The World!—. Fue lo primero que grito al salir de la casa, pero fue tarde, otro niño, de cabello rosa, se había lanzado contra Telence, Dio había detenido el tiempo cuando el niño había clavado el puño de su Stand en el pecho de Telence, solo pudo acercarse y dar un fuerte golpe al infante para separarlo de su sirviente, entonces el tiempo volvió a su curso, guardando su Stand antes de que alguien lo viera—. Telence—. Vio el cuerpo, el golpe de muerte, fue casi instantáneo, Dio se agachó y le cerró los ojos, vio al auto como Mista abrazaba a su hijo para evitar que viera el cuerpo de Telence en el suelo—. Fuiste una buena herramienta.
Usuario: Telence T. D'Arby. Stand: Atum. Estado: Muerto.